tag:blogger.com,1999:blog-62173646826380625142024-03-21T22:05:24.655-07:00LUZ VERDENada sobre FÚTBOL me es ajenoUnknownnoreply@blogger.comBlogger27125tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-36159252947562809602012-06-05T19:12:00.001-07:002012-06-05T19:12:48.031-07:00TRIPLE PE, EL ELEGIDO.<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNc0Sm68jlvlpegNXxgKrYSgxmf35PhoTrs0iBFViIJhCXcfftzpgJhkBQXvpuaKrBCe8BXAduIJQxnIumFiG_RZr9Wsa_tlzVbxWUvS9pf1JcDDkf3NYSU9Hn2geG3Hi0QJTbgW6RlsM/s1600/balon-lleno-barro-rf_41.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="131" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNc0Sm68jlvlpegNXxgKrYSgxmf35PhoTrs0iBFViIJhCXcfftzpgJhkBQXvpuaKrBCe8BXAduIJQxnIumFiG_RZr9Wsa_tlzVbxWUvS9pf1JcDDkf3NYSU9Hn2geG3Hi0QJTbgW6RlsM/s200/balon-lleno-barro-rf_41.jpg" width="200" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Hay
hombres que nacen marcados por la naturaleza. Gente que uno la ve, y dice:
este sale boxeador… o futbolista… o
bailarín… Dotados. Tocados por la varita mágica, señalados por el destino.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así pasó
con <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro Pablo</st1:personname>
Peralta, protagonista de esta historia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Desde
sus primeros pasos, y aún antes, Pedrito demostró la impresionante habilidad de
la pegada. Perfilaba el cuerpo, ya desde chiquito, y le entraba al balón con
una técnica sólo reservada para los elegidos. El cuerpo en ángulo obtuso con el
suelo, brazo derecho erguido señalando el cielo, brazo izquierdo horizontal
regulando el equilibrio, y el empeine endiablado, casi un guante, entrando como
daga, acariciando el cuero en estocada fina y amorosa.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Apenas
iniciada su precoz carrera en el baby fútbol, “Triple P” era el hombre de la
pelota parada. Corners, tiros libres, penales, piques; cada pitazo era la señal
para el próximo toque mágico de su pie derecho que desembocaba en el festejo, o
en el Uuuuuh prolongado de su gente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pedro
asumió desde siempre ese rol, ese lugar de privilegio. Con la serenidad y la
responsabilidad de los distintos, se ponía al hombro los clásicos en cada
lanzamiento. Donde ponía la vista, iba la pelota. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Ya en
inferiores era el inicio de toda jugada preparada. De su botín salían el centro
justo para la cabeza de los lungos, el pelotazo a espalda de los centrales
rompiendo los orsay, la diagonal punzante para la entrada por sorpresa de los
volantes que perforaban cualquier esquema. <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro Pablo</st1:personname>, parado en el
círculo central, era la usina generadora que sueña todo entrenador, y el
objetivo señalado de los marcadores rivales para maniatar todo intento
ofensivo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Sin
embargo, como a veces sucede con los iluminados, Triple Pe no descansaba sobre
su ADN. Vivía puliendo su magia. Se quedaba horas después de cada entrenamiento
pegándole por arriba de las figuras de madera y buscando los ángulos con todas
las variantes posibles; al primer palo con comba cerrada, al segundo con cara
interna, tres dedos por afuera de la barrera, o pique sutil para la entrada del
nueve.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Acumulaba
horas perfeccionando una técnica que cada día se hacía más perfecta.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así
llegó a las manos del viejo Antonio Lema, veterano maestro de juveniles que en
los terrenos <st1:personname productid="de Casa" w:st="on">de Casa</st1:personname>
Amarilla vio por primera vez a ese mago llamado <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro Pablo</st1:personname> Peralta, Triple
Pe.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Cuando
Don Antonio lo vio clavando un misil de emboquillada casi desde mitad de
cancha, pensó que toda su vida, todos esos años de darle y darle a la pelota
enseñando, depurando, corrigiendo, habían sido sólo para llegar a ese momento,
en el pináculo de sus conocimientos, dando el último toque a esa joya en bruto
que el destino ponía delante de sus ojos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">El Viejo
Lema empezó a dedicarse a Pedro cada vez más, hasta llegar a hacerlo casi por
completo. Buscaba el detalle mínimo, la medida milimétrica, el perfil perfecto
para hacer de su discípulo el más grande de todos los tiempos. La obsesión fue
ganando espacio en su vida, llegando a postergar funciones esenciales en pos de
dedicar más tiempo y más espacio a ese regalo que la vida le había puesto
enfrente en los últimos avatares de su exitosa carrera docente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así fue
que Antonio Lema, luego de doce días ininterrumpidos de revisar una y mil
veces, videos de Nelinho, Zico, Platini, Francescoli, Maradona y todo cuanto
pegador hubiera existido en la historia del
fútbol, fue encontrado muerto en la salita de audiovisuales que supo
hacer construir Don Antonio Alegre, detrás del codo de Brandsen y Filiberto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Triple
Pe podía creerlo. Su maestro, el hombre con el que había compartido más horas
que con su propia familia, lo dejaba en plena curva ascendente de su búsqueda
de la perfección, en plena construcción del punto más alto de la física
aplicada al deporte. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Lo
empezó a soñar a Don Antonio noche tras noche: <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Busque la mano cambiada
del arquero, Pedrito…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Acaricie… acaricie la
pelota, no le pegue…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Apunte con los hombros y
busque la curva…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Cada
noche, Don Antonio seguía hablándole a Pedro en sueños, repitiendo conceptos,
remarcando ideas, reafirmando aciertos y
corrigiendo los pequeños errores, camino al diez absoluto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así eran
los días… el Maestro enseñaba sin estar y horas después Pedrito aplicaba sobre
el verde césped las palabras sabias.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y como
siempre ocurre en la vida de los genios, en algún momento un click, un golpe de
suerte, marca un antes y un después, un día “D” que cambia el rumbo para
siempre convirtiendo la virtud en milagro y el talento en magia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Aquella
noche de tormenta, <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro
Pablo</st1:personname> no podía dormir. Daba vueltas y vueltas sobre las
sábanas azuldoradas y los ojos seguían abiertos como lámparas y rojos como
fuego. Ya entrada la noche, desde la oscuridad de la ventana que daba a la
Avenida Patricios, un rayo fulgurante seguido de un trueno aterrador, asomó al
cuarto insomne de Triple Pe, que escuchó bajar el vozarrón divino:<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">En las bravas, nunca
asegure al medio Pibe, eso déjeselo a
los picapiedras, usté apúntele al ángulo, donde se juntan los palos… ningún arquero
llega ahí… Los grandes definen así…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y
después… el silencio absoluto. La calma intimidante. La nada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pedro
despertó varias horas después, aún aturdido por el trueno y la aparición inexplicable. Una y otra vez el vozarrón
golpeaba dentro de su cráneo: <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Al ángulo, pibe… ningún
arquero llega…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Donde se juntan los
palos…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 18.0pt; text-align: justify;">
<span style="color: navy;">- A-lo-gran-de!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y ahí
fue Pedro, bolsito en mano, después del entrenamiento, con su bolsa de pelotas
en la entrada del área grande. Clank! En el vértice izquierdo. Clank! En el
ángulo opuesto. Clank! Clank! Clank! Cada pelota volaba en comba angelical
hasta caer besando la soldadura donde palo y travesaño se juntan en un punto
soñado.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Una y
otra vez, el pelotazo de Triple Pe despertaba a las arañas causando la
admiración de los curiosos que se juntaban a admirarlo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pedro
seguía ensimismado en su viaje místico, con la seguridad de los que se saben
portadores de una verdad única, pero con la humildad de los que aceptan ser
mensajeros de una voz superior.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Encerrado
en su luz, su figura fue creciendo tanto como el misterio de su vida interior.
Sin haber debutado aún en la primera, fue tentado por los más encumbrados
apóstoles de las ciencias de la comunicación. Chiche Gelblung, Mauro Viale,
Anabella Ascar, Nelson Castro y Marcelo
Bonelli intentaron sin éxito llevarlo a sus programas. Pedro se mantenía en sus
trece, y a través de sus allegados acercaba una cordial pero firme negativa.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así
pasaron los meses hasta que llegó aquel el día. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Después
de racha incomprensible en la que llevaba quince meses sin convertir en las
divisiones inferiores, <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro
Pablo</st1:personname> Peralta salía entre los suplentes de la Primera
división. Llevaba una seguidilla de ciento cuatro tiros en el travesaño que era
difícil de creer, pero que a esta altura parecía interminable. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">A pesar
de los consejos de entrenadores, colegas y amigos, Pedro mantenía su silencio y
su extraña contundencia a la hora de clavarla en los vértices de cuanto arco se
cruzara en su camino. Ante cada tiro libre, o penal a su favor, los rivales se
le acercaban a la voz de Clank, Clank, Clank…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Sin
embargo, nadie se atrevía a pedirle a Triple Pe que dejara el lugar a otro. El
afán de que convirtiera para destrozar la maldición era más fuerte que
cualquier otra cosa, y la secreta convicción de que cuando entrara una,
entraban todas… <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Como
tantas veces ocurre con los elegidos, Pedro salió a la cancha por primera vez
en el clásico de siempre. Décadas de históricos enfrentamientos antecedían a
esta tarde inolvidable en la que Pedro pisaba por primera vez la alfombra
vegetal de la Bombonera de Buenos Aires. Una semana de lluvias y tormentas anunciaban
un clásico jugado al límite, de pierna fuerte y dientes apretados. A la hora
del inicio, el agua caía a baldazos y con los primeros minutos de juego, el
fango iba cubriendo el campo de juego en toda su extensión.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Así
transcurrieron los minutos, con despejes de puntín y barridas desafiantes con
los botines como lanzas. La guapeza hecha bandera, en “un clásico casi
borgiano, si se permite la paradoja” describía Víctor Hugo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y así
llegó aquel momento. La hora H del día D, que cruzan los señalados. El hito que
marca para siempre un futuro de gloria o Devoto, como decían los viejos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Para <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro Pablo</st1:personname> Peralta, Triple
Pe, esa hora y ese día fue a los cuarenta minutos del segundo tiempo, cuando en
un clásico que marchaba hacia un cero a cero inamovible, que clausuraba las
chances de ser campeones, <st1:personname productid="el Profe" w:st="on">el
Profe</st1:personname> Salas pronunció las palabras mágicas: “Venga pibe, a
ver si me lo gana…”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">El
corazón de Triple Pe ni se inmutó. <st1:personname productid="Pedro Pablo" w:st="on">Pedro Pablo</st1:personname> Peralta dejó de precalentar con el resto
de los suplentes, y con su parsimonia habitual desabrochó la campera Nike y se
paró al costado del cuarto árbitro esperando la detención del juego. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">El
espectáculo que era paupérrimo en la cancha, brillaba en las tribunas
eufóricas, sabedoras de estar viviendo un momento único. El Oleee, oleee oleee
oleeee… Pedrooo… Pedrooo era atronador. Bajaba de las gradas y penetraba las
raíces del maltratado césped conmoviendo los cimientos de la histórica
estructura de cemento que tantos ídolos había visto pasar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Ni en la despedida de
Hrabina vi así esta cancha…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Mirá nene… que esto
nunca en tu vida te lo vas a olvidar…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Los
hinchas morían por Triple Pe que todavía no había jugado un solo minuto en
primera. Pedrito había nacido ídolo, porque los ídolos nacen… vienen con ese
qué se yo debajo del brazo y nada ni nadie puede contra eso… <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Los
ídolos son ídolos por mandato del destino, y su vida parece escrita por un
novelista genial que paso a paso va dibujando una escalera de ensueño. Y eso
estaba pasando con Triple Pe Peralta…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Esa
pluma misteriosa que escribe la vida de los genios, brilló como nunca en ese
confuso borbotón de piernas en el borde del área y la pelota al cielo, en una
escena de película, cortada por el silbato del árbitro y el índice de la mano
derecha señalando el punto exacto de la falta. Explosión en las tribunas, tiro
libre en el borde del área con el tiempo cumplido, y Triple Pe en la cancha
para consagrarse definitivamente y dejar atrás esa seguidilla interminable de
travesaños y palos. Si había un día soñado para ingresar al altar de los dioses
xeneixes, era este, sin duda.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Que le pegue el pibe –
ordenó Salas con autoridad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y allí
fue Pedrito… pelota bajo el brazo, con su andar elegante e inmutable frente a
los insultos y las amenazas de los tremendos defensores riverplatenses.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="color: navy;">- Así que vos sos el que se movía al Viejo Lema pibe?-
intentó con filosofía bilardiana el Carnicero Godoy desde su aplomada
veteranía.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;"> - Nene, si lo errás te van a
degollar…- probó el Laucha Morete, sin tanta sutileza.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pero el
pibe no arrugaba. Con mirada casi ausente acomodó la pelota, se subió las
medias y descontó los pasos de carrera sabiendo que era su momento. Todo era en
cámara lenta, como en los sueños, como en los combates de Gatica que mostraba
Favio… Los hinchas desenfrenados con las venas hinchadas y los ojos salientes,
los puños en el aire o los ojos tapados esperando el grito… Lenta imagen,
sonido pesado y gutural…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Qué vas a hacer Triple
Pe? Le vas a dar al palo o la vas a meter? – preguntaba Marcelo Araujo desde
los micrófonos de la Televisión Pública.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Metela nene, metela…-
opinaba el Bambino desde Radio Diez.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">No la va a meter y todo va a estallar, el país se está
hundiendo y esta es otra maniobra de los Kirchner para entretenernos -
comentaba Lilita Carrió entrevistada por Luis Majul desde Punta del Este.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Y ahí
fue Pedro… ajeno a todo. Camiseta veinte fuera del pantalón, con la cara
manchada por el barro, bajo la lluvia demoledora del otoño porteño. El
Goooooooooooo de la hinchada se sostenía en el aire. Pedro elevó la vista y
calculó el viento, y ese fue el momento… Un resplandor enceguecedor estalló en
el cielo y el rostro inconfudible de Don Antonio Lema se dibujo entre los
nubarrones. Sonriente, confiado, con el gesto paternal de siempre… el Maestro volvió
a hablar: <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 36.0pt; mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="color: navy;">-<span style="font-size: 7pt;">
</span></span><span style="color: navy;">Al ángulo nene, donde
se juntan los palos… Nadie llega ahí… <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pedro
miró a su alrededor, todos lo miraban, nadie parecía haber visto y escuchado lo
que él, pero Triple Pe sintió que una energía poderosa invadía cada célula de
su cuerpo ahora tembloroso. Cerró los ojos y arrancó esa carrera interminable
de siete pasos hacia la pelota: cuerpo en ángulo, brazos en equilibrio, mentón
apuntando… caricia del empeine mágico, y la pelota volando entre las gotas
frías. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Miles de
miradas la siguen, los jugadores de la barrera giran sus cabezas ya superadas
por el disparo, el vuelo del arquero y el brazo cambiado estirado hasta la
impotencia. Gira y gira sobre si misma dibujando la parábola exacta, perfecta,
en trayectoria calculada en horas de entrenamiento. El mundo se detiene en ese
viaje interminable hasta que el ruido final rompe el silencio: Clank!!! <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Travesaño
y afuera…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Estalla
la visitante que redobla el eco cuando Laverni
pita el final. Se acabó el sueño dorado de la mitad más uno… Lluvia y
llanto se unen en un único manto de decepción que no tiene consuelo…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">A un
nuevo rayo, aún más poderoso que el anterior, le sigue el trueno y la imagen,
ya menos borrosa de Don Antonio Lema, ahora de cuerpo entero dibujada en el
cielo oscuro…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">-
Gracias pibe… - dice el Maestro… y a su lado, sonrientes, otros también agradecen…
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;">Pedro no
los reconoce… Son Labruna, Pedernera,
Moreno, Lousteau… <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="color: navy;"><br /></span></div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-87299022566500246142011-01-18T05:26:00.000-08:002011-01-18T05:32:03.731-08:00FESTEJAR (Por Julio Teri)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQcydWh-HF08wmZvyWbmgr1rBaRDpdTrs7G60tO_a1mefozZu54x6GPAIIfoS2O5AnsIOq0MnKiyoz_c20zIZtsw_MSi56JO3N9-aruUCVhULXeNviru-4y1mIn6Y1BVhuSVHXgTf2hQY/s1600/box_10dic54pascual_perez.bmp" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQcydWh-HF08wmZvyWbmgr1rBaRDpdTrs7G60tO_a1mefozZu54x6GPAIIfoS2O5AnsIOq0MnKiyoz_c20zIZtsw_MSi56JO3N9-aruUCVhULXeNviru-4y1mIn6Y1BVhuSVHXgTf2hQY/s200/box_10dic54pascual_perez.bmp" width="144" /></a></div>Salimos todos por las calles del barrio, nos llegamos hasta las casitas que están a la bajada del puente, teníamos motivos, la conquista del primer campeonato del mundo de boxeo, en las manos, mejor dicho en los puños de Pascualito Pérez, porque él, aunque mendocino, vivía en el doque.<br />
<br />
Por fin alguien nos reconciliaba con el boxeo, ya que salvo algunas peleas que se hacían en el Sportivo, hasta ese momento la popularidad de este deporte estaba dominada por dos siniestros personajes, uno de ellos había sido campeón olímpico, sudamericano y argentino, los hermanos Lovell. <br />
<br />
Cada fin de semana marchábamos hacia el comedor de la usina de la CADE donde se daba cine gratis para los hijos de los trabajadores de la empresa.<br />
<br />
Pegado al comedor veíamos a un señor semiciego que vendía golosinas, casi sobre la puerta del largo pasillo estaba su kiosco portátil, pasillo desde donde muchas veces aparecía la tenebrosa figura de su hijo Santiago Alberto Lovell.<br />
<br />
Alto de casi dos metros, enfundado en su sobretodo de cuero negro, que complementaba su piel y su alma, tan oscuras como su abrigo, se pavoneaba fumando un cigarrillo sin que muchos supieran de nuestra sensación de miedo, de bronca, de impotencia, sensaciones que se mezclaban al verlo pasearse, sabiendo nosotros, que junto a su hermano era uno de los hombres que había torturado a mi padre y a tantos compañeros en la comisaría tercera del Dock Sud.<br />
<br />
Por eso gracias Pascual Pérez por darnos el campeonato y otra visión de lo que era el boxeo. <br />
<br />
<b><i>Julio Teri.</i></b><br />
<b><i><br />
</i></b><br />
* <b>Pascual Nicolás Pérez</b> nació en Rodel del Medio, Mendoza, el 4 de Marzo de 1926.<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnJyw-wAPg4sMajaY3bz2oh7FLBz9wfPwaQi8o5Lwugiyh7u1k9Ceb489Tcuj-0ubBdmYzArX_5E83bzjmG9NzI4qE-iUlIkVAA0mUARULPPdqD8QReeglvTVUY-RnGu7bzZnXFUDPrpc/s1600/200px-Pascual_Perez_derriba_Yoshio_Shirai_-_1954.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnJyw-wAPg4sMajaY3bz2oh7FLBz9wfPwaQi8o5Lwugiyh7u1k9Ceb489Tcuj-0ubBdmYzArX_5E83bzjmG9NzI4qE-iUlIkVAA0mUARULPPdqD8QReeglvTVUY-RnGu7bzZnXFUDPrpc/s200/200px-Pascual_Perez_derriba_Yoshio_Shirai_-_1954.jpg" width="164" /></a></div>Fue el primer campeón mundial de boxeo y uno de los grandes deportistas de nuestro país; está considerado uno de los tres mejores de la historia en peso mosca.<br />
Medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Londres 1948, y campeón mundial entre 1954 y 1960, realizó nueve defensas exitosas de su cinturón<br />
La primera pelea de su carrera profesional la realizó en Gerli ante el chileno José Chiorino a quien venció por abandono en el 4º Round.<br />
Se consagró campeón del mundo el 26 de Noviembre de 1954, venciendo por puntos en la ciudad de Tokio a Yoshio Shirai, a quien derribó en dos ocasiones durante los 15 rounds de combate.<br />
Falleció el 22 de Enero de 1977, a la temprana edad de 50 años, tras una insuficiencia hepática-renal.<br />
<br />
<b>Julio"Cacho" Teri</b><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"></div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGOuQLmpvDF3-I7V9uVESDLkZzIALNJcwg4Hx0ARmdzsx71-v-l4YGFB1crWa7_L2ZS5r67JoVyOyzNiLqUX2QzMQnNVRpiPMScbjs3zijXd1TT1vpm6Hmexk19FIqATjc9anIUvQMriA/s1600/Julio+Teri+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGOuQLmpvDF3-I7V9uVESDLkZzIALNJcwg4Hx0ARmdzsx71-v-l4YGFB1crWa7_L2ZS5r67JoVyOyzNiLqUX2QzMQnNVRpiPMScbjs3zijXd1TT1vpm6Hmexk19FIqATjc9anIUvQMriA/s200/Julio+Teri+2.jpg" width="200" /></a>Nació el 17 de Julio de 1943 en Dock Sud.<br />
Comprometido militante social, apasionado devoto de San Osvaldo Pugliese y ex alumno de la centenaria Escuela Nº 35 de Dock Sud.<br />
Padre orgulloso y emocionado abuelo.<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-22925807824927842972010-11-14T10:53:00.001-08:002010-11-14T10:53:58.679-08:00Bajen las armas, que aquí sólo hay pibes jugando...<b><i><span class="Apple-style-span" style="color: blue;">Algunas consideraciones sobre la Temporada 2010 del FADI Avellaneda.</span></i></b><br />
<br />
El caso Newbery, y el caso Pienovi, o los muchos casos en que la violencia de los grandes provocó sanciones graves a los clubes, tienen la lamentable consecuencia de lastimar a muchos chicos, ya que destruyen muchas ilusiones que los pibes ponen en juego en esta competencia.<br />
<br />
Por ello, Ninguna sanción nos alegra, pero si hay un Reglamento, que aprueban los Representantes de los clubes, no hay otra alternativa que cumplirlo.<br />
Independientemente de las visiones que se tengan de la sociedad en la que vivimos, y del lugar que se ocupe en los distintos niveles de decisión, deberíamos coincidir en algunas cuestiones, que a esta altura de la historia, no admiten discusión.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7wF7dwvMUXVzvEQ4SSFcJ5c75cdIcmVqJoFJNHKUs8WM_p1TvwgXvVxA12X4FwCiINjsoLB-Y6at51XX-qAMPDHk43n6J5ySHnysp6_vYGw2_bIxzrjK25id_8oSMk9Lng7XYWJvwBmpz/s1600/3.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7wF7dwvMUXVzvEQ4SSFcJ5c75cdIcmVqJoFJNHKUs8WM_p1TvwgXvVxA12X4FwCiINjsoLB-Y6at51XX-qAMPDHk43n6J5ySHnysp6_vYGw2_bIxzrjK25id_8oSMk9Lng7XYWJvwBmpz/s1600/3.jpg" /></a></div>La primera de ellas y fundamental, es que nada puede estar por encima de la protección de la salud de nuestros pibes en todas sus formas. Nada hay más valioso.<br />
En el deporte, esa protección no sólo abarca el respeto a las reglas de juego, sino el mismo ambiente en que desarrollan sus actividades.<br />
La violencia, que la sociedad moderna ha incorporado naturalmente a la vida diaria, y que amplifican con intereses propios las maliciosas tapas de Clarín y las placas rojas de Crónica, está presente en la convivencia familiar, en las relaciones entre vecinos, en la manera de relacionarnos en la calle, en los barrios y en los clubes.<br />
<br />
Combatir esa violencia es una tarea necesaria e imprescindible. No importan los costos, si el fin es educar y formar a quienes son la razón de ser del presente y los futuros conductores de las generaciones venideras.<br />
En esta pelea, como en todas las que definen en qué mundo queremos vivir, no pueden permitirse las vacilaciones: o se está a favor de un fútbol infantil sin violencia y para los chicos, o se está en contra.<br />
No hay motivo válido que justifique el insulto al rival, el odio a los colores de otra camiseta, el agravio o la agresión al que está del otro lado o a quien debe impartir justicia en un partido de fútbol.<br />
<br />
Quienes esgrimen el argumento de que las sanciones perjudican a los chicos, tienen razón; pero generalmente, se equivocan al señalar culpables. La responsabilidad por los puntos que le sacan a una categoría y que impide a los chicos concretar sus anhelos, no es de quien aplica el reglamento, sino de quien intentó burlarlo, pisotearlo o violarlo.<br />
Si nos preocupamos para que las sanciones no nos arruinen la categoría campeona, hagamos el esfuerzo para que la violencia quede afuera de nuestros clubes. Ataquemos las causas para no sufrir las consecuencias.<br />
En este sentido, las responsabilidades son diversas.<br />
Los dirigentes, representantes y delegados debemos buscar permanentemente corregir las actitudes que no son adecuadas. No tenemos la fórmula ni venimos de otro planeta para ser distintos a otros productos de esta sociedad, pero nuestra función nos exige mejorarnos, reflexionar y hacernos cargo de nuestras debilidades para intentar reducirlas y dominarlas.<br />
<br />
En este gigantesco y maravilloso universo de pibes y familias que es el FADI, vamos sabiendo, cada vez en mayor medida, quién es quién.<br />
Los errores son errores, pero las malas intenciones no deben confundirse con errores.<br />
<br />
Quienes administramos o editamos los Blogs, las páginas de los clubes, oficiales y no oficiales, no podemos desconocer el rol que tenemos en todo esto.<br />
Nos guste o no nos guste, somos medios de comunicación, y en ese sentido, debemos estar a la altura de la responsabilidad que implica tener como destinatarios de nuestros mensajes, a niños, nada menos...<br />
Qué beneficio puede tener reproducir en un medio amenazas, agravios, descalificaciones, insultos, y agresiones desde el anonimato cobarde y ruin.<br />
No se trata de debatir sobre libertad de expresión o censura; se trata de entender que esta manera de proceder convierte al medio en una usina de violencia y ultraja sus derechos universales consagrados por la Convención de los Derechos del Niño, que es parte de nuestra Constitución Nacional.<br />
<br />
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAAEIM0oPTFPqSy2jJV4ShflRxI-LPNzSegxJeLYL-Cc303lwadA4FlD1I5aILEdX90iL2wmEzoZwSc4Gwh2WeomQ2CHd8qH013uYHIH22C-qsHRZbvvy7uobxpiqDa_Y7g36jwvv5I-yG/s1600/convencion_sobre_los_derechos.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="152" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAAEIM0oPTFPqSy2jJV4ShflRxI-LPNzSegxJeLYL-Cc303lwadA4FlD1I5aILEdX90iL2wmEzoZwSc4Gwh2WeomQ2CHd8qH013uYHIH22C-qsHRZbvvy7uobxpiqDa_Y7g36jwvv5I-yG/s200/convencion_sobre_los_derechos.jpg" width="200" /></a><b>LOS NIÑOS TIENEN DERECHO AL JUEGO.</b><br />
Pagarles para que jueguen, atenta contra ese derecho, desnaturalizando la esencia formativa del deporte.<br />
<br />
<b>LOS NIÑOS TIENEN DERECHO A LA PROTECCIÓN CONTRA EL TRABAJO INFANTIL.</b><br />
Aunque se intente disfrazarlo, pagarle a un niño para jugar al fútbol, lo convierte en un trabajo.<br />
<br />
<b>LOS NIÑOS TIENEN DERECHO A VIVIR EN ARMONÍA.</b><br />
Quienes fomentan ambientes agresivos atentan contra ese derecho.<br />
¿Quién proteje al niño contra el maltrato y la humillación a que los someten algunos delegados que piensan que lo que está en juego en un partido de fútbol infantil es su gloria personal?<br />
¿Quién proteje al niño de las faltas de respeto y los agravios a que los someten los grandes, muchas veces sus propios padres, cuando su esfuerzo no alcanzó para la victoria?<br />
¿Quién proteje al niño que tiene que leer en una página de internet que es titular porque su mamá es "amiga" del delegado; o que en su club los delegados son traficantes, o que ganaron porque el rival recibió dinero a cambio?<br />
Nada que pueda alegarse como justificación está por encima de estos derechos universales de los niños.<br />
<br />
<b>LOS NIÑOS TIENEN DERECHO A LA SALUD</b><br />
Y la salud es el estado de completo bienestar físico, mental y social.<br />
<br />
<b>CUIDEMOS A NUESTROS PIBES RESPONSABLEMENTE</b><br />
El Resultado, en toda competencia, es uno de los objetivos, pero no el único, ni el más importante.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCi771aFgOP_nb_2MjpsgJL-t-g9yUjGYvNBmIjxyvy3fyBesXzr9-yy0kxW1IeXjE3UVWdj4INBCKM6KwkYGH1ZHggKEl67g-qKU-OcezITbe2UO2PN1y7WrpmwBkAWJAd3hhy-mFZQJR/s1600/2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCi771aFgOP_nb_2MjpsgJL-t-g9yUjGYvNBmIjxyvy3fyBesXzr9-yy0kxW1IeXjE3UVWdj4INBCKM6KwkYGH1ZHggKEl67g-qKU-OcezITbe2UO2PN1y7WrpmwBkAWJAd3hhy-mFZQJR/s1600/2.jpg" /></a></div><br />
<div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>"Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres."</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>Pitágoras</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i><br />
</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>"El futuro de los niños es siempre hoy. Mañana será tarde."</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>Gabriela Mistral</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i><br />
</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>"No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados."</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>Don Bosco</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i><br />
</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>"Los niños son educados por lo que hace el grande y no por lo que dice."</i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><i>Carl Jung</i></span></b></div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-45102964046266468652010-07-17T05:54:00.000-07:002010-07-17T05:59:58.401-07:00Hay que terminar con la enfermedad de ganar o ganar<div style="color: black;"></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiIvT99Fa1GkBILa1Xg8LAV3UVzu7WZaGaA2XVkp09F5fm4oSTnRBpiSz6tIuF2eKJ0MRYMjsv2wXQ-gU5GUJynlcndhXF-aHA8RkHoIc5QdfOYBaDyLP_URE78ZtOhj2xd0XNfoZvPp4M/s1600/Checho+BAtista.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="112" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiIvT99Fa1GkBILa1Xg8LAV3UVzu7WZaGaA2XVkp09F5fm4oSTnRBpiSz6tIuF2eKJ0MRYMjsv2wXQ-gU5GUJynlcndhXF-aHA8RkHoIc5QdfOYBaDyLP_URE78ZtOhj2xd0XNfoZvPp4M/s200/Checho+BAtista.jpg" width="200" /></a></div><div style="color: black;"><span style="font-size: small;"><b>La frase es del Checho Batista, campeón del Mundo en el 86 y actual entrenador de los seleccionados juveniles. Copiamos a continuación, la muy intersante nota de Miguel Ángel Vicente que publica Clarín en su edición de hoy.</b></span></div><div style="color: black;"><span style="font-size: small;"><b>Es para leerla con atención y reflexionar </b></span></div><br />
<div style="color: #073763;"><b><br />
</b></div><div style="color: #073763;"><b>17/07/10 El DT de las selecciones juveniles es muy crítico con el momento del fútbol argentino. Dice que está muy mal y que el problema no está en Primera o en la Selección Mayor, sino en las inferiores.</b></div><br />
<br />
Sergio Batista es el técnico de los juveniles. Y los juveniles son un buen punto de partida para mirar el futuro de la Selección. Por eso la consulta.<br />
<br />
¿España dejó una lección? Yo creo que sí. No tenemos que copiar cómo jugó España, sino que tenemos que copiar los proyectos que tiene España. Uno los ve jugar en la Sub 17 y con la Sub 20 y se da cuenta del futuro que tiene. Apostaron a jugar bien al fútbol, a la técnica, a la creatividad de los jugadores.<br />
<br />
<i>Entonces todos te van a mirar a vos, porque se arranca con los juveniles.</i><br />
<br />
Está bien que así sea. El fútbol argentino está mal en eso. El otro día me preguntaban si teníamos un Iniesta o un Xavi. Yo digo que tenemos muchos Iniesta y muchos Xavi, pero tienen 15, 16 o 17 años. El tema es cómo los trabajamos. El fútbol argentino fue siempre la técnica, el jugador talentoso, la inventiva y con eso desnivelamos a los equipos europeos. Hoy estamos confundiendo la forma de trabajar.<br />
<br />
<i>¿De esos Iniesta que vos decís ninguno llega a Primera?</i> Ninguno. O muy pocos se acercan con esas características que vos les ves a los 15 años. Lo primero que tenemos que hacer nosotros y para eso existen las inferiores, tenemos que meternos en la cabeza que somos formadores. Formadores para el fútbol argentino, no para vender a Europa. Quiero decir con esto que en los clubes no puede haber más pesas que pelotas. No se puede trabajar más en lo físico que en lo técnico como se está trabajando actualmente. Hay que enseñarles a los chicos y para eso te tienen que apoyar los directivos. Ya sabemos que en Primera tenés que ganar, aunque yo sigo pensando que no es lo único. Vos te preparás para ganar, pero podés ganar o perder.<br />
<br />
<i>Se perdió la idea de que para ganar hay que jugar bien.</i><br />
<br />
Seguramente.<br />
<br />
<i>Volver a pensar que para ganar hay que jugar bien, parece todo un proceso mental.</i><br />
<b></b><br />
<b>Primero nos tenemos que mentalizar que con los chicos no se puede andar buscando únicamente campeonatos. Somos formadores, no gente que tiene que ganar campeonatos, por eso nosotros propusimos eliminar la tabla de posiciones en las inferiores. Para que se puedan dedicar a la enseñanza del chic</b>o. No es posible que en el fútbol argentino no se puedan encontrar marcadores de punta o enganches. Hay jugadores, y los hay muy buenos. Pero no podés jugar en infantiles con chicos que tienen ocho años en cancha de once. Nosotros en los juveniles preparamos jugadores para la Selección Mayor. Todos se la agarran con que no clasificamos para un Mundial Juvenil. Pero yo hace dos años que vengo diciendo que, para mí, el fútbol argentino está mal. Se está trabajando mal. Por ejemplo eso de ganar a cualquier precio no va más. Tenemos que cambiar para ganar cosas importantes. Nos cuesta en juveniles, nos cuenta en la Mayor, le cuesta a los equipos de clubes. Son muchos los equipos que en la copas quedan afuera en primera ronda contra equipos venezolanos, por ejemplo. Y no es que evolucionaron los demás países, nosotros nos quedamos mucho. Antes se ganaba 6-0, no por la parte táctica o física, sino porque teníamos jugadores bien dotados. Ellos evolucionaron en organización, tienen más información de todo, pero se dieron cuenta de que corriendo y ordenados le podían ganar a cualquiera de los equipos argentinos.<br />
<br />
<i>Pero Argentina se distinguía por otras cosas.</i><br />
<br />
Por los jugadores que técnicamente sobresalían. El problema no está en Primera, ni en la Selección Mayor, el problema está en los dirigentes que bajan las pautas. El dirigente piensa que tiene que formar un jugador para vender y eso a nosotros no nos interesa, porque el buen jugador se va a vender solo. Entonces para qué más gimnasio, más pesas si la pelota la tocamos una vez por semana. Así nos estamos confundiendo en el trabajo de base. Te confundís porque en el baby fútbol se hacen trabajos de pelota parada. Te confundís con las edades. A los 15 años no disfrutan porque es todo presión. A esa edad, presionan los representantes y los padres, pero ellos no entran a la cancha, los que presionamos somos los técnicos. Nosotros tenemos la culpa.<br />
<br />
<i>¿Cuánto lleva un proceso para recuperar esta esencia? En la Argentina lleva bastante.</i><br />
<br />
Crees que los dirigentes van a estar de acuerdo con esta idea? Con las inferiores tendrían que hacerlo. Hoy casi ningún equipo tiene jugadores propios. Cada seis meses tenés que armar un equipo nuevo y hay que empezar a cambiar esas cosas para que los clubes empiecen a nutrirse de los jugadores de inferiores. Pero hay que prepararlos. Nosotros acá, con los juveniles, podemos perder sudamericanos o lo que quieran. Me van a matar por eso, aunque se olvidan de que gané un olímpico. Mi trabajo es formar juveniles para la Mayor. El éxito de Pekerman y de Tocalli no fueron los cinco títulos mundiales juveniles, sino que hoy, en la selección argentina, hay nueve jugadores que pasaron por los juveniles. Esa es la esencia. Esa es mi obligación.<br />
<br />
<i>¿Lo estás consiguiendo?</i><br />
Lleva un tiempo, porque hay que cambiarles la mentalidad a todos. Yo protesto mucho, hablo mucho. No puedo entender que sigamos con el gimnasio y las pesas y no nos demos cuenta de que es otro el fútbol. Hay chicos de 13, 14 años que deben jugar en cancha chica y con una pelota adecuada. El jugador argentino está cada vez menos en contacto con la pelota, que es con lo que tiene que jugar. El dibujo táctico es secundario, lo que importa es la técnica del jugador.<br />
<br />
<i>La fiebre de que lo único que importa es ganar es difícil desterrarla.</i><br />
<br />
Sí, lleva tiempo. En enero de 2008 Grondona me dijo que le hiciera una lista para los Juegos Olímpicos y al otro día se la llevé con 30 nombres de los cuales quedarían 18. Hoy tengo que pensarlo. Es mucho más difícil armarla y encontrar esa clase de jugadores. Estamos bajando. Tenemos para volver a lo de antes, a nuestra identidad. Pero también tenemos jugadores de 15 años que tienen dolores de rodilla por las pesas. ¿Dónde vamos a llegar? ¿Si tiene brazos grandotes o mucho músculo va a ser mejor jugador? Cuando termina un Mundial siempre se habla de proyecto y también de estilo.<br />
<br />
¿Qué estilo? Argentina no puede tener ningún estilo. Si en la época de Basile tuvo que cambiar la forma de juego porque no encontraba un reemplazante de Riquelme. No había otro. Del 4-3-1-2 tuvo que ir al 4-4-2. El estilo entonces tenés que cambiarlo cada dos minutos. Acá tendría que haber ocho Riquelmes. Sale este, entra este y no cambio el estilo. No puede ser que estemos pensando en marcadores de punta y no los tengamos. Son barbaridades que pasan en el fútbol argentino. El problema está abajo, con los chicos. El proyecto no es que salga campeón la Quinta o la Cuarta, es que lleguen a Primera jugadores bien formados en todo sentido. Por eso tienen que evaluar al coordinador de las inferiores, no porque ganó un clásico. Hay que terminar con esa enfermedad de ganar o ganar. Llegó el momento de parar la pelota y pensar de otra manera.<br />
<br />
<a href="http://www.clarin.com/deportes/futbol/terminar-enfermedad-ganar_0_299970157.html"><i style="color: #073763;"><b>Nota de Miguel Ángel Vicente - Diario Clarín (17/07/2010) </b></i></a><br />
.<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-67328638323960721522010-07-02T21:46:00.000-07:002010-07-02T21:46:50.980-07:00Elogio de la Locura<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguw3pgClxZQS0n5aJoDxwCm17xMTMSl1sRXcS6C6FoQanSE5TSq8w4WZHldrh90uWrb2fFiz0rpIlkRS7vyx0EIfl57R3bxNV1DRMTN_LVzcFjgj510RWSkflv_2tMcU3OfBC9m7K0B68/s1600/loco-abreu.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="143" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguw3pgClxZQS0n5aJoDxwCm17xMTMSl1sRXcS6C6FoQanSE5TSq8w4WZHldrh90uWrb2fFiz0rpIlkRS7vyx0EIfl57R3bxNV1DRMTN_LVzcFjgj510RWSkflv_2tMcU3OfBC9m7K0B68/s200/loco-abreu.jpg" width="200" /></a></div>El fútbol, como la vida, de tanto en tanto nos pone a prueba. Nos saca los grises de la paleta y nos da la opción de jugarnos por blanco o negro, cara o cruz. A veces, del acierto depende la felicidad o la tristeza, la de nosotros, la de nuestros afectos, o la de miles de personas que esperan que nuestra decisión sea la correcta.<br />
<br />
Por una de esas encrucijadas pasó Sebastián Abreu hace unas horas al patear el último penal de la serie entre Uruguay y Ghana en los Cuartos de Final del Mundial de Sudáfrica. <br />
<br />
Del penal de Abreu dependía la victoria de Uruguay, la concreción de la hazaña histórica de los celestes de romper la sequía tras 40 años de ausencia en las semifinales de un Mundial de Fútbol. Pero para el Loco, lo que estaba en juego era mucho más que eso.<br />
<br />
- La va a picar, le digo a Camilo.<br />
- Cómo la va a picar papá? Es el último penal…<br />
- Te digo que la va a picar !!! Lo que vos quieras te juego! Si no la pica… mañana no miro el partido de Argentina…<br />
<br />
Y ahí fue el Loco Abreu, caminando lento, a lo uruguayo, con la mochila cargada de cuatro décadas de frustraciones del fútbol de su país… La acomodó, miró al arquero, y pateó el penal más trascendente de su vida, y el más importante de la historia del fútbol charrúa…<br />
<br />
El penal fue gol… pero lo más importante no fue eso… <br />
<br />
Abreu tuvo que decidir en esos segundos si su locura para disfrutar del fútbol seguía invicta, o si esa alegría que fue la bandera más notable en su carrera de jugador de fútbol, debía ceder ante la solemnidad del momento, ante la necesidad de estar a la altura de la historia y asegurar el penal de un puntinazo.La falsa disyuntiva de ganar o disfrutar, nunca tuvo un momento de mayor notoriedad y nunca pudo mostrarnos una respuesta tan contundente: ganar disfrutando! <br />
<br />
Ganó Uruguay con el penal de Abreu, picado apenas para que la pelota entre dando saltitos por el medio del arco, donde un segundo antes estaba el gigantesco buen arquero de Ghana. <br />
Ganó Uruguay y está entre los mejores cuatro seleccionados del mundo, pero además ganó el fútbol y más aún, ganó el ejemplo de sostener los principios ante cualquier coyuntura por más dramática que parezca. <br />
Ganó la alegría, la desfachatez de no rendir las convicciones ante nada, de no bajar banderas aún a costa de los grandísimos riesgos que se corran. Abreu sabía que si el arquero se quedaba parado en le medio del arco y atajaba ese penal, los diarios del mundo iban a hablar de la canchereada, de la irrespetuosidad, de burlarse de los sentimientos de todo un pueblo que esperaba ese gol para salir a festejar tras 40 años de abstinencia. <br />
<br />
Sebastián Abreu nos tapó la boca de belleza, coraje y admiración, y ante él, suplente de un equipo que llegó como cenicienta a Sudáfrica 2010, nos sacamos el sombrero los que queremos seguir disfrutando de la magia en una cancha de fútbol. <br />
<br />
- Cómo sabías que la iba a picar papá ??? – pregunta Camilo sorprendido... <br />
- Porque está loco hijo, y sin los locos nos moriríamos de tristeza, en el fútbol y en la vida, que son lo mismo…<br />
<br />
Y entre nosotros… sino la picaba, me moría…<br />
<br />
<br />
PABLO ISI<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-61313589044400921522010-03-10T05:50:00.000-08:002010-03-19T05:43:19.649-07:00Instrucciones para elegir en un picado (Alejandro Dolina)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVFWzYm7AmoMQ0JEaBofiU6QYk3fm8ugQSco3rBABRG8y1o7lBkwKWpJd2GwbYi9tioZqll1r2VY9zIj3wOOFZ8jDiPJPe-Pqwjeyy9ujrkq6HDGEPGaB_D7LepykQbVEiUBiE8rUrMiA/s1600-h/futbol-potrero.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="140" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVFWzYm7AmoMQ0JEaBofiU6QYk3fm8ugQSco3rBABRG8y1o7lBkwKWpJd2GwbYi9tioZqll1r2VY9zIj3wOOFZ8jDiPJPe-Pqwjeyy9ujrkq6HDGEPGaB_D7LepykQbVEiUBiE8rUrMiA/s200/futbol-potrero.jpg" width="200" /></a></div>Cuando un grupo de amigos no enrolados en ningún equipo, se reúnen para jugar, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quiénes integrarán los dos bandos. <br />
<br />
Generalmente dos jugadores se enfrentan en un sorteo o pisada y luego cada uno de ellos elige alternadamente a cada uno de sus compañeros. <br />
<br />
Se supone que los más diestros serán elegidos en los primeros turnos, quedando para el final los troncos. <br />
<br />
Pocos han reparado en el contenido dramático de estos lances. El hombre que está esperando ser elegido vive una situación que rara vez se da en la vida: sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o lo rechazan. Sin eufemismos, conocerá su verdadera posición en el grupo. A lo largo de los años, muchos futbolistas advierten su decadencia, conforme su elección sea cada vez más demorada. <br />
<br />
Manuel Mandeb, que casi siempre oficiaba de elector, observó que sus decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles. En un principio se creyó poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían… ciertas cualidades. <br />
<br />
Pero un día comprendió que lo que en verdad deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía siempre a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran los más capaces. <br />
<br />
El criterio de Mandeb parece apenas sentimental, pero es también estratégico: uno juega mejor con sus amigos. Ellos serán generosos, lo ayudarán, lo comprenderán, lo alentarán y lo perdonarán. <br />
<br />
<b>Un equipo de hombres (y mujeres) que se respetan y se quieren es invencible. Y si no lo es, más vale compartir la derrota con los amigos, que la victoria con los extraños o los indeseables.</b><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTd46dbXfPX8N00yq_eOcm4J0Shp6WACXpN2EZcrC29NK07n060DAn94E-OV5FX7p-qnSstZpxaugRd8sT_zBmEBr5jKlJL7vEOjPgpD5VEVw22SkppzP02ewUjjV1REP8dSG8uf0YK1Y/s1600-h/Dolina+Angel+gris.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTd46dbXfPX8N00yq_eOcm4J0Shp6WACXpN2EZcrC29NK07n060DAn94E-OV5FX7p-qnSstZpxaugRd8sT_zBmEBr5jKlJL7vEOjPgpD5VEVw22SkppzP02ewUjjV1REP8dSG8uf0YK1Y/s200/Dolina+Angel+gris.jpg" width="135" /></a></div><i><b>Alejandro DOLINA </b></i><br />
<b><i>(de "Crónicas del Ángel Gris")</i></b><br />
<b><br />
</b><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-74710371285653546272010-02-21T19:22:00.000-08:002010-02-22T03:40:14.227-08:00DEFENDER LA ALEGRÍA !!!Estoy sentado en la tribuna de un club de barrio, viendo jugar a las categorías 2004 de Barrio La Carne y Amor y Lucha.<br />
<br />
Es la segunda fecha del torneo "Semillero de Gerli". Doce pibitos de cinco y seis años tratan de correr detrás de la pelota mientras algunas decenas de padres, tíos, hermanos y amigos grita hasta la afonía cuando su equipo avanza y aullan como lobos heridos cuando es su propio arco el que está en riesgo.<br />
<br />
Amor y Lucha gana uno a cero, pero Barrio La Carne no se entrega, empujan con ganas sus seis aguerridos jugadores, con el arco rival en la mira. Yo sigo disfrutando, entretenido, ajeno a los vaivenes emocionales de los espectadores.<br />
<br />
Una pelota cruza la cancha y cae en el área de Amor y Lucha. El arquerito la ve llegar, la para con su piecito derecho y la deja muerta contra el piso. No la agarra con la mano, la deja ahí, quietita en el piso.<br />
Los jugadores de Barrio La Carne no saben qué hacer. La pelota está ahí, en el área chica, cerca del arquero que se niega a agarrarla. El primer delantero se decide y corre a toda velocidad hacia donde está el balón, está cerca, muy cerca, pero a pocos centímetros de la gloria, el arquerito se hamaca y sale gambeteando hacia su derecha con la risa contenida entre los dientes.<br />
<br />
Yo espero, después de semejante demostración de osadía, que ahora si, de una vez por todas, la reviente para arriba y aleje el peligro. Pero no. Otra vez el arquerito la deja quietita contra el piso. Mira al costado para asegurarse que aquel delantero embestidor ya no es un amenaza, mira para adelante y desafía con la cabeza levantada y la pelota quieta al próximo valiente.<br />
<br />
Viene el segundo, ya algo advertido de que el arquero no está actuando normalmente, y barre el piso en un intento desesperado por llegar a la pelota; la pierna del arquerito se estira en el último instante, y la hace correr por la punta, dejando tras de si otro desafío superado.<br />
<br />
Yo no entiendo, juro que no entiendo. Miro al árbitro para ver si la jugada fue anulada, pero no, la pelota está en juego, todo vale. Miro al técnico de Amor y Lucha esperando el grito desencajado, el gesto amenazador, el ruego de "sacala", pero no. Alejandro está tranquilo, como si nada... No dice nada, ni se ve nervioso. El arquero entonces, ve a su compañerito bien abierto allá arriba, y pone un pase en profundidad que se termina perdiendo en el fondo de la cancha.<br />
<br />
La jugada, con algunas variantes lógicamente, se repite cinco o seis veces en ese primer tiempo. Ya a la tercera o cuarta vez, me acostumbré a esperar la gambeta, pero sigo sin poder aceptar que detrás de ella no venga el reto, ni los gritos del público que también toma la actitud de Santiaguito, con increíble normalidad...<br />
<br />
En una de los tantos firuletes, Santiaguito calcula mal, y la pelota termina dentro del arco, de su propio arco. Es gol. Barrio La Carne y Amor y Lucha están uno a uno, pero nadie se queja; no hay retos para Santiago, y todo sigue como si nada... Yo sigo sin entender.<br />
<br />
En el segundo tiempo Santiaguito salió del arco, fue de delantero, pero no pudo revertir el resultado. Cuatro a tres ganó Barrio La Carne y Amor y Lucha perdió el invicto.<br />
<br />
Le comento al Negro Florentín que no puedo creer lo que acabo de ver: un arquerito de cinco años se divierte gambeteando rivales dentro de su propia área, una y otra vez... Le salen todas, pero las que no salen las va a buscar adentro. Sin embargo, la alegría está invicta. El pibe sigue en la suya, y su entrenador le respeta las ganas de jugar. No le grita, no lo cambia, no lo amenaza. Tampoco la gente de su club, que acompaña con risas y aplausos cada jugada...<br />
<br />
Uno no deja de sorprenderse cuando la alegría y la libertad de jugar y divertirse pueden asomarse en todo su esplendor en esta sociedad donde la angustia es el estado natural.<br />
<br />
Estaba pensando todo eso cuando un grito de "sacalaaaaaaaaa" me sacudió. Ya había arrancado otro partido... más normal...<br />
<br />
El fútbol es maravilloso... y sigue estando entero en los pibes que en el barrio recién empiezan a patear...<br />
Qué bueno que lo dejen crecer y no les corten las alas al primer vuelo...<br />
<br />
Me vuelvo a casa, agradeciendo a Santiaguito por el fútbol, a Alejandro y a la gente de Amor y Lucha, por disfrutar de la alegría de jugar de los pibes, más que del resultado.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilhiKtv8VIUandC9tKnHt-bu3zmuPfXlNy_ONC37oQ0-ofaLe07L8NHrjkSaBYS3n3vU8d9p5jdd6Ut2eVdc7HrwKYqMHLfWJzo42Inug4lidIy-bNUl0cln-2Pto4eJBLThz6Qey-lOo/s1600-h/A+y+L+04+Santiago.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilhiKtv8VIUandC9tKnHt-bu3zmuPfXlNy_ONC37oQ0-ofaLe07L8NHrjkSaBYS3n3vU8d9p5jdd6Ut2eVdc7HrwKYqMHLfWJzo42Inug4lidIy-bNUl0cln-2Pto4eJBLThz6Qey-lOo/s320/A+y+L+04+Santiago.jpg" width="320" /></a></div><div style="color: #0c343d; text-align: center;"><b>La historia es afortunadamente real. Barrio La Carne le ganó a Amor y Lucha 4 a 3 en el Torneo Semillero de Gerli, el domingo 21 de febrero de 2010.</b></div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-23150797505643374952010-02-16T11:24:00.000-08:002010-02-21T19:39:11.370-08:00El resultado en fútbol infantil atenta contra la formación (Pino Hernández en Clarín)Copiamos a continuación una muy interesante nota que publica el Deportivo de Clarín, hecha por Eduardo Tagliaferri a Eduardo Pino Hernández, coordinador del fútbol infantil de Véles Sárfield.<br />
El título de la nota, ya es una definición:<br />
<br />
<h1><span style="font-size: large;">"El resultado en fútbol infantil atenta contra la formación"</span></h1><h2><span style="font-size: small;"><b class="Hora">13:05</b><span class="sep">|</span>Eduardo "Pino" Hernández, Coordinador General del Fútbol Infantil de Vélez, cuestionó el trabajo de algunos clubes en sus Divisiones Inferiores. Además denunció que "hay robo de jugadores y padres que les pegan a los árbitros".</span></h2><span class="Autor">Por: <a href="mailto:gtagliaferri@clarin.com">Guillermo Tagliaferri</a></span><br />
<div class="Multi"><script type="text/javascript">
var mm2052034 = Array( 'mm2052034g');
</script><br />
<div class="Foto Caja clearfix" id="divFoto"><div class="Box"><a href="javascript:Popup('http://www.clarin.com/servicios/galeria/?notaId=2052034&mtmTipo=Imagen&mostrar=1256111','fotos','900','650','yes','yes');" id="vinculoFoto"><img alt="" border="0" id="Foto" name="Foto" src="http://www.clarin.com/diario/2010/02/15/um/thumb/pino1.jpg" /></a></div><div class="Player clearfix"><div class="Pag clearfix" style="display: none;"><div class="Num"><b id="numeroFoto">1</b> de 1</div></div><div class="Epi" id="FotoEpigrafe">PINO. Eduardo Hernández es el Coordinador General del Fútbol Infantil de Vélez. (Eugenia Cerruti)</div></div></div><script type="text/javascript">
foto = new Galeria( document.images["Foto"], Array('/diario/2010/02/15/um/thumb/pino1.jpg'), document.getElementById("FotoEpigrafe"), Array('PINO. Eduardo Hernández es el Coordinador General del Fútbol Infantil de Vélez. (Eugenia Cerruti)'), document.getElementById("vinculoFoto"), Array('1256111'), document.getElementById("numeroFoto") ); foto.setFoto(0);
</script></div>Con la autoridad que le da haber dirigido infantiles y juveniles durante aproximadamente dos décadas, Eduardo <i>Pino</i> Hernández, ex puntero derecho de Vélez, Platense y San Lorenzo entre otros y actual Coordinador General del Fútbol Infantil de Vélez, trazó un panorama sobre la raíz del fútbol argentino y denunció graves irregularidades que atentan contra la formación adecuada de los futbolistas del futuro. "Se está actuando mal. En el fútbol infantil están sucediendo cosas que atentan contra los objetivos fundamentales. El chico que da sus primeros pasos en el fútbol organizado es como un árbol que está a tiempo de que se le coloque un palo para que salga derecho; porque si crece torcido ya no tendrá solución. Pasan cosas que no se pueden creer, si no lo modificamos vamos a crear jugadores sin identificación con el fútbol argentino". <br />
<br />
Hernández cuestiona que "algunos clubes están muy pendientes de los resultados, sólo les importa ganar. Y a cualquier costo. Eso hace que la formación del chico, no sólo como futbolista sino lo que es más grave como persona, no sea la adecuada. Acá en Vélez obramos distinto. Por ejemplo, si el mejor jugador de una categoría comete algún acto de indisciplina el fin de semana queda excluido del equipo. Podemos perder el partido, pero ganamos en la formación a futuro. Nosotros tenemos una frase de cabecera que dice "el resultado en fútbol infantil atenta contra la formación". <br />
<br />
Puntualmente el entrenador cuenta que "si hay un tiro libre en mitad de cancha se lo hace patear al más grandote de físico porque tiene potencia para pegarle al arco grande. Eso en Primera no va a pasar, ese jugador seguramente no será el encargado de los tiros libres. Otro caso es mandar al marcador central si es fuerte para que patee los córners al corazón del área, pensando sólo en convertir; en el futuro ese central no va a ejecutar los tiros de esquina sino que seguramente será él quien vaya a cabecear. O pedirles que revienten la pelota desde abajo, lo ideal es que aprendan a salir jugando. Y así podría citar montones de jugadas que sólo apuntan al éxito inmediato". Entre los cambios que pregona para el fútbol infantil figuran "achicar las canchas y los arcos para que los chicos estén en un hábitat más natural, usar pelota más chica para mejorar la técnica del jugador y fundamentalmente no jugar con tabla de posiciones en las categorías infantiles. Este último tema lo charlamos con Checho Batista, igual que poner menos énfasis en lo físico y sí en la técnica y el juego". <br />
<br />
<div style="color: #0c343d;"><b>-¿Existe el "robo" de jugadores infantiles?</b> </div><br />
-Sí. Lamentablemente es algo común y da un poco de bronca. El club poderoso hace la captación en base al dinero y perjudica al club más modesto. Es una selva, y así el chico es menospreciado. Pero es una realidad y difícil de evitar con tantos problemas sociales. No se puede criticar a la familia que necesita el dinero y son tentados. Hasta se dan casos de clubes que se llevan categorías completas. El baby fútbol perdió la esencia, antes los chicos jugaban en el club de su barrio, donde iban con sus vecinitos amigos. Hoy hay chicos de 6 o 7 años que les pagan para ir a jugar. Eso es perjudicial. En vez de jugar van a trabajar, ¿Cómo llegará su mente cuando tengan que entrar a Novena división? <br />
<br />
<div style="color: #0c343d;"><b>-¿Los padres también pueden convertirse en un factor negativo?</b></div><br />
-He visto cosas terribles. Padres que agarran de las orejas al hijo porque jugó mal. Lo que deberían hacer es consolarlo y explicarle que no pasa nada por un mal rendimiento o por perder un partido. A los cinco minutos tienen que olvidarse y estar jugando al metegol. También hay casos de padres que le pegan al árbitro por estar disconformes con un fallo. ¿Qué ejemplo les están dando a sus hijos? Así los pibes sufren y juegan con temor pensando en las reacciones negativas de sus papás. <br />
<b><br />
<br />
<span style="color: #0c343d;">-¿Es conveniente traer chicos del interior para sumarlos al fútbol infantil de un club de Buenos Aires?</span></b><br />
<br />
-Otra aberración. Es una locura meter en una pensión a chicos menores de 14 años. Es quemar etapas. No se lo puede sacar del entorno de su familia, además nadie les garantiza que van a llegar a Primera, ni siquiera a Inferiores. Acá en Vélez lo que hacemos es invitar en las vacaciones a los chicos del interior que vemos con condiciones y si la familia está de acuerdo lo fichamos, pero mientras tanto siguen viviendo en sus lugares de origen. <br />
<br />
Hernández, que en Vélez fue técnico desde infantiles pasando por inferiores y hasta interinamente en Primera, traza una paralela entre el fútbol y la educación. Pregona que "las infantiles son el Jardín de Infantes, le enseñas al chico a jugar, a trabajar en la motricidad fina. De Novena a Séptima divisiones son la Escuela Primaria: empiezan a manejar letras y números y en el fútbol los sistemas tácticos. De Sexta a Cuarta es la Escuela Secundaria: se van preparando para una profesión, aprenden a cerrar un resultado y ahí sí se les exige ganar, que es lo que se les va a exigir en la vida. Y la Primera es la Facultad, es el momento de recibirte de futbolista". <br />
<br />
.<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-27551404927631032192009-12-22T07:59:00.000-08:002009-12-22T08:30:40.945-08:00EL MARACANAZO<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcSPLpUzpMEIfYXdIjGG4SuMJJzrIp2voGsMxpM08uKe1DlG1sJhviHFue0dKKP3_NPRDpFPltzLG-20ASLaX8VlGkNS4CFrGsXZVWCq2VDIUmScXD3ImNUUBiwXReFaR6lzDEqxleKqw/s1600-h/Mundial+Brazil.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcSPLpUzpMEIfYXdIjGG4SuMJJzrIp2voGsMxpM08uKe1DlG1sJhviHFue0dKKP3_NPRDpFPltzLG-20ASLaX8VlGkNS4CFrGsXZVWCq2VDIUmScXD3ImNUUBiwXReFaR6lzDEqxleKqw/s200/Mundial+Brazil.jpg" /></a><br />
</div>Después de la suspensión de los Mundiales de fútbol a raíz de la Segunda Guerra Mundial, la FIFA retomaba su máximo evento, organizando en Brasil el Cuarto Mundial de la historia en el año 1950.<br />
<br />
Uruguay había sido sede y campeón en 1930, Italia repitió ambas condiciones en 1934, y logró el bicampeonato en Francia en 1938.<br />
Doce años después, el partido final del Mundial de Brasil iba a ser protagonizado por los dos mejores equipos del momento: el país anfitrión y el seleccionado uruguayo.<br />
<br />
La fase final que determinaría al campeón era una ronda de cuatro equipos a jugar todos contra todos. Los locales habían apabullado a Suecia (7 a 1) y a España (6 a 1), mientras los celestes llegaban con un punto menos, ya que habían empatado con España (2 a 2) y habían vencido a Suecia (3 a 2) angustiosamente, dando vuelta el encuentro en los últimos 13 minutos.<br />
<br />
Según los datos oficiales de FIFA, el encuentro final en el Estadio Maracaná el 16 de Julio de 1950 fue presenciada por la increíble cantidad de 174.000 espectadores.<br />
<br />
Al local le alcanzaba con el empate para consagrarse campeón, pero los antecedentes lo instalaban como gran favorito, y desde muy temprano, la fiesta estaba preparada para que el equipo de Flavio Costa festejara a lo grande. Los únicos que no se enteraron de eso, fueron los uruguayos...<br />
<br />
Uruguay había llegado a la ronda final ganando un único partido, por 8 a 0, con el seleccionado boliviano. Después de eso, los resultados comentados antes, hablaban de una sufrida y ajustada clasificación.<br />
A pesar de ese amplio favoritismo, el primer tiempo finalizó cero a cero. La tradicional garra charrúa se oponía al juego brillante de los locales y ninguno pudo desnivelar.<br />
<br />
En la segunda parte, a apenas 2' de reiniciado el juego, Friaca pone en ventaja a Brasil, desatando la alegría de todo el estadio que ya deliraba a cuenta.Sin embargo, a los 21', Schiaffino igualaba el marcador, poniendo un manto de suspenso a la gran final, que pronto fue dando paso a las dudas y el nerviosismo de hinchas y jugadores brasileños. Esos nervios se multiplicaron cuando a los 34', Ghiggia marcó el 2 a 1, dejando al estadio en un silencio espeluznante.<br />
<br />
Carlos Solé, uno de los tres periodistas charrúas que cubrieron la final, relataba así el gol de la victoria: <br />
<i>"...La para Míguez y apoya Julio Pérez. Se va delante Julio Pérez con la pelota esperando que se cruce Ghiggia. Julio Pérez sigue atacando. Pérez a Ghiggia. Ghiggia a Pérez. Pérez avanza, le cruza la pelota a Ghiggia. Ghiggia se le escapa a Bigode. Avanza el veloz puntero uruguayo. Va a tirar. Tira. Goool, goool, goooool, goooooool uruguayo. Ghiggia tiró violentamente y la pelota escapó al contralor de Barboza. A los 34 minutos, anotando el segundo tanto para el equipo uruguayo. Ya decíamos que el gran puntero derecho del conjunto oriental estaba resultando la mejor figura de los uruguayos. Se escapó de la defensa brasileña. Tiró en acción violenta. La pelota rasante al poste escapó al contralor de Barboza y anotó a los 34 minutos Ghiggia el segundo tanto para Uruguay. Uruguay 2 Brasil 1. Autor del tanto Ghiggia a los 34 minutos..."</i><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxR5BwsHYiAJKkxfvdELKQ2EQ-FIVHcSo5_sX_Eg9_BFnBxcVyqKuEpi_VsIhF5FxXLzb0DS6u16WBB0SZbG2wznC4ohOHeQl6ZyjSI5WQoA0Txui0dVGZwIzH2HV7c5ajQMCTNtqBHU0/s1600-h/gol_ghiggia_gr.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxR5BwsHYiAJKkxfvdELKQ2EQ-FIVHcSo5_sX_Eg9_BFnBxcVyqKuEpi_VsIhF5FxXLzb0DS6u16WBB0SZbG2wznC4ohOHeQl6ZyjSI5WQoA0Txui0dVGZwIzH2HV7c5ajQMCTNtqBHU0/s320/gol_ghiggia_gr.jpg" /></a><br />
</div><i><a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Maracanazo#cite_note-1"></a></i><br />
<div style="color: #073763; text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><b>El gol de Ghiggia que le da el campeonato a Uruguay. Los defensores brasileños no lo pueden creer...</b></span><br />
<br />
</div><div style="text-align: center;"></div><div style="text-align: left;">Para los brasileños, la derrota fue una tragedia nacional. La gente salía del estadio en un silencio sepulcral, en una desgarradora escena de llantos y desconsuelo.<br />
</div><div style="text-align: left;">Jules Rimet, presidente de la FIFA, había ingresado a las dependencias interiores del estadio poco después del gol de Brasil, para preparar su discurso, que hablaba maravillas del seleccionado brasileño, dando por descontado que la copa quedaría en Brasil.<br />
</div><div style="text-align: left;">Cuando volvió a salir al estadio, sólo los uruguayos estaban en la cancha, celebrando enloquecidos lo que noventa minutos antes era un sueño casi imposible.<br />
</div><div style="text-align: left;"></div><div class="separator" style="clear: both; color: #073763; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisv__J2tFO6l3VigR6vcWlnhuiMCJcmB0kSIz7kkAt3p4W7s499mduq2mTbae5kbE3hGwI29q82SV9h92hU4qbAcLbkNxQiw7C6eIgcdHtQ4vYx6FmyZOatPqg1qTuwxM9IHCKCxE0_qQ/s1600-h/uruguay1950.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisv__J2tFO6l3VigR6vcWlnhuiMCJcmB0kSIz7kkAt3p4W7s499mduq2mTbae5kbE3hGwI29q82SV9h92hU4qbAcLbkNxQiw7C6eIgcdHtQ4vYx6FmyZOatPqg1qTuwxM9IHCKCxE0_qQ/s400/uruguay1950.jpg" /></a><br />
</div><div style="color: #073763; text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><b>Los héroes uruguayos del Maracanazo. Aquel día Uruguay jugó con Roque Máspoli, Mathías González, Eusebio Tejera, Schubert Gambetta, Obdulio Varela, Rodríguez Andrade, Alciede Ghiggia, Julio Pérez, Oscar Míguez, Juan Alberto Schiaffino y Morán. Juan Lòpez era el DT. </b></span><br />
</div><div style="color: #073763; text-align: left;"></div><div style="text-align: left;"><br />
La gente en Uruguay salió a las calles a festejar, y los jugadores fueron héroes nacionales, desde aquel día y para siempre.<br />
</div><div style="text-align: left;"></div><div style="text-align: left;">Tal fue la profundidad de la herida, que nunca más en la historia, Brasil jugó con camiseta blanca. Allí nacio la tradicional verde-amarela que hoy es un símbolo del fútbol mundial. <br />
</div><div style="text-align: left;">De los cinco mundiales siguientes, Brasil ganaría 3 (1958; 1962 y 1970) quedándose para siempre con la Copa Jules Rimet.<br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWkmFYsHGMOKstubXIEYDogCMjSxl7kn0IJTD5Xil_XIfn2ZN1umUm86phsGC1p45ZA6YIuoDTuhORY0Uyj_YZR177lhzZyezBRU0ytCdxqgun7YdltGDtTs9aBrK5dWu_wg43Zw7-ewQ/s1600-h/TROPHIE-JULES-RIMET.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWkmFYsHGMOKstubXIEYDogCMjSxl7kn0IJTD5Xil_XIfn2ZN1umUm86phsGC1p45ZA6YIuoDTuhORY0Uyj_YZR177lhzZyezBRU0ytCdxqgun7YdltGDtTs9aBrK5dWu_wg43Zw7-ewQ/s320/TROPHIE-JULES-RIMET.JPG" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><b style="color: #073763;">La bellísima copa Jules Rimet que Brasil obtuvo definitivamente en México 1970, al consagrarse campeón por tercera vez.</b></span><br />
</div><div style="text-align: left;"></div><div style="text-align: left;"></div><div style="text-align: left;"><br />
<b>Así lo cuenta el escritor uruguayo Eduardo Galeano en su libro "El fútbol a sol y sombra": </b><br />
</div><div style="text-align: left;"></div><div style="color: #4c1130;"><br />
Nacía la televisión en colores, las computadoras hacían mil sumas por segundo, Marilyn Monroe asomaba en Hollywood. Una película de Buñuel, <i>Los olvidados</i>, se imponía en Cannes. El automóvil de Fangio triunfaba en Francia. Bertrand Russell ganaba el Nobel. Neruda <a href="http://www.patriagrande.net/chile/pablo.neruda/index.html"></a> publicaba su <i>Canto general</i> y aparecían las primeras ediciones de <i>La vida breve</i>, de Onetti, y de <i>El laberinto de la soledad</i>, de Octavio Paz.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Albizu Campos, que mucho había peleado por la independencia de Puerto Rico, era condenado en Estados Unidos a setenta y nueve años de prisión. Un delator entregaba a Salvatore Giuliano, el legendario bandido del sur de Italia, que caía acribillado por la policía. En China, el gobierno de Mao daba sus primeros pasos prohibiendo la poligamia y la venta de niños. Las tropas norteamericanas entraban a sangre y fuego en la península de Corea, envueltas en la bandera de las Naciones Unidas, mientras los jugadores de fútbol aterrizaban en Río de Janeiro para disputar la cuarta Copa Rimet, después del largo paréntesis de los años de la guerra mundial.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Siete países americanos y seis naciones europeas, recién resurgidas de los escombros, participaron en el torneo brasileño del 50. La FIFA prohibió que jugara Alemania. Por primera vez, Inglaterra se hizo presente en el campeonato mundial. Hasta entonces, los ingleses no habían creído que tales escaramuzas fueran dignas de sus desvelos. El combinado inglés cayó derrotado ante los Estados Unidos, créase o no, y el gol de la victoria norteamericana no fue obra del general George Washington sino de un centrodelantero haitiano y negro llamado Larry Gaetjens.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Brasil y Uruguay disputaron la final en Maracaná. El dueño de casa estrenaba el estadio más grande del mundo. Brasil era una fija, la final era una fiesta. Los jugadores brasileños, que venían aplastando a todos sus rivales de goleada en goleada, recibieron en la víspera, relojes de oro que al dorso decían: <i>Para los campeones del mundo</i>. Las primeras páginas de los diarios se habían impreso por anticipado, ya estaba armado el inmenso carruaje de carnaval que iba a encabezar los festejos, ya se había vendido medio millón de camisetas con grandes letreros que celebraban la victoria inevitable.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Cuando el brasileño Friaça convirtió el primer gol, un trueno de doscientos mil gritos y muchos cohetes sacudió al monumental estadio. Pero después Schiaffino clavó el gol del empate y un tiro cruzado de Ghiggia otorgó el campeonato a Uruguay, que acabó ganando 2 a 1. Cuando llegó el gol de Ghiggia, estalló el silencio en Maracaná, el más estrepitoso silencio de la historia del fútbol, y Ary Barroso, el músico autor de <i>Aquarela do Brasil</i>, que estaba transmitiendo el partido a todo el país, decidió abandonar para siempre el oficio de relator de fútbol.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Después del pitazo final, los comentaristas brasileños definieron la derrota como <i>la peor tragedia de la historia de Brasil</i>. Jules Rimet deambulaba por el campo, perdido, abrazado a la copa que llevaba su nombre:<br />
</div><div style="color: #4c1130;">—<i>Me encontré solo, con la copa en mis brazos y sin saber qué hacer. Terminé por descubrir al capitán uruguayo, Obdulio Varela<a href="http://www.patriagrande.net/uruguay/eduardo.galeano/el.futbol.a.sol.y.sombra/obdulio.htm" target="_self"></a>, y se la entregué casi a escondidas. Le estreché la mano sin decir ni una palabra.</i><br />
</div><div style="color: #4c1130;">En el bolsillo, Rimet tenía el discurso que había escrito en homenaje al campeón brasileño.<br />
</div><div style="color: #4c1130;">Uruguay se había impuesto limpiamente: la selección uruguaya cometió once faltas y la brasileña, 21.<br />
</div><div style="color: #4c1130;"></div><br />
<object height="227" width="320"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/q-Rph3ZVKo0&hl=es_ES&fs=1&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/q-Rph3ZVKo0&hl=es_ES&fs=1&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="320" height="227"></embed></object><br />
<br />
<b>La maravilla de las pasiones que el fútbol despierta, puede analizarse de mil maneras diferentes, pero tal vez el secreto esté en la frase que hace pocos días dijo el Maestro Bielsa en El Salvador:</b><br />
<br />
<div style="text-align: center;"><b>"EN EL FÚTBOL NO SIEMPRE GANA EL TODOPODEROSO"</b><br />
</div><div style="text-align: center;">.<br />
</div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-81377743066533417712009-10-29T06:55:00.001-07:002009-10-29T07:21:55.499-07:00El partido de la muerte. Cuando el fútbol derrotó al nazismo.<meta content="text/html; charset=utf-8" http-equiv="Content-Type"></meta><meta content="Word.Document" name="ProgId"></meta><meta content="Microsoft Word 11" name="Generator"></meta><meta content="Microsoft Word 11" name="Originator"></meta><link href="file:///C:%5CDOCUME%7E1%5CWPablo%5CCONFIG%7E1%5CTemp%5Cmsohtml1%5C01%5Cclip_filelist.xml" rel="File-List"></link><o:smarttagtype name="PersonName" namespaceuri="urn:schemas-microsoft-com:office:smarttags"></o:smarttagtype><style>
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</style> <br />
<div class="MsoNormal">El <b>Dynamo de Kiev,</b> es el club más ganador de la Liga de Ucrania, una nación del este europeo que hasta los años 80 integró la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.<br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjms7Zn6zS7mqjKaqQQKY-KDQ796nrV3sUZt0MiSbf8uARJGscSDQ9mquJZt-GQQEyooy7GiJ2T-ZBDXCr2MJpZKyNNg_9gQu3SGpYI47QfeFWLYZBSuPUwO0IcwfJ5dNq2WzRLZ0yLl00/s1600-h/poster-el-partido-de-la-mue.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"> </a><br />
</div><div class="MsoNormal">Con trece Ligas locales, nueve Copas de la U.R.S.S., y algunos lauros internacionales (Recopa y Supercopa), el club fue cuna de Andriy Shevchenko, su máxima figura histórica, con quien llegó a una histórica semifinal de <st1:personname productid="la Champions Ligue." w:st="on">la Champions Ligue.</st1:personname> <br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Sin embargo, la riquísima historia deportiva del Dynamo de Kiev, tiene un eslabón de oro, en el que la camiseta blanca y azul del club brilló más que nunca, en medio de la gran tragedia que vivió el mundo durante el auge del nazismo en <st1:personname productid="la Segunda Guerra Mundial." w:st="on"><st1:personname productid="la Segunda Guerra" w:st="on">la Segunda Guerra</st1:personname> Mundial.</st1:personname><br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Con Ucrania invadida y ocupada por la Alemania de Hitler, los jugadores del Dynamo fueron reconocidos entre los prisioneros y autorizados a entrenarse en un campo de los suburbios, donde jugaron varios partidos con distintos combinados de aficionados alemanes y húngaros, sin que esto aliviara en nada las condiciones de servidumbre y hambre que soportaban, al igual que el resto de la población ocupada.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Ante la fama de imbatibles que fueron ganando los jugadores del Dynamo, fueron desafiados por un equipo del ejército alemán al que vencieron, tras lo cual los nazis prepararon “el gran desafío”: anunciaron con bombos y platillos “<st1:personname productid="La Gran Revancha" w:st="on">La Gran Revancha</st1:personname>”, que se jugaría el 12 de Junio de 1.942 entre el seleccionado del ejército alemán y un combinado de Kiev, al que llamaron “Star”, con gran mayoría de jugadores del Dynamo más algunos refuerzo del Lokomotiv de la misma ciudad. <br />
</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjms7Zn6zS7mqjKaqQQKY-KDQ796nrV3sUZt0MiSbf8uARJGscSDQ9mquJZt-GQQEyooy7GiJ2T-ZBDXCr2MJpZKyNNg_9gQu3SGpYI47QfeFWLYZBSuPUwO0IcwfJ5dNq2WzRLZ0yLl00/s1600-h/poster-el-partido-de-la-mue.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjms7Zn6zS7mqjKaqQQKY-KDQ796nrV3sUZt0MiSbf8uARJGscSDQ9mquJZt-GQQEyooy7GiJ2T-ZBDXCr2MJpZKyNNg_9gQu3SGpYI47QfeFWLYZBSuPUwO0IcwfJ5dNq2WzRLZ0yLl00/s320/poster-el-partido-de-la-mue.jpg" /></a><br />
</div><br />
<div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">El encuentro se disputó en el Estadio Municipal y las diferencias entre los integrantes de ambos equipos eran notorias: un muy entrenado equipo alemán, enfrentaba a un grupo de futbolistas pésimamente alimentados, que casi en harapos ingresaron a la cancha a jugar el gran partido de sus vidas.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Con las tribunas colmadas por el pueblo de Kiev, y la oficialidad nazi en el Palco de Honor, los alemanes comenzaron ganando, pero la garra de los ucranianos pudo más, y el primer tiempo finalizó con un inesperado dos a uno a favor del Start.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">La situación, no iba a ser tolerada por la plana mayor del ejército, uno de cuyos integrantes ingresó al vestuario en el descanso del entre tiempo para notificar a los jugadores de Kiev que nunca jamás un seleccionado alemán había sido derrotado por un equipo de los territorios ocupados, y que no sería esta la excepción, prometiendo fusilarlos a todos si el marcador no se revertía.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Aún a pesar de la amenaza, los jugadores salieron al campo decididos a no entregar lo único que los nazis no habían podido conquistar: su dignidad.<br />
</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEinlWf6XGcqPtx0ufCuJa7iuFPatxYRXAM5Eg41BqoGNup80jCo4CyfFJ2oAG0nr6nkz0t5eP11vml-cXaR2qS25s_NqjXq1KSxR4GWnGLD0-YQSBREfmO8oC3gkVEltj6c12FL8avGGUo/s1600-h/fc_start.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEinlWf6XGcqPtx0ufCuJa7iuFPatxYRXAM5Eg41BqoGNup80jCo4CyfFJ2oAG0nr6nkz0t5eP11vml-cXaR2qS25s_NqjXq1KSxR4GWnGLD0-YQSBREfmO8oC3gkVEltj6c12FL8avGGUo/s320/fc_start.jpg" /></a><br />
</div><br />
<div class="MsoNormal"><br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
Ante el delirio del público, el combinado convirtió rápidamente el tercer gol y a los pocos minutos el cuarto, dando al equipo nazi una verdadera lección de fútbol y coraje.<br />
</div><div class="MsoNormal">Antes de llegar a la mitad del complemento, el combinado marca un quinto gol, ante el festejo enloquecido de los hinchas locales y la furia de la humillada oficialidad del ejército alemán que se retira del campo, ante lo cual el árbitro da por finalizado el partido.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Al finalizar la jornada, los jugadores del combinado de Kiev, tal cual lo anunciado por el oficial invasor, fueron enviados a los campos de concentración del nazismo, donde varios de ellos fueron ejecutados a las pocas horas. <br />
</div><div class="MsoNormal">El crimen, fue reconocido por los oficiales alemanes en los históricos Juicios de Nuremberg donde se estableció que fueron asesinados el arquero Mykola Trusevich, Ivan Kuzmenko, Olexiy Klimenko y Mykola Korotkikh, y seguramente otros integrantes del equipo. <br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">El legendario “Partido de la Muerte”, fue luego llevado al cine por los húngaros, y más tarde por los norteamericanos en “Escape a la victoria”, la película de John Huston, protagonizada por Stallone y varios ex futbolistas profesionales, con Pelé y Ardiles, entre otros. En este film, sin embargo, el final fue acomodado a las necesidades de la industria de Hollywood, muy lejos de la realidad histórica.<br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">Distintas versiones pueden encontrarse sobre los sucesos narrados, pero esto es lo esencial de una historia en la que a través del fútbol, los oprimidos sacaron pecho frente a los opresores y los derrotaron en una cancha con una pelota como arma.<br />
</div><br />
Sobre el tema de la nota, pueden ver también: <br />
<a href="http://es.wikipedia.org/wiki/El_Partido_de_la_Muerte">wikipedia: el partido de la muerte </a><br />
<a href="http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-3038-2006-06-10.html">página 12: los once del patíbulo</a><br />
<br />
<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-44755495680612989982009-10-22T09:10:00.000-07:002009-10-25T05:11:08.121-07:00BRILLANTE DEFENSA DE DOLINA A DIEGO MARADONA<b>Vale la pena escuchar los 5' 39" de Alejandro Dolina respondiendo a una oyente sobre las declaraciones de Diego A. Maradona.</b><br />
<div style="color: blue;"><br />
</div><b style="color: blue;">"Lo dice un senador de la nación y es un piola, lo dice Maradona y aparece todo el racismo, todo el desprecio por los pobres, por los que menos tienen. Aparecen los muchachos de siempre a indignarse."</b><br />
<br />
<object height="344" width="425"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/fMv6H_FvfSs&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowScriptAccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/fMv6H_FvfSs&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1" type="application/x-shockwave-flash" allowfullscreen="true" allowScriptAccess="always" width="425" height="344"></embed></object><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-10110447667678310852009-10-16T21:50:00.000-07:002009-10-25T05:10:39.692-07:00O ASCENSO MAIS GRANDE DO MUNDOQue en Brasil se juega al fútbol que le gusta a la gente, es casi una verdad indiscutible, pero el ascenso del <b>VIANA</b>, de la segunda división de Maranhao, superó cualquier previsión.<br />
<b>El equipo ganaba 2 a 0 a los 36' del segundo tiempo, y estaba lejos de los 11 goles que necesitaba</b> para ascender a la categoría superior, pero de repente, volantes y delanteros se iluminaron, y e<b>n los últimos 9 minutos consiguieron marcar los 9 goles que hacían falta.</b><br />
<b>El resultado final: Viana 11, Chapadinha 0, </b>consagró al local, postergando al Moto Club que en su cancha goleó 5 a 1 al Santa Quiteria. <b><br />
</b><br />
Los dirigentes del Moto Club pidieron abrir una investigación por posible corrupción, aunque desde el Viana le respondieron que el trámite del partido había sido <b>absolutamente normal. </b><br />
<b>LA PELOTA NO SE MANCHA !!!</b><br />
<br />
Mirá el increíble video con los goles !!!<br />
<br />
<object height="344" width="425"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/snuRpc7TFsU&hl=es&fs=1&"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/snuRpc7TFsU&hl=es&fs=1&" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-35002854116938483232009-10-16T07:28:00.001-07:002009-10-25T05:09:59.725-07:00QUE LA CHUPEN !!!<meta content="text/html; charset=utf-8" http-equiv="Content-Type"></meta><meta content="Microsoft Word 11" name="Originator"></meta><link href="file:///C:%5CDOCUME%7E1%5CWPablo%5CCONFIG%7E1%5CTemp%5Cmsohtml1%5C01%5Cclip_filelist.xml" rel="File-List"></link><o:smarttagtype name="PersonName" namespaceuri="urn:schemas-microsoft-com:office:smarttags"></o:smarttagtype><style>
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</style> <br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Alcanza con revisar los archivos de TVR para darse cuenta de la miserabilidad de la gran mayoría de los periodistas deportivos argentinos.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Niembro diciendo que Verón ha cumplido un ciclo, Niembro diciendo que Verón a su edad es una figura mundial. Elio Rossi diciendo que Bielsa no sabe nada de fútbol, Elio Rossi diciendo que Bielsa es un señor y un sabio. El golpeador de mujeres Mariano Closs diciendo que Ruggeri tiene que ser el DT de la selección, el golpeador de mujeres Mariano Closs diciendo que para qué Ruggeri si hay otros mejores y de más experiencia.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Si esta condición de miserables se agotara en lo futbolístico, ya sería difícil de digerir, pero al extenderse a otros ámbitos, se torna aún más intolerable.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Los Fernando Niembro, Mariano Closs y muchos otros personajes que denigran a diario la profesión, inescrupulosos hasta provocar el vómito, no son serviles gratuitamente a los dictados de sus amos de turno. Botones de sus propios compañeros, a muchos de los cuales hicieron echar de sus trabajos, sostienen una carrera basada en la mala leche.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">En ese marco, uno de los papeles más indignos de la desinformación y la mentira es el del ex candidato presidencial Carlos Salvador Bilardo, que ha cambiado los alfileres de sus años de jugador, por maniobras no menos arteras y tramposas para llevar agua hacia los molinos que le dan de comer desde hace tiempo.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Todos ellos viven de la mala leche; de la mala leche direccionada y grosera hacia quienes no son afines a los caprichos mediáticos de sus patrones. Bianchi no sirve porque se planta y no da notas exclusivas, Bielsa no sirve por insobornable e inmanejable, Diego no sirve porque se pronuncia a favor de <st1:personname productid="la nueva Ley" w:st="on">la nueva Ley</st1:personname> de Medios y de la intervención del estado en la televisación del fútbol, y encima se declara amigo de Chávez y su revolución bolivariana.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">La selección argentina no jugó contra Uruguay y Perú, peor de lo que lo venía haciendo en partido anteriores, lo que cambió en estos tiempos es el humor de los multimedios. Curiosamente, la saña contra los jugadores y el cuerpo técnico se incrementó inexplicablemente, justo en los últimos dos partidos, en los que el equipo ganó y clasificó a Sudáfrica. Los comentarios del Pollo Vignolo y Macaya Márquez no dejaban dudas de cual era su posición desde el minuto cero del partido; justo Macaya, que al mejor estilo De la Rúa, se las ingenió para sobrevivir cuarenta años en lo suyo sin jugarse jamás, ni siquiera para opinar sobre si un penal estuvo mal cobrado o no. <br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">El “que la chupen” de Maradona, puede sonar chocante, pero es genuino y justiciero. Dejando a un costado el análisis sobre el juego en sí mismo, expresiones como “Pasman vos también la tenés adentro” vienen a sacar la careta e un periodismo rastrero, funcional a sus patrones y carente de opinión propia. Son en el fútbol, lo que son Silvestre y Bonelli, Nelson Castro y Lorena Maciel en otros terrenos de la comunicación desinformativa.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Que la chupen!!! <br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Que <st1:personname productid="la chupen T" w:st="on">la chupen T</st1:personname> y C y Fox Sport, que <st1:personname productid="la chupe Niembro" w:st="on">la chupe Niembro</st1:personname> y Closs, que la chupe el <st1:personname productid="Negro González" w:st="on">Negro González</st1:personname> Oro y el perrito faldero de Elio Rosi, que <st1:personname productid="la chupe Macaya" w:st="on">la chupe Macaya</st1:personname> y que <st1:personname productid="la chupe Clarín." w:st="on">la chupe Clarín.</st1:personname> <br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Como aquel cachetazo en vivo de una vecina de Palermo a Aíto de la Rúa, como la basureada mediática de Norma Plá al corrupto y vendepatria de Domingo Cavallo, como la celebrada piña del turco Samid a Mauro Viale, el ¡Que la chupen! De Maradona, viene dejarnos un pequeño gustito a justicia popular.<br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="color: #073763; text-align: justify;">Otro día hablamos de fútbol, pero ahora <b>¡QUE LA CHUPEN!</b><br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIDlzPOuAGvTbthM0GSu_KPEnp50k39Wv5vdhL_uLc134-HLg3Z_z8AsHH2ovNribtmISQecyI2qNo1OTLf6aTOfS-jGEVl9WYjqfg1-9nG1uieDABd7p1G-LOW34o4Kz2zsiGhLV7F2s/s1600-h/que+la+chupen.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIDlzPOuAGvTbthM0GSu_KPEnp50k39Wv5vdhL_uLc134-HLg3Z_z8AsHH2ovNribtmISQecyI2qNo1OTLf6aTOfS-jGEVl9WYjqfg1-9nG1uieDABd7p1G-LOW34o4Kz2zsiGhLV7F2s/s400/que+la+chupen.jpg" /></a><br />
</div><br />
<br />
<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-53218018853132118922009-10-08T05:53:00.000-07:002009-10-25T05:09:35.249-07:00TRINCHE CARLOVICH: EL MARADONA ROSARINO<b>"Avisen a los muchachos, que esta noche juega el Trinche"</b><br />
<br />
El fútbol nos regala, de vez en cuando, el placer de disfrutar del talento increíble de los tocados por la varita mágica. Alfredo Distéfano, Pelé, Jhoan Cruyff, Diego Maradona, son seres que parecen haber nacido para jugar al fútbol, y la pelota es en sus pies, un canto permanente de alegría maravillosa.<br />
<br />
Uno de esos privilegiados, no es tan conocido como los nombrados, pero para quienes lo vieron en una cancha, está en ese grupo selecto de los cracks de todos los tiempos. Su nombre: <b>TOMÁS FELIPE "EL TRINCHE" CARLOVICH</b>. De él, trata esta nota. <br />
<br />
<div class="separator" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvQ02bl69PuWUA65gZ4sKNOR1szBof3PA96RxLuZn2fUwWOhZTpGU7dySvCOhgOwnfgHiVIUWJAxBIw3PEw8W0o4_PeERHxNp4nhhlzVCs6EY8mrpU62m1zNBBv53is5F6FEjr2JywQmo/s400/trinche+carlovich.htm" /><br />
</div><br />
<span style="font-size: x-small;"><b style="color: #0c343d;">El Trinche fue un CINCO de otro planeta. Figura histórica de Central Córdoba de Rosario.</b></span><br />
<br />
<span style="font-size: small;">Carlovich nació en Rosario en 1949 y jugó inferiores en Rosario Central, donde tuvo debut y despedida frente a Los Andes. Fue el único partido que el Trinche jugó para los canallas.</span><br />
<span style="font-size: small;">En 1970 pasa a Flandria, y pocos meses después inicia su carrera en Central Córdoba, donde convierte dos goles en su presentación, iniciando un romance con los hinchas que fue creciendo hasta ser ídolo absoluto de la institución rosarina. </span><br />
<span style="font-size: small;">Tres años después, se consagra campeón de Primera "C" en lo que fu esu primer título en el fútbol.<br />
</span><br />
<span style="font-size: small;">En 1974, la selección argentina que se preparaba para viajar al Mundial de Alemania, se enfrenta a un combinado rosarino que integraron cinco jugadores de Rosario Central, cinco de Newell's y el Trinche Carlovich, de Central Córdoba.</span><br />
<span style="font-size: small;">Ese fue su gran día de gloria. Al terminar el primer tiempo, los rosarinos ganaban 3 a 0 y cuenta la leyenda que los muchachos recibieron una visita en el entretiempo pidiendo piedad para el seleccionado de Vladislao Cap, que pidió expresamente que saquen a ese 5 de la cancha. Mario Kempes y Mario Zanabria, integraban también aquel gran combinado rosarino que terminó ganando 3 a 1.</span><br />
<span style="font-size: small;">En el 76, Carlovich pasa a Independiente Rivadavia de Mendoza, y en un amistoso ante el Inter juega lo que para el fue uno de los mejores partidos de su vida con victoria por 3 a 1.<br />
</span><br />
<span style="font-size: small;">Un año después se incorpora a Colón de Santa Fe, donde algunas lesiones comienzan a cercarlo, y vuelve luego a Mendoza para sumarse al Deportivo Maipú. </span><br />
<span style="font-size: small;">Si una jugada simboliza el talento y el desparpajo del Trinche Carlovich, es el "caño de ida y vuelta". En un encuentro ante Talleres de Escalada, Carlovich deleitaba a los hinchas con su juego y dice también la memoria popular, que por un pedido de un fanático, el genio realizó la maniobra con tanta limpieza y categoría que la parcialidad local enloqueció en una ovación inolvidable. Depués de aquella tarde, el Trinche repetiría la jugada varias veces a lo largo de su carrera.</span><br />
<br />
<span style="font-size: small;">Cuando Maradona llego a Rosario para jugar en Newell's, declaró a la prensa: "el mejor jugador ya jugó en Rosario, y era un tal Carlovich". José Pekerman lo definió como "el jugador más maravilloso que vi" y para Griguol "Era un fenómeno al que no le gustaba el sacrificio y por eso no triunfo. Jugaba conmigo en Central, pero el prefería irse de caza o de pesca. Qué lástima!".</span><br />
<span style="font-size: small;">Tambiuén se cuenta que el Flaco Menotti, quien dijo que "era impresionante verlo", lo citó para un entrenamiento con jugadores del interior cuando estaba armando el Seleccionado del interior, pero el Trinche faltó a la cita por compartir una jornada de pesca con algunos amigos. De aquel combinado sería escogido Mario Alberto Kempes, que fue goleador del Mundial ´78 que ganó Argentina.<br />
</span><br />
<span style="font-size: small;"><br />
</span><br />
<div style="font-family: inherit;"><span style="font-size: small;">Carlovich, sin embargo, desmintió la versión:</span> <i><b>"La verdad es que yo no tuve otra ambición más que la de jugar al fútbol. Y, sobre todo, de no alejarme mucho de mi barrio, de la casa de mis viejos donde voy casi todas las tardes, de estar con el Vasco Artola, uno de mis mejores amigos que me llevó de chico a jugar en Sporting de Bigand</b></i>. <i><b>Se dicen muchas cosas y varias no son verdad”.</b></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><br />
</div><div style="font-family: inherit;">El Semanario Colón Doce, publicó hace más de dos años, una entrevista al crack, de la que copiamos algunos párrafos:<br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;"> “En ese tiempo no sabía que otra cosa hacer. Desde chico siempre estaba con la pelota y mis hermanos eran todos jugadores. Ya ni me acuerdo a que edad era pero calculo que a los cinco. Mis primeros pasos los hice en Rosario Central. Después pasé a un club de Bigand”. </span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"> </span></i><br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"></div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;">¿Cómo era en esa época el fútbol?<br />
Siempre fue lo mismo. Hoy quieren inventar que se corre mas, que es mas físico. No es así. Lo que te puedo decir que en la actualidad hay menos jugadores con técnica que en esa época. En cada equipo abundaban los que trataban bien a la pelota.</span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;">¿Cómo se definiría como jugador?<br />
Muchas veces me lo han preguntado pero jamás me lo puse a pensar. Quizás tenía mucha fuerza, un gran físico que me hacía un poco lento pero una vez que arrancaba era distinto jeje.</span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;">¿Qué recuerda del partido ante la Selección Nacional?<br />
Ese partido fue el que me marcó. Hicimos un Seleccionado de Rosario con jugadores de Newell´s, Central y el único de Central Córdoba era yo. Ganamos tres a uno y fue un baile terrible. Había 10 mil personas que para la época estaba mas que bien. Todos me asignan el triunfo a mí pero fue todo el equipo el que jugó bien. Un solo jugador no te gana los encuentros. </span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;">¿Qué siente cuando Diego Maradona habla maravillas de usted?<br />
Es extraño. Me da vergüenza. Yo soy un tipo que le escapa a las notas, ya sea de radio o televisión. Es mi forma ser. Pero sin dudas que me enorgullece y me pone contento por todo lo que fue él como jugador. Jamás tuve la oportunidad de hablar con él pero si se que cuando jugábamos en Buenos Aires iba a vernos.</span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div><div align="justify" style="font-family: inherit; margin: 0pt;"><i><span style="font-size: small;">¿Por que dejó el fútbol?<br />
Eso es lo que me pregunto yo también muchas veces. Tenía 39 años cuando largué pero me sentía bien. Creo que a la gente de Central Córdoba no le hacía mas falta y di un paso al costado. No me arrepiento de nada. Tuve buenos momentos también en Men doza y en Colón de Santa Fé, aunque por una lesión no jugué muchos partidos.</span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div><div style="font-family: inherit;"><i><span style="font-size: small;"> ¿Se siente olvidado por la gente?<br />
Si, mucho. En el caso de Central Córdoba yo estuve muchos años jugando ahí y el partido homenaje que sirvió para recaudar fondos para mi operación fue organizado por algunos de mis amigos. Creo que yo me merecía otro trato de parte del club, faltó que me cobren la cancha por poco. Mi deseo es, aunque sea dirigir alguna categoría de inferiores.</span></i><br />
</div><div style="font-family: Times,"Times New Roman",serif;"><i><span style="font-size: small;"><br />
</span></i><br />
</div>El último 20 de setiembre, el <a href="http://www.lacapital.com.ar/contenidos/2009/09/20/noticia_0013.html">Diario La Capital de Rosario</a>, informaba que el Trinche Carlovich sería el DT interino de Central Córdoba que realiza una muy floja campaña en la "B" Metropolitana.<br />
De su debut como DT, escribe la página <a href="http://www.todoascensoweb.com.ar/cobertura/2009/09/28/central-cordoba-1-tristan-suarez-1-le-cambio-la-cara.html">Todo Ascenso</a>:<br />
"Con el debut del trinche Carlovich como DT charrua, Central Córdoba jugó su mejor partido del campeonato, dominando en la mayoría del cotejo a su rival pero a la hora de concretar falló"."<br />
"El dos por uno por el trinche valió la pena, ya que con esta promoción (idea de la Comisión Directiva charrua) se acercó muchísima gente al Gabino Sosa como hacia tiempo no se veía. El plus: el equipo se fue aplaudido por toda la parcialidad matadora, cosa que también hacia mucho tiempo no pasaba.<br />
<b>El dato:</b> Tomas Felipe Carlovich al no tener carnet que lo habilite como director técnico tuvo que guiar al equipo desde el alambre, como un hincha más."<br />
<br />
La página del Trinche como DT comenzó a escribirse hace muy poquitos días, ojalá sea tan exitosa como la que Carlovich dibujó desde adentro de la cancha.<br />
<br />
Copiamos de<a href="http://loscuentosdelapelota.blogspot.com/2007/10/todo-lo-que-poda-salir-mal-sali-mal.html"> Los cuentos de la Pelota</a>, algunas frases sobre el crack rosarino, y otras del mismo Carlovich, que pintan de cuerpo entero su pasión por el fútbol. <br />
<br />
<b><u>César Luis Menotti</u>:</b> <i>"Carlovich fue uno de esos pibes de barrio que, desde que nacen, tienen como único juguete la pelota. Entre él y la pelota había una relación muy fuerte. La técnica que tenía lo convertía en un jugador completamente diferente. Era impresionante verlo acariciar la pelota, tocar, gambetear... Claro que, al mismo tiempo, durante su carrera no encontró reservas físicas que sostuvieran todas las condiciones técnicas que tenía.<br />
Además, desafortunadamente, tampoco tuvo a nadie que lo acompañara y lo comprendiera. Es una pena, porque Carlovich estaba llamado a ser uno de los jugadores más importantes del fútbol argentino. Me acuerdo que lo vi jugar en un combinado de Rosario contra la Selección Argentina y fue el mejor hombre de la cancha. Y eso que, entre otros, había monstruos como Miguel Brindisi. Verlo era un deleite. Después no sé qué le pasó. Tal vez lo aburría el fútbol profesional. A él le gustaba divertirse y no se sentía a gusto con algunos compromisos".</i><br />
<br />
<b><u>Roberto Fontanarrosa</u>:</b> <i>"El Trinche era un fenómeno. Hacía cosas que nadie esperaba. Era habilísimo y le pegaba a la pelota, además de fuerte, con una variedad de golpes fabulosa. Anticipó cosas que después se le vieron a Borghi. Carlovich era un atorrante; cuando jugaba en las inferiores de Central, Ignomiriello tenía que ir a buscarlo a la casa para que fuera a entrenar. Coincido con los que dicen que fue uno de los mejores jugadores argentinos."</i><br />
<br />
<b><u>Aldo Pedro Poy</u>:</b> <i>"No entiendo por qué no llegó a jugar en algún club importante. Tenía unas condiciones técnicas extraordinarias. Era medio lento, pero muy hábil. Y guapo. Todavía no vi otro cinco como él. Aquel partido de la Selección con el combinado de Rosario, en el que yo jugué para la Selección, Carlovich la rompió. No lo podíamos parar, ni a él ni a sus compañeros. Nos ganaron 3 a 1 porque pararon la máquina y al "Trinche" lo sacaron a los 15' del segundo tiempo, si no..."</i><br />
<br />
<b><u>Ubaldo Matildo Fillol</u>:</b><i>"Descubrí a Carlovich en un amistoso de la Selección Argentina que se preparaba para el Mundial de Alemania -y que yo también integraba- contra un combinado rosarino. Ese día la descosió. Tenía un dominio de la pelota y un panorama increíbles. Fue el mejor cinco que vi en mi vida."</i><br />
<br />
<b><u>Eduardo Quinto Pagés</u></b> (arquero, ex compañero en Central Córdoba): <i>Yo en Central Córdoba tengo la valla menos vencida de su historia, 606 minutos. Tenía una defensa fantástica, pero ¿quién nos iba a hacer goles? ¡Si estábamos siempre en el arco de los contrarios! Nos llevaba el Trinche para allá… Entonces, yo tengo que pensar que eso que tengo es gracias a él.<br />
Yo salí campeón con Central Córdoba y salí campeón porque el Trinche estaba en el equipo nuestro.</i><br />
<br />
<b><u>Carlos Timoteo Griguol</u>:</b><i>"Carlovich tenía condiciones técnicas únicas. Al marcarlo, el tipo desaparecía por cualquier lado y con él desaparecía el balón".</i><br />
<br />
<b><u>Mario Nicasio Zanabria</u>:</b><i>"Carlovich era el mejor resumen del potrero. Era zurdo, pateaba tiros libres, tiraba caños dobles, sombreros dobles, la pisaba de acá para allá, no se la podían sacar. Era desfachatado y pachorriento. Jugaba como si estuviera en el patio de su casa. Creo que nunca fue figura porque no le interesaba crecer profesionalmente y detestaba la alta competencia."</i><br />
<br />
<b><u>José Néstor Pekerman</u>:</b> <i>"El mejor cinco que vi en mi vida, lo incluyo en mi once ideal".</i><br />
<br />
Pero quizás quien mejor resumió en palabras la leyenda que se tejió en torno al “Trinche" fueron las de Diego Maradona. Según cuentan, cuando llegó a Rosario para jugar en Newell’s, un periodista le confesó el orgullo por recibir en Rosario “al mejor jugador”. El “Diez”, rápido como siempre, contestó: <i>"El mejor jugador ya jugó en Rosario y es el "Trinche" Carlovich... </i><br />
<br />
<b><u>Frases</u></b><br />
<br />
"Es cierto que me sentaba en la pelota durante el partido. Pero no era una provocación. Por ahí ellos no presionaban y yo estaba un poco cansado."<br />
<br />
"Una vez me vinieron a buscar del Cosmos de Pelé. Estaba todo listo y se cayó. Después pasó lo mismo cuando estaba por ir a Francia. Igual, siempre disfruté de estar cerca de mi casa y jugando al fútbol."<br />
<br />
"A mí me sigue sorprendiendo la gente. En todos lados. La otra vez estuve en Mendoza que hace veinte años que no iba y salían de los negocios, en el restaurante que comía cuando jugaba allá me tenían la mesa reservada, había tres mil personas en el estadio. No es fácil todo eso. O por ahí viene un pibe que nunca te vio jugar, porque ni siquiera hay videos y te dice que sos su ídolo porque andá a saber lo que le contó el padre o el tío."<br />
<br />
"Los jugadores de la Selección Argentina se habían puesto nerviosos. Nos insultaban porque no les salían las cosas. Pero esos partidos son especiales. Capaz que jugás 200 y perdés todos. Aunque esa vez les ganamos 3 a 1."<br />
<br />
"En Central Córdoba me daban premio por los caños."<br />
<br />
"Con lo del fútbol espectáculo y todas esas cosas, me di el gusto de jugar con todos. Menos con ‘el Diego’. Jugué con Alonso, Bochini, Kempes, Fillol, con todos. Y de los de ahora me gustaría jugar con Pablo Bezombe. Me divierte, tiene calidad. No toca la pelota, la acaricia. Por él volví a la cancha. ¡En serio! Hace mucho que no iba y ahora voy todos los sábados. Me gustan los jugadores distintos y, lamentablemente, si antes eran diez buenos y alguno regular, ahora con suerte ves a uno o dos que jueguen lindo. Y encima al que tira un caño lo levantan por el aire… ¿qué es eso?”."<br />
<br />
"Mi principal virtud era querer la pelota a cada rato. Si no la tenía me desesperaba."<br />
<br />
"En Rosario Central sólo me pusieron en un partido de Primera, contra Los Andes. Pero en esa época no había lugar para mí. Era el final de los años sesenta y el técnico Miguel Ignomiriello prefería a otro tipo de jugador. Así que me fui a Central Córdoba."<br />
<br />
"Acá en Rosario, se han inventado un montón de cosas acerca de mí. Pero no son verdad... A los rosarinos les gusta contar cuentos. Algún caño de ida y vuelta habré hecho, pero no es para tanto."<br />
<br />
"Nunca me gustó cafetear en los bares o ir a los bailes… La única diversión mía siempre fue jugar a la pelota."<br />
<br />
" Central Córdoba es lo más grande que me dio la vida."<br />
<br />
"El otro día fui a la casa de un amigo que la hermana le había traído unos botines y una pelota de Estados Unidos. Los botines pesaban menos que cien gramos de mortadela (risas) una cosa de locos, le podías sacar la suela y qué sé yo. Me dijo que son los que usa Beckham, y lo que no entiendo es cómo alguien le puede pegar mal a una pelota con semejantes zapatos. Y un muchacho, que se operó las dos piernas, me contó que ya jugó dos partidos y yo no lo podía creer. Cuando pueda, me voy a operar la otra cadera y te aseguro que si puedo volver a jugar, aunque sea un ratito, me vuelvo loco. Creo que no aguantaría la emoción, ¡si hace como diez años que no toco una pelota! Bah, ese día, en la casa de éste amigo, la agarré un cachito, ¿viste? Pero no soy arquero, yo la tengo que tocar con los pies. El tacto yo lo tengo en el pie…"<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: small;"><b>TRINCHE CARLOVICH: GRACIAS POR EL FÚTBOL !!!</b></span><br />
</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisc9FAiiDigopDylKPlHdXFbZLx9FPnMYihdqek2fVFPElWJhzvCqA_3c9mq4yGe5JPn9X3-qW6qnVRs-k4cHxO5tGIEz8Qvd_5Dn6_JwIu74mYT7TEfIUv8c8zjzCLNE1PoCs4liZvks/s1600-h/trinche_III.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisc9FAiiDigopDylKPlHdXFbZLx9FPnMYihdqek2fVFPElWJhzvCqA_3c9mq4yGe5JPn9X3-qW6qnVRs-k4cHxO5tGIEz8Qvd_5Dn6_JwIu74mYT7TEfIUv8c8zjzCLNE1PoCs4liZvks/s400/trinche_III.jpg" /></a><br />
</div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-3675074811366447582009-09-22T05:52:00.000-07:002009-09-22T06:21:50.114-07:00Enrique Santo Discépolo.<b></b><br />
<b>Enrique Santo Discépolo </b>nació el 23 de Marzo de 1901.<br />
Tuvo una dura infancia por la muerte de su padre primero (en 1906) y de su madre poco después (en 1910). Luego de una severa educación en casa de unos tíos, vive con su hermano al contraer éste matrimonio, ante quien sincera su falta de compromiso con la educación tradicional y su fuerte vocación por la actuación.<br />
<br />
Los segundos de video que traemos para compartir con ustedes son parte de una de las más impresionantes interpretaciones de este gran artista argentino. Su monólogo en la película <b>"EL HINCHA"</b> está entre los momentos más recordados del cine nacional. <br />
<br />
Discépolo fue autor maravilloso de numerosos tangos consagrados por el público como "Chorra", "Esta noche me emborracho", "Yira, yira", "Malevaje", "Cafetín de Buenos Aires" y "Cambalache". <br />
La vida de Discepolín fue en sí misma, una verdadera aventura cinematográfica. <br />
Murió el 23 de diciembre de 1953.<b><br />
</b><br />
Podés leer una muy completa biografía, <a href="http://www.elforjista.unlugar.com/discepolo.htm">haciendo click aquí.</a><br />
<br />
<object height="285" width="340"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/x_FrQg9Fi3Y&hl=es&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00&border=1"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/x_FrQg9Fi3Y&hl=es&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00&border=1" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="340" height="285"></embed></object><br />
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<span style="font-size: small;">Su gran amigo Homero Manzi, compuso para el un tango, cuya letra transcribimos: <b> <br />
</b></span><br />
<br />
<div style="text-align: left;"><span style="font-size: small;"><b> <span style="color: #073763;">DISCEPOLÍN</span></b></span><span style="color: #073763; font-size: x-small;"><br />
<span style="font-size: small;">Sobre el mármol helado, migas de medialunas,<br />
y una mujer absurda que come en un rincón;<br />
tu musa está sangrando y ella se desayuna.<br />
el alba no perdona, no tiene corazón.</span></span><br />
<span style="color: #073763; font-size: x-small;"><span style="font-size: small;">Al fin, ¿quién es culpable de la vida grotesca</span></span><br />
<span style="color: #073763; font-size: x-small;"><span style="font-size: small;">y del alma manchada con sangre de carmín?<br />
</span></span><br />
<span style="color: #073763; font-size: x-small;"><span style="font-size: small;">Mejor es que salgamos antes de que amanezca,<br />
Antes de que lloremos, ¡viejo Discepolín!</span></span><br />
</div><div style="color: #073763; text-align: left;"><span style="font-size: small;">Conozco de tu amargo sufrimiento,</span><br />
<span style="font-size: small;">y comprendo lo que cuesta ser feliz</span><br />
<span style="font-size: small;">Y al son de cada tango te presiento</span><br />
<span style="font-size: small;">con tu talento enorme y tu nariz...</span><br />
<span style="font-size: small;">Con tu lágrima amarga y escondida,</span><br />
<span style="font-size: small;">con tu careta pálida de clown</span><br />
<span style="font-size: small;">y con esa sonrisa entristecida</span><br />
<span style="font-size: small;">que floreces en verso y en canción.</span><br />
</div><div style="color: #073763; text-align: left;"><span style="font-size: small;">La gente se te arrima con su montón de penas,</span><br />
<span style="font-size: small;">y tú las acaricias casi con un temblor.</span><br />
<span style="font-size: small;">Te duele como propia la cicatriz ajena,</span><br />
<span style="font-size: small;">aquél no tuvo suerte y ésta no tuvo amor...</span><br />
<span style="font-size: small;">La pista se ha poblado al ruido de la orquesta,</span><br />
<span style="font-size: small;">se abrazan bajo el foco muñecos de aserrín</span><br />
<span style="font-size: small;">¿No ves que están bailando...? ¿No ves que están de fiesta?</span><br />
<span style="font-size: small;">Vamos, que todo duele, ¡viejo Discepolín!<br />
<br />
<b>Homero Manzi </b></span><br />
<br />
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</div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-84574125091411663152009-09-22T05:09:00.000-07:002009-09-22T05:11:14.215-07:00Fútbol infantil: ¿Campo de juego o campo de batalla?<b>La nota que transcribimos a continuación, fue publicada por la revista cultural <a href="http://www.utn.edu.ar/latela/latela05.utn">"La Tela de la araña"</a>, de la Universidad Tecnológica Nacional, en su edición de Julio-Agosto de 2008. En el enlace citado puede bajarse en formato PDF.<br />
</b><br />
<b> </b><br />
En 1931, River Plate pagó diez mil pesos por el pase del wing derecho Carlos Peucelle y treinta y cinco mil por Bernabé Ferreira y al año siguiente invirtió más de cien mil para formar un plantel que sería campeón ese mismo año. <br />
<br />
Allí, no sólo nació el mote de “Millonarios” con el que aún hoy se conoce al club de Nuñez, también comenzó a moldearse la forma que el “sueño americano” adoptaría en estas pampas; el fútbol empezó a ser sinónimo de escalera social, y con ello, en un muy lento pero irreversible proceso, la pasión por los colores dejó pasó a la atracción de los billetes.<br />
<br />
Es precisamente en esta época de irrupción del profesionalismo en el deporte, cuando comienzan a emerger masivamente las instituciones barriales, que si bien no son hijas de este proceso, están ligadas a este momento de auge cultural, social y económico del fútbol, surgen a su sombra y aún cuando existan otras razones que expliquen su multiplicación casi geométrica, la influencia de esta realidad es notoria, les da a la actividad social de lo clubes una dirección definitiva; a partir de aquellos años, los cientos de entidades civiles que aparecen, tienen al deporte, y fundamentalmente al fútbol, como actividad central de su vida social.<br />
<br />
El baby fútbol es desde hace muchos años, cuna de jugadores. La casi desaparición del potrero, y también de la calle como escuela natural, dejó paso a una múltiple oferta que llega a los pibes cada vez a edades más tempranas: las escuelas de fútbol se ofrecen a los padres ávidos del éxito de sus hijos, que desde que la ecografía dice varón, ya creen tener a un Messi en la familia. Antes de los 5 años, y de la mano de papá o mamá, los pichones de crack ingresan a la práctica deportiva y casi de inmediato se incorporan a la competencia, que en muchos casos es una auténtica picadora de carne.<br />
<br />
Frente a esta avalancha de cantos de sirena,<b> los clubes de barrio siguen siendo los lugares donde la resistencia a este proceso es más genuina</b>. Si bien las particularidades de cada institución tienen que ver con su propia historia, su inserción geográfica y su conformación social, hay un rasgo común que las identifica: su creación tiene que ver con el aluvión poblacional que tuvieron los suburbios de las grandes ciudades en las primeras décadas del siglo XX. En la década de 1930, los clubes de barrio surgían uno tras otro. En cada nuevo caserío, surgió naturalmente la necesidad de conformar centros sociales que identificaran y aglutinaran a los nuevos pobladores. Miles de inmigrantes llegados de una Europa en llamas, intentaban adaptarse a sus nuevas vidas y encontraron en estos centros sociales, un punto donde canalizar sus inquietudes y su tradición cultural. En esta tradición, el deporte no ocupa un espacio menor, y en ese sentido el fútbol supo dar a esa necesidad de pertenecer, un punto de referencia irremplazable.<br />
<br />
Tal vez en estos orígenes deban buscarse las razones que hicieron de los clubes una usina permanente de espíritu solidario y organización comunitaria, que aún en las peores crisis, pudo sobrevivir, y reafirmarse a partir de éstas mismas. La historia de la organización y el desarrollo del fútbol infantil en la Argentina tiene notables punto de contacto con la realidad social, política y económica de nuestro país.<br />
<br />
La Federación argentina de deportes infantiles (FADI) fue fundada a fines de 1.959 con representantes de distintos puntos del país y su primer nombre fue una expresión de deseos “SEAMOS AMIGOS”. El lema fundacional, que recogía y sintetizaba el espíritu de aquellos pioneros sufrió las inclemencias de una realidad vertiginosa; lentamente, la confraternidad deportiva de los tiempos del estado paternalista fue encausada y adaptada a estos tiempos donde el dios a adorar es la competencia. Hoy, el cartel de “seamos amigos” fue reemplazado por el de “seamos los mejores”.<br />
<br />
El correlato de este cambio, por supuesto, también está en las canchas, donde los pibes ya no van a divertirse, sino a ganar. La presión por el resultado es tan grande, que desde edades muy tempranas sufren con rigor de profesionales. El panorama es desolador: entrenadores que gritan, padres que gritan, madres que insultan a los chicos del otro equipo, jugadores que no saben aún atarse los cordones pero ya aprendieron a pegar el codazo cuando el árbitro no los ve o a caer como Vic Morrow en Combate cuando la pierna de un rival le roza la propia. Los chicos que pierden se van llorando, se niegan a saludar al ganador y entran al vestuario pateando la puerta, gestos todos que son celebrados por padres, tíos y entrenadores como demostración de guapeza, virilidad y hambre de gloria. El discurso oficial que divide al mundo en “ganadores” y perdedores”, encuentra en la inocencia de los chicos un terreno demasiado fértil.<br />
<br />
Claro que, afortunadamente, no todo está perdido, y son muchos los que desde los clubes se niegan al cambio del cartel, los que quieren ver pibes jugando a la pelota, y no “proyectos” o “salvadores de futuros”.<br />
<br />
Hace algún tiempo, desde la publicación “PRENSA VERDE” del Club Villa Argentina de Gerli, Avellaneda, tuvimos el gran placer de mantener una larga charla con Norberto Ruso Verea, referente si los hay, de los que ponen la pelota por delante del negocio, el juego por encima del resultado, y la bandera de la ética frente al discurso de la trampa. <br />
<br />
<b>“Antes que educar a los pibes, hay que educar a los padres. A los pibes hay que dejarlos jugar”</b>, decía Verea, y la frase resuena en los oídos cuando cada sábado vemos al energúmeno de turno gritándole a su hijo “partilo”, después que su rival, otro pibe de 7, 8 ó 10 años, lo gambeteara por enésima vez.<br />
<br />
En otro momento de la charla, tan entretenida como educadora, dice el Ruso: <br />
<br />
“Ese mensaje oficial es muy perverso: el que gana existe y manda, y el que no gana no existe. Las competencias están armadas de una manera donde el gran negocio, aún siendo pibes, termina siendo más importante que el desarrollo y el crecimiento de los chicos, porque pibes hay muchos y porque padres con la ilusión de salvar con el pibe un futuro que ellos no pudieron conseguir, entregan a los pibes a toda esta máquina, que en muchos casos es una máquina perversa”. <br />
<br />
Y no deja mucho para agregar. <br />
<br />
<b>“Se juega como se vive”</b> sentenció hace muchos años, el Flaco Menotti. Y habrá que rendirse ante la frase. En el fútbol infantil, hay más desesperación que alegría, más odio por el otro que celebración por el mérito propio, más apología de la trampa que apuesta al trabajo y al juego colectivo. <br />
<br />
“Belleza” pedía otro filósofo del fútbol argentino desde su puesto de mando en el banco de suplentes , y eso es, precisamente, lo que seguimos gritando los que estamos de este lado del campo: belleza, alegría, gambeta y pared! porque en el fútbol como en la vida, el camino es lo importante y ningún resultado vale el llanto de un pibe. <br />
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<b>Pablo A. ISI</b><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-41837487405866725152009-09-04T10:24:00.000-07:002009-09-09T11:19:12.415-07:00La leyenda de ALUMNI<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrN0uecHb3xB4CYf5S3SobzAr_qs_XRVC2jFJYeMGUjpWn0qRFOLDAwdZg3wX-3x7vwJwH_bqd6Vvyx3nVFiNHb2LxvQ1Z6AxfWxVKXO09v5oXqRCmfubhF9eFV1aDYIiU4TRKe1h7bos/s1600-h/Alejandro_Watson_Hutton.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 143px; height: 221px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrN0uecHb3xB4CYf5S3SobzAr_qs_XRVC2jFJYeMGUjpWn0qRFOLDAwdZg3wX-3x7vwJwH_bqd6Vvyx3nVFiNHb2LxvQ1Z6AxfWxVKXO09v5oXqRCmfubhF9eFV1aDYIiU4TRKe1h7bos/s200/Alejandro_Watson_Hutton.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5377664824398123826" border="0" /></a>En 1891 se disputó el Primer campeonato de primera división del Fútbol Argentino, y Saint Andrew’s se convirtió en el primer campeón de la Argentine Association Football Ligue, que se disolvió al terminar el torneo.<br />La Liga de Fútbol Amateur, sentó las bases para que algunas décadas después, nuestro país se convierta en una potencia del fútbol mundial, cuna de cracks que con el sello inconfundible de los potreros criollos desparramaron talento por las canchas del mundo.<br /><br />La historia, debe necesariamente remontarse más de una década atrás, cuando el profesor escocés <span style="font-weight: bold;">Watson Hutton</span> llegó a estas tierras, decidido a que en ellas se jugara al fútbol, juego que hasta entonces sólo estaba reservado a los súbditos ingleses y sus descendientes.<br /><br />Sin embargo, no sólo el fútbol era la preocupación del profesor: en 1884 funda el English High’s School para poner en práctica sus ideas educativas en las que el deporte tenían un papel relevante. El fútbol fue el deporte elegido para desarrollar esta convicción pedagógica.<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7bt9DfUtLtXjcyjj6eAsh2IDFRJT_AlghVgK78WBBQpHr53_qQP3aeTsSqHdecSCKU_DQFMDYIqFNU8WWp1YYWXJU-Y_biO7IRWABhGz5nXls8r9yu5Dowb-VuiKhyYhVVSmxkT9gZS0/s1600-h/BAEHS+1899.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 215px; height: 161px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7bt9DfUtLtXjcyjj6eAsh2IDFRJT_AlghVgK78WBBQpHr53_qQP3aeTsSqHdecSCKU_DQFMDYIqFNU8WWp1YYWXJU-Y_biO7IRWABhGz5nXls8r9yu5Dowb-VuiKhyYhVVSmxkT9gZS0/s200/BAEHS+1899.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5377665104918487378" border="0" /></a>En el patio del colegio English High’s School primero y en un terreno alquilado de la zona de Barracas después, el profesor Hutton fue un propulsor incasable de este deporte y mucho tuvo que ver en la organización y desarrollo de las primeras asociaciones civiles que lo practicaron.<br /><br />En el período amateur, que se extenderá hasta 1934 (conviviendo entre 1931 y 1934 con el profesionalismo), hubo un equipo que tras ganar diez torneos, se consagró como el más grande y prestigioso de este nuevo deporte y que aún hoy conserva en su nombre legendario, el prestigio intacto de haber marcado a fuego las primeras época del fútbol criollo: ese equipo se llamó <span style="font-weight: bold;">ALUMNI.</span><br /><br />Alumni ganó diez torneos entre los años 1900 y 1911. Sólo en dos campeonatos durante ese lapso, fue relegado por el Belgrano Athletic, en 1904 y 1908.<br />A menos de dos años de su última consagración, un 24 de Abril de 1913, una Asamblea de socios declaraba la disolución del club y el nacimiento del mito.<br />El equipo lo habían formado un grupo de amigos de la English High Scholl, e incluso con ese nombre ganaron su primer título. Luego, fueron obligados a cambiar el nombre, ya que la asociación entendía que era una denominación comercial, pero aún conservaron el escudo de la escuela en sus camisetas.<br />Cuenta Oscar Barnade en una nota de Clarín del año 2003, que Carlos Lett, ex jugador de aquel equipo, sostuvo que "El secreto de su éxito se debió a la amistad que existía entre los jugadores, más que a la habilidad de sus componentes. En este juego una gota de mala sangre entre dos de los jugadores pronto afecta a todo el team, cosa que nunca sucedió, debido, en gran parte, al carácter de los hermanos Brown, y muy especialmente al de Jorge"<br />Alumni no fue un club, fue sólo un equipo de fútbol, pero pasó a la historia como símbolo de una manera de entender el deporte: la hidalguía, el juego limpio y la defensa irrestricta del espíritu amateur fueron sus banderas, y la técnica que predominaba en los jugadores escoceses siempre fue puesta delante de la potencia que prevalecía entre los ingleses.<br />Pedro Uzquiza, en una nota de Clarín del 22/12/2000, cuenta una anécdota que pinta de cuerpo entero la pasión con que aquellos pioneros vivían su actividad:<br />“En 1904 llegó en gira el primer equipo inglés de primera división: Southampton. El 26 de junio el presidente Roca fue uno de los ocho mil espectadores que presenciaron el triunfo del equipo inglés sobre Alumni por 3-0, en la sede de la Sociedad Sportiva, donde actualmente se encuentra el campo de polo. En uno de los partidos de la gira, Southampton derrotó a Belgrano por 6-1. En ese partido, Arturo Forrester consiguió el primer gol argentino frente a un equipo extranjero. Sus compañeros lo llevaron en andas y en el bar brindaron por la hazaña antes de continuar el partido ante el asombro de los jugadores británicos. Arturo Forrester se constituyó en una figura popular de Buenos Aires.”<br />Dos años después de aquella tarde, Alumni se convertiría en el primer equipo argentino en ganar un encuentro internacional, al vencer por 1 a 0 a un equipo sudafricano con gol de Alfredo Brown, que se consagró definitivamente como ídolo de los aficionados.<br />Mientras Alumni ganaba todo, la inmigración europea, fundamentalmente de españoles, italianos, polacos y judios participaba activamente en la vida cultural y social de los barrios, jugando un rol decisivo en la aparición de gran cantidad de clubes y asociaciones civiles en los primeros años del siglo XX.<br />En los nuevos equipos, ya no sólo había ingleses y el nuevo deporte empezó a crecer en los barrios y las ciudades con una fuerza y una pasión que ya no se detendría jamás.<br /><br /><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9uagIWMYqONm5GApHW8I1I_IQQuvs6vs0dfYfI9IDrvy1EYlokHoJ8ZPAvuKmMsvEbrJEPX3E9MVf48Tm0-nLokmP-OuH6KHqKta3KzhPBtcpRpTks3fazD7aDLU2kHugQQOMtE62X3E/s1600-h/Alumni+1910.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 297px; height: 228px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9uagIWMYqONm5GApHW8I1I_IQQuvs6vs0dfYfI9IDrvy1EYlokHoJ8ZPAvuKmMsvEbrJEPX3E9MVf48Tm0-nLokmP-OuH6KHqKta3KzhPBtcpRpTks3fazD7aDLU2kHugQQOMtE62X3E/s200/Alumni+1910.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5377666492829320354" border="0" /></a><br /><span style="font-size:85%;"><br /><span style="font-weight: bold; color: rgb(0, 0, 153);"><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Alumni fue campeón amateur en los años</span><br /><span style="font-weight: bold; color: rgb(0, 0, 153);">1900/01/02/03/05/06/07/09/10/11</span></span><br /><span style="font-weight: bold;"><br /></span><span>Pablo Isi</span><span style="font-weight: bold;"><br /></span><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-78909889997469849912009-08-16T14:20:00.000-07:002009-08-16T14:28:01.055-07:00Milagros de 90 minutos (Nota Diario Clarín)Interesante nota de los grandes batacazos del Fútbol Mundial.<br />Waldemar Iglesias es su autor y fue publicada en Clarín el 15/07/09.<br /><h2><span style="font-size:100%;">"La historia de los Mundiales cobija episodios de los más diversos. Desde grandes campañas de los gigantes a inmensas sorpresas de los pequeños. Acá, un recorrido por el Top 5 de las victorias más asombrosas en las Copas del Mundo. Cuando los candidatos de todos quedaron de rodillas frente a rivales de antecedentes escasos." </span></h2><a href="http://www.clarin.com/diario/2009/07/16/um/m-01959069.htm">Leer la Nota Completa</a><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-69146020008659571532009-07-25T20:32:00.001-07:002009-08-13T04:23:40.900-07:0019 DE DICIEMBRE DE 1.971<div align="left">En la historia de los grandes clásicos del fútbol argentino, hay uno que se ha ganado en buena ley un espacio en letras de oro: es el que jugaron, el 19 de Diciembre de 1.971, Rosario Central y Newell's Old Boys de Rosario.<br /></div><div align="left">Central había ganado su grupo en el Torneo Nacional y debía enfrentar en semifinales, nada menos que a su clásico rival en partido a jugarse en cancha neutral. River Plate fue el escenario elegido.</div><div align="left">Con un inolvidable gol de palomita de Aldo Pedro Poy, los canallas ganaron el partido, y tres días más tarde con un recordado dos a uno ante San Lorenzo de Almagro, se consagrarían como el primer club "del interior del país" en obtener el título de campeón nacional de AFA.</div><div align="left">Aquella palomita de Poy, se ha transformado con el tiempo en un hito histórico para los hinchas del club, que cada diecinueve de diciembre se congregan para rememorar la jugada, recreando el centro y el cabezazo que el mismo Poy ejecuta año tras año.</div><div align="left">El inmortal Negro Fontanarrosa, fanático canalla, ha dejado entre sus obras maravillosas, este cuento titulado "19 de Diciembre de 1.971", que hoy subimos al blog para que los lectores amantes de la pasión del fútbol puedan disfrutar.</div><div align="center"></div><div align="center"></div><div align="center"><br /></div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhIbWooQIRgtrpJAtov4GNoAyzlvQ_hlWb-J_o1AREKnHJHXByJcXVkuSXA9lzRhi8HPNvAoA9PLRsfF4rZ1JOFUALuVk3wQ8FCPwKkIOQtYjBl469dvJmAx0oZzWP6UL2Q4Gfv3_-ut4dr/s1600-h/20060429-PalomaPoy.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5362599852736816770" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 320px; CURSOR: hand; HEIGHT: 206px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhIbWooQIRgtrpJAtov4GNoAyzlvQ_hlWb-J_o1AREKnHJHXByJcXVkuSXA9lzRhi8HPNvAoA9PLRsfF4rZ1JOFUALuVk3wQ8FCPwKkIOQtYjBl469dvJmAx0oZzWP6UL2Q4Gfv3_-ut4dr/s320/20060429-PalomaPoy.jpg" border="0" /> <p align="center"></a><strong><span style="font-size:85%;color:#330033;">Ángel Pedro Poy en su momento más glorioso. La palomita que le da a Central su pasaporte a la final del Nacional '71.<br /></p></span></strong><p align="justify"><br /><strong>19 DE DICIEMBRE DE 1.971</strong><br /><strong><em>(</em></strong><strong><em>Cuento del Negro Fontanarrosa)</em></strong><br /><br />Yo sé que ahora hay muchos que dicen que fuimos unos hijos de puta por lo que le hicimos al viejo Casale. Yo sé, nunca falta gente así, pero ahora es fácil decirlo, ahora es fácil. Había que estar esos días en Rosario para entender el fato mi viejo. Ahora es fácil hablar al pedo, ahora habla cualquiera.<br />Yo no sé si vos te acordás lo que era Rosario esos días anteriores al partido. Y te digo esos días, desde semanas antes se venía hablando del partido, la ciudad era una caldera. Porque eso era lo que era la ciudad: una caldera. Claro, los que ahora hablan son estos turros, que después vos los veías por la calle gritando y saltando como unos desgraciados, festejando, en pedo, a los gritos y después, ahora te salen con que son…..¿que son? moralistas…… De que se la tiran, hijos de mil putas. Ahora son todos piolas, es muy fácil hablar, pero si vos vieras lo que era la ciudad en esos días hermano. Prendías un fósforo y volaba todo a la mierda. No se hablaba de otra cosa, en los boliches, en la calle, en cualquier parte, saltaban chispas, pero te lo juro. </p><p align="justify">Y la cosa arrancó con el fato de las cábalas, ó mejor dicho, de los maleficios. Hay que entender que no era un partido cualquiera hermano, era una final, final. Porque no era un final, final, era una semifinal. El que ganaba después venía a jugar a Rosario, y le ganaba a cualquiera, fuera Central como Newels. Acá le hacia la fiesta a cualquiera.Y cómo estaban los lepra! Ellos tendrían que acordarse ahora, los que hablan al reverendo pedo y nos vienen a romper las pelotas con el asunto del viejo Casale. No se acuerdan esos turros cómo estaban los lepra, no se acuerdan ahora! Había que aguantarlos, porque se corrían una fija! Pero una fija se corrían hermanito! Que hasta creo que se pensaban que nos iban a llenar la canasta. No que sólo se pensaban que nos iban a hacer la colita, sino que además nos iban a meter cinco en el monumental y para la televisión Pero porque no se van a la puta madre que los parió! Que mierda nos van a hacer cinco goles estos culo roto!</p><p align="justify">La verdad hermano, con una mano en el corazón, tenían un equipazo! Un equipazo de padre y señor mío! Hay que reconocerlo! Jugaban y daba gusto, buen toque, te abrochaban bien abrochadito. Marito Zanabria, el Mono Oberti. Dios querido, el Mono Oberti, qué jugador! Silva, el que era de Lanus, el albañil, Montes de cinco, Santamaría, el cucurucho. Qué se yo, era un equipazo! Un equipazo, hay que reconocerlo. Y la lepra se corría una fija. Sabés cuántos había en la ruta el día del partido. Yo no sé. Eran miles, millones. Yo no sé de dónde habían salido tantos leprosos. Si son cuatro gatos locos! Y de golpe para ese partido aparecieron como hormigas, de abajo de la tierra, esos desgraciados. Todos fueron!</p><p align="justify">Lo que era esa ruta, papito querido! Entonces oíme. Había que recurrir a cualquier cosa! Hay partidos que no podes perder, tenés que ganar o ganar! No hay tutía! Entonces si a mí me decían que tenía que matar a mi vieja, que tenía que hacer cagar a Kenedy, me daba lo mismo hermano! Hay partidos que no se pueden perder! Y qué! Te vas a dejar basurear por estos soretes! Para que después te refrieguen y te pongan la bandera por la jeta toda la vida! No mi viejo. Entonces hay que recurrir a cualquier cosa. Es como cuando tenés un pariente enfermo viste. Tu vieja por ejemplo. Que por ahí sos capas hasta de ir a la iglesia viste.Y te digo yo, esa vez no fui a la iglesia. No fui a la iglesia porque te juro que no se me ocurrió, mirá vos que si nó te aseguro que me confesaba. Y todo si servía para algo. Pero con los muchachos nos enganchamos con la cuestión de la brujería, de la ruda macho, de enterrar un sapo detrás del arco de Fenoy, de tirar sal en la puerta de los jugadores de Newels. Y de todas esas cosas de que siempre se habla. Por supuesto que todas las brujas del barrio ya estaban laburando en la cosa y había muñecos con la camiseta de Newels clavados con alfileres, maldiciones pedidas por teléfono y hasta mi vieja, que no manya nada de todo esto, tenía un pañuelo atado desde hacía como diez días, de esos de Pilato, Pilato, sino gana Central en River no te desato. Después la vieja decía que habíamos ganado por ella. Pobre vieja, si hubiera sabido lo del viejo Casale. Pero yo le decía que sí, para no desilusionarla a la pobre vieja. Pero todo el fato de la ruda macho y el sapo de atrás del arco eran que sé yo, cosas muy generales. Ya había tipos que lo estaban haciendo y además el partido era en el Monumental. Y no te vas a meter en la pista olímpica a enterrar un sapo porque vas en cana con 30 cadenas, y no te saca ni Dios después hermanito.</p><p align="justify">Entonces me acuerdo que empezamos con la cosa de las cábalas personales. Porque me acuerdo que estábamos en el boliche de Pedro y veníamos hablando de eso, y veníamos y veníamos. Entonces por ejemplo resolvimos que a Buenos Aires íbamos a ir en el auto del Dani, porque era el auto con el que habíamos ido una vez a La Plata, en un partido contra Estudiantes y que habíamos ganado dos a cero.Yo iba a llevar por supuesto el gorrito, que venía llevando a la cancha todos los últimos partidos, y no me había fallado nunca el gorrito ese. A ese lo iba a llevar. Era un gorrito milagroso. El Cuqui iba a ir con el reloj cambiado de lugar, o sea en la muñeca derecha, no en la izquierda, porque en un partido contra no sé quien, se lo había cambiado en el medio tiempo, porque íbamos perdiendo, y con eso empatamos. O sea todo el mundo repasó todas las cábalas posibles, como para ir bien de bien, no dejar ningún detalle suelto. Te digo más, estuvimos como media hora discutiendo cómo mierda estábamos parados en la tribuna en el partido contra Atlanta, para pararnos de la misma manera, en el partido contra la lepra. El boludo de Michi decía que él había estado detrás del Valija, y el Miguelito porfiaba que era él, el que había estado detrás del Valija. Mirá vos, hasta eso estudiamos antes del partido. Para que veas cómo venía la mano en esos días. Sabés que te lleva eso, hermano, sabes que te lleva a eso: el cagazo. El cagazo hermano, te lleva a hacer cualquier cosa. Como lo que hicimos con el viejo Casale. Porque si llegábamos a perder, mamita querida. Nos teníamos que ir de la ciudad, mi viejo. Nos teníamos que refugiar en el extranjero, te juro. No podíamos volver nunca más acá. Íbamos a parecer esos refugiados Camboyanos, que se tomaron el piro en una balsa. Bueno te juro que si perdíamos, agarrábamos el Ciudad de Rosario y por acá por el Paraná, nos teníamos que ir todos, millones de canallas, no sé, a Diamante, a Perú, a Cuzco, a la concha de su madre. Pero acá no se iba a poder vivir nunca más con la cargada de los leprosos putos mi viejo! Ya el Miguelito había dicho bien claro que él se la daba, que sí perdíamos, agarraba un bufo y se volaba la sabiola, y te digo que el Miguelito es capaz de eso y mucho más, porque es loco. Así que yo le creía. O hacerse trolo! Y a otra cosa Mariposa. Darle a las plumas, y salir vestido de loca por Pellegrini, y no volver nunca más a la casa, pero te digo, nadie quería ni siquiera oír hablar de esa posibilidad.</p><p align="justify">Ni se nombraba la palabra derrota. Era como cuando se habla del cáncer hermano. Vos ves que por ahí te dicen la papa, ó tiene otra cosa, algo malo, pero el cangrejo mi viejo, no te lo nombra nadie! Y ahí fue cuando sale a relucir lo del Viejo Casale. Era el viejo del Cabezón Casale, un pibe que siempre venía al boliche, y que durante años vino a la cancha con nosotros. Pero que ya para ese entonces, se había ido a vivir al norte, a Salta creo. Lo vi hace poco por acá, que estaba de paso. Y ahí fue que nos acordamos que en la casa del cabezón, el viejo había dicho que el nunca pero nunca lo había visto perder a Central contra Newels. Me acuerdo que nos había impresionado porque ese tipo era un privilegiado del destino. Aunque al principio, vos te preguntás, cómo carajo hizo este tipo para no verlo perder nunca a Central contra Newels. Que mierda hizo! Este coso no va nunca a la cancha! Porque oíme, alguna vez lo tuviste que ver perder. A menos que no vayas a los clásicos. Y ojo que yo conozco muchos así. Que se borran bien borrados de los clásicos. O que van en arroyito, pero que a la cancha del Parque no van en la Puta vida.Y me acuerdo que le preguntamos eso al viejo. Y el viejo nos dijo que no. Y nos explicó que él iba siempre, un fana de Central que ni te cuento. Pero se había dado, qué se yo, una serie de cosas, de casualidades que hicieron que en un montón de partidos con Newels, él no pudiera ir por un montón de causas que ni me acuerdo, ni se acuerda él. Que estaba de viaje por Misiones, el viejo era comisionista. Que ese día se había torcido un tobillo y no podía caminar. Que estaba engripado. Otra vez le dolía un huevo. Que se yo. La verdad hermano, la posta era que al viejo nunca le había tocado ver un partido en que la lepra nos había ganado. Era un privilegiado el viejo! Y además un talismán. Porque así como hay tipos mufas que te hacen perder partidos adonde vayan, hay otros que si vos los llevás, es número puesto, tu equipo gana. No es joda! Y el viejo Casale era uno de éstos. De los ojetudos.</p><p align="justify">Entonces ahí nos dijimos: este viejo tiene que estar en el monumental contra Newels, no puede ser de otra forma, tiene que estar. Claro, dijimos, seguro que va a estar. Si es fana de Central, canalla a muerte. Pero nos agarro como la duda viste. Porque nosotros no era que lo veíamos todos los días al viejo. Te digo más, desde que el Cabezón se había ido al norte a laburar, al viejo de él no lo habíamos vuelto a ver en la cancha. Ni en la calle, ni en ninguna parte. Además el viejo ya estaba bastante veterano, porque debía tener como ochenta pirulos por ese entonces. Bah, en realidad ochenta no, pero sus 60, 75 los tenía por debajo de las patas.Entonces, con el Valija, el Colorado y el Miguelito, decimos, vamos a la casa del viejo a asegurarnos que vaya y si no lo llevamos atado. Porque también podía ser que el viejo no fuera porque no tuviera guita, que se yo, nosotros no sabíamos. Ya habíamos pensado en hacer una rifa a beneficio, o una kermés, cualquier cosa, el viejo tenía que ir, era una bandera, un cheque al portador. La cuestión es que vamos a la casa, y a que no sabés con la que nos sale el viejo. Que andaba mal del bobo, que el médico le había prohibido terminantemente ir a la cancha. Nos sale con eso. Que no, que había tenido un infarto, en no sé que partido, un partido de mierda, después de una pelota que pegó en el palo. Que había estado muerto como media hora. Que lo habían salvado entre los indios con respiración artificial y masajes en el cuore. Y que no había clavado las guampas de puro pedo y que le había quedado tal cagazo que no había vuelto a ir a una cancha desde hacía ya, mirá no se lo que te digo, dos años, dos años y medio. Y no era sólo que el no quería ir sino que el médico y por supuesto la familia le tenían terminantemente prohibido ir, lógicamente. No sé si no le prohibían incluso escuchar los partidos por radio, para que no le pateara el bobo. Porque parece que el viejo escuchaba cualquier cosa demasiado fuerte y se moría. Tan jodido andaba! Vos le hacías Uuuuuhhh! en la cara y el viejo partía. Para que! Te imaginas nosotros, la desesperación! Porque eso era como un presagio, un anuncio del infierno hermano! Era un anuncio de que nos iban a hacer cagar en Buenos Aires. Entonces empezamos a tratar de hacerle la croqueta al viejo. A convencerlo, a decirle: pero mire don Casale, usted tiene que estar, es una cita de honor. Que va a estar mal del cuore usted! Si se lo ve cero kilómetro! Vamos Casale!Me acuerdo que lo jodía Miguelito y le decía: “cuantos polvos se echa por día?” “usted está echo un toro”. Pero el viejo ni mierda, en la suya, que no y que no. Le decíamos que el partido iba a ser una joda, que Newels tenía un equipo de mierda, y que ya a los 15 minutos íbamos a estar 3 a 0 arriba, y que el partido era una mera formalidad. Que el gobierno ya había decidido que tenía que ganar Central, para hacer feliz a mayor cantidad de gente. No sé la cantidad de boludeces que le dijimos al viejo para convencerlo. Pero el viejo nada! Una piedra el hijo de puta. </p><p align="justify">Para colmo ya habían empezado a rondar la mujer del viejo, la madre del Cabezón, una hermana del Cabezón, que querían saber qué queríamos decirle nosotros al viejo en esa reunión. Porque medio que ya se sospechaban que nosotros no íbamos para nada bueno. En resumen, que el viejo nos dijo que no. Que ni loco! Que ni siquiera sabia si iba poder resistir la tensión de saber que se jugaba el partido, aún sin escucharlo! Porque el viejo, los diarios los leía, tan boludo no era! Sabía cómo venía la mano, como era la cosa, como formaban los equipos, suplentes, historial, antecedentes, chaquetillas, color, todo. Nos dijo: ese día bien temprano, antes de que empiecen a pasar los camiones y los onmibus con la gente yendo para Buenos Aires, yo me voy a la quinta de un hermano mío, que vive en Villa Diego. No quería ni escuchar los bocinazos el viejo!“Me voy tempranito a lo de mi hermano, que a él no le importa nada el fútbol, y ahí paso el día, sin escuchar radio ni nada.” Porque el viejo decía, y tenía razón, que si se quedaba en la casa, por más que se encerrara en un ropero, algo iba a oír, algún grito, algún gol, alguna cosa iba a oír. Pobre desgraciado! Y se iba a quedar ahí mismo seco en el lugar. Así que se iba a ir a radicar a la quinta de ese hermano que tenía para borrarse del asunto. Muy bien.</p><p align="justify">Te digo que salimos de allí, hechos bosta! Porque veíamos que la cosa venía muy mal. Casi ya era un dato seguro, como para seguir, que éramos boleta. Para como al Valija, el día anterior, le había caído una tía del campo. Y el se acordaba que en un partido que perdimos contra San Lorenzo, esa misma tía le había venido el día antes. Era un presagio funesto el de la tía. Fue cuando decidimos lo del secuestro. Si no te asustes, decidimos lo del secuestro. Nos fuimos al boliche y esa noche lo charlamos seriamente. El Dani decía que no, que era una barbaridad. Que el viejo se nos iba a morir en el viaje o en la cancha. Y que después se iba a armar un quilombo. Que íbamos a terminar todos en cana. Y que además eso era casi un asesinato. Pero al Dani mucha bola no le dimos, porque siempre ha sido un exagerado. Y más que un exagerado, medio cagón, el Dani. Pero nosotros estábamos bien decididos. Y más que nada, por una cosa que dijo el Valija. El viejo estaba diez puntos, había tenido un infarto, tenés razón. Pero hay miles de tipos que han tenido un infarto, y vos lo ves caminando tranquilamente por la yeca y sin hacer tanto quilombo como este viejo pelotudo, con eso de meterse dentro de un ropero ó no ir a la cancha. O dejar que te rigoree la familia, como la esposa, y la otra, la hermana del cabezón. Por otra parte, y vos lo sabés, los médicos son unos turros, que se ve que lo querían hacer durar al viejo como mil años para sacarle la guita, hacerle experimentos y chuparle la sangre. Y además como decía el Miguelito, y eso era cierto, vos lo veías al viejo, y estaba fenómeno. Con casi sesenta años, no te digo que parecía un pendejo, pero andaba lo más bien. Caminaba, hablaba, se sentaba, se movía, que se yo, chupaba... porque a nosotros nos convidó con Cinzano, y el viejo se mandó su medidita. No te digo un vazaso, pero su medidita se mandó. La cosa que el Miguelito elaboró una teoría que te digo aún hoy, no me parece descabellada. El viejo era un turro hermano, un turro que especulaba con el fato del bobo, para pasarla bien. Y no laburarla nunca más en la vida de dios. Con el verso del bobo no ponía el lomo, lo atendían a cuerpo de rey. La tenía a la vieja y a la hermana del Cabezón pendientes de él viviendo como un bacan el viejo. Y de qué se privaba? De algún faso. Que no sé si no fasearía a escondidas. Y de no ir a la cancha. Fijate vos eso era todo. Y vivía como Carolina de Mónaco, el otario.</p><p align="justify">Bueno, con ese argumento y con lo que dijo el colorado, se resolvió todo. El colorado vino y habló clarito. Nos habló de los grandes ideales. De nuestra misión frente a la sociedad. De nuestro deber frente a las generaciones posteriores, los pendejos. Nos dijo que si ese partido se perdía, miles y miles de pendejos iban a sufrir las consecuencias. Que para nosotros eso era verdad. Iba a ser muy duro, pero que nosotros ya estábamos jugados. Que habíamos tenido lo nuestro. Y que de última teníamos experiencia en malos ratos y en fulerías. Pero los pibes, los pendejitos de Central iban a tener de por vida una marca, que los iba a marcar para siempre como un fierro caliente. Las cargadas que iban a recibir esos pibes, esas criaturas, en la escuela! Los iban a destrozar. Les iban a pudrir el bocho para siempre. Iban a ser una ó dos generaciones de tipos hechos bolsa. Disminuidos ante los leprosos. Temerosos de salir a la calle, de mostrarse en público. Y eso es verdad hermano. Porque yo me acuerdo lo que eran las cargadas en la escuela primaria, sobre todo. Yo me acuerdo cuando perdimos cinco a tres con la lepra en el parque, después de ir ganando dos a cero, cuando se vendió el colorado Bertoldi. Que todavía se estará gastando la guita. Y te juro que yo por una semana no me pude levantar de la cama, porque no me atrevía a ir a la escuela. Para no bancarme la cargada de la lepra. Los pibes son muy hijos de puta para la cargada, son crueles. No viste como descuartizaban bichos. Que agarran una langosta y le sacan todas las patas. Son hijos de puta los pibes en ese sentido. Lo que decía el colorado era verdad. Ahora todo el mundo habla de la deuda externa, y bueno hermano, eso era algo así como lo de la deuda externa. Que por la cagada de cuatro reverendo hijos de puta que empeñaron el país, la tenemos que pagar todos. Y los hijos y los hijos de nuestros hijos. Y si estaba en nosotros hacer algo para que eso no pasara, había que hacerlo, mi querido. Además como decía el colorado, ya no era el problema de la cargada de los pendejos newelistas. Estaba también el fato del exitismo. Los pibes ven que gana un equipo, y se hacen hinchas de ese equipo. Son así, son hinchas del campeón. Entonces, ponele que hubiese ganado Newels, y a la mierda! De ahí en más todos los pibes se hacían de Newels, ponéle la firma. Y no te vale de nada llevarlos a la cancha, converzarlos, hablarle del Gitano Juárez, del flaco Menotti, ni comprarle la camiseta de Central apenas nacen. No te vale de nada. Los pendejos ven que River sale campeón y se hacen de River. Son así. Y en ese momento no era como ahora, que mal que mal, vos los llevás al gigante y los pibes se caen de culo. Entonces cuando van al chiquero del parque, por mejor equipo que pueda tener Newels, los pibes piensan: ¡yo no puedo ser hincha de esta villa miseria! Y se hacen de Central. Porque todo entra por los ojos, y vos ves que ahora, los pibes por ahí ni siquiera han visto jugar a Central ó a Newels, y ya se hacen hinchas de Central por el estadio. Es otra época. Los pendejos son más materialistas. Yo no sé si es la televisión ó que, pero la cosa es que se van de boca con los edificios. </p><p align="justify">Entonces la cosa estaba clara. Había que secuestrar al viejo Casale. Y si no aguantarse que quince ó veinte años después, hoy por ejemplo, la ciudad estuviese llena de leprosos, nacidos después de ese partido. Y esto hoy sabés lo que sería. Beirut sería un poroto al lado de esto, te lo juro hermano. El que organizó la “operación Eichmann”, como la llamamos, fue el colorado. La llamamos así porque, ese general alemán, torturador, que se chorearon de acá una vez los judíos viste. Y lo nuestro era más ó menos lo mismo. El colorado era un tipo muy cerebral, le carbura bien el bocho, y el organizó todo. El colorado para ese entonces ya no estaba en la OCAL. La OCAL no sé si sabés, es una organización de acá de Rosario, que se llama así porque son iniciales, es Organización Canalla Anti Lepra. Son un grupo de ñatos como el Klux Klux Klan, mas o menos. Que tienen reuniones secretas y no sé si no van con capucha y todo a las reuniones. O si queman algún leproso vivo en cada reunión. Mirá yo no sé si es requisito indispensable ser hincha de Central, pero seguro, seguro tenés que odiar a la lepra. Tenés que odiar más a los lepra, que lo que querés a Central. Hacen reuniones, escriben el libro de actas. Piensan maldades contra los lepra. Festejan fechas patria de partidos que le hemos ganado, tienen himnos. Son como esos tipos, los masones, esos que nadie sabe quienes son. Andan con antorchas. Bueno de la OCAL, al colorado lo echaron por fanático, con eso te digo todo. Pero es un bocho el colores. Y el fue el que organizó todo el operativo. Y te la cuento porque es linda. No sé si un día de estos no aparece en el Selecciones. </p><p align="justify">Averiguamos que ómnibus iba para Villa Diego, adonde tenia la quinta el hermano del viejo Casale. Desde donde vivía el viejo, ahí por San Juan al 1400, lo único que lo dejaba, por ese entonces si mal no recuerdo, era el 305 que pasaba por la calle San Luis. O sea que el viejo tenía que tomarlo en San Luis y Paraguay ó San Luis y Corrientes. No más allá de eso. A menos que fuera un pelotudo y lo fuera a tomar a Bulevar Oroño, que no sé para que mierda iba a hacer eso. Ahora la duda era si el viejo se iba a ir en ómnibus ó en auto. Porque si se iba en auto nos recagaba. Pero nos jugábamos a que iba a ser en ómnibus. Porque auto no tenía. Y seguro que el hermano tampoco tenía, porque debía ser un muerto de hambre cómo el seguramente. Y te digo que la cosa venía perfecta, porque el viejo nos había dicho que iba a salir bien tempranito, para no infartarse con las bocinas. O sea que nosotros podíamos combinarlo con el horario de salida nuestro para el partido. Porque también nos cagaba si salía a la una de la tarde para Villa Diego, porque después como llegamos nosotros a Buenos Aires, para la hora del partido, con el quilombo que era la ruta, y en un ómnibus de línea. Lo más probable es que nos hiciéramos pelota en el camino por ir a los pedos. Por otra parte, hermano, Villa Diego queda saliendo para Buenos Aires. O sea que la cosa estaba clavada, era posta posta. Después hubo que hablar con los otros muchachos, porque convencer al Rulo no nos costó nada, a él le daba lo mismo. Además le contamos los entretelones del asunto. Te digo que el colorado manejo la cosa como un capo, un maestro.El asunto era así. El Rulo, es un amigo fana de Central, que tiene un par de ómnibus, está muy bien el Rulo. Y en esa época tenía un par de coches de la 305. Tuvimos un ojete así de grande. Porque sino teníamos que conseguir otro coche, cambiarle el color, pintarlo, que se yo, ponerle el número, un laburo bárbaro. Pero el Rulo tenía dos 305. Y con uno de esos ya tenía pensado pirarse para el monumental el día del partido. Y más bien que se llevaba como novecientos o mil monos que iban para allá. Lo sacaba de servicio y que se fueran todos a la reputísima madre que los pario. No iba a perderse el partido ese. Entonces el Rulo, con los monos arriba y nosotros, tenía que estar con el ómnibus preparado, el motor en marcha por España estacionadito. Y el Miguelito se ponía de guardia, tomando un café, justo en el boliche de ahí cerquita. Desde donde veía la puerta de la casa del viejo Casale. Creo que a las cinco de la matina ya estaba el Miguelito apostado en el boliche, haciéndose el boludo, junando para la casa del viejo. Te juro que ni los Tupamaros hubieran hecho un operativo como este, hermano. Fue una maravilla. Apenas vio que salía el viejo, con una canastita, donde seguro se llevaba algún matambre casero, algo de eso el pobre viejo. El Miguelito casó una Vespa, que tenía en ese entonces. Dio vuelta la manzana, y nos avisó. Cargó la moto en el ómnibus, en la parte de atrás, detrás de los últimos asientos y nos pusimos en marcha.Ya les habíamos dicho a tres ó cuatro pibes, de estos quilomberos de la barra, que se hicieran bien los sota. Que no dijeran ni media palabra y se hicieran los que apoliyaban. Nosotros también, para que no nos reconociera el viejo, estábamos en los asientos traseros, haciéndonos los dormidos, incluso con la cara tapada con algún pulóver, como si nos jodiera la luz, ó con algún piloto.Te digo que aquél día había amanecido frío y lluvioso, como la otra fecha patria, el 25 de Mayo. Además el quilombo había sido guardar todas las banderas, las cornetas, las bolsas con papelitos, los termos, todo eso. Uno de los muchachos llevaba una bandera de la gran puta, que media cincuenta y dos metros loco. Media cuadra de bandera, que decía: “Empalme Graneros, presente”. Y tuvimos que meterla debajo de un asiento, para que el viejardo no la bichara. La cosa es que el viejo subió medio dormido. Se sentó en uno de los asientos de adelante. Que ya habíamos dejado libre a propósito, para que no viera mucho del ómnibus. Rulo le cobró boleto y todo. Nadie se hablaba, como si no nos conociéramos. Y como el ómnibus iba haciendo el recorrido normal, el viejo iba lo más piola, mirando por la ventanilla. La cuestión es que llegamos a Villa Diego y el viejo tranquilo. Cada tanto, cuando nos pasaba algún auto, con banderas en el techo, tocando bocina, el viejo miraba a los que tenía cerca y movía la cabeza, como diciendo “mirá vos”. Se ve que tenía ganas de hablar. Pero nadie quería darle mucha bola, para no pisarse en una de esas. Así que nos hacíamos todos los dormidos. Parecía que habían tirado un gas adentro de ese ómnibus, hermano. Como cuando se muere algún ñato, viste, que se queda a apoliyar en el auto, con el motor prendido, y lo hace cagar el monóxido de carbono, creo. Bueno, así, parecía que a nosotros nos había agarrado el monóxido de carbono. Pero cuando llegamos a Villa Diego, por ahí el viejo se levanta y le dice al Rulo: “En la esquina jefe”. Y yo no sé que le dijo el Rulo. Algo de que ahí no se podía parar, de que estaba cerrado el tránsito, de que había que seguir un poco más adelante. Y el viejo se la comió. Pero se quedó paradito al lado de la puerta. Al rato, de nuevo el viejo: “en la esquina”, le dijo. Ahí ya el Rulo nos miró, porque se le habían acabado los versos. Y ahí hermano, vos no sabés lo que fue! Fue como si nos hubiésemos puesto todos de acuerdo. Y te juro que ni siquiera lo habíamos hablado. Empezaron los muchachos a desplegar las banderas, a sacar las cornetas, y las banderas por las ventanas. Y a los gritos, hermano: “Soy canalla, soy canalla”, por las ventanas. Pero no para el lado del viejo. El pobre viejo, la cara que puso, mirá no te la puedo describir con palabras. Sino para afuera mirábamos, porque los grone, con lo quilomberos que son, se habían ido aguantando hasta ahí, sin gritar ni armar quilombo para no deschavarse con el viejo. Pero cuando llegó el momento, agarraron las banderas, empezaron a sacar los brazos, a golpear las chapas del costado del ómnibus. Y también el Rulo empezó a seguir el ritmo con la bocina.¿Viste esas películas de cowboy, cuando los chorros van a asaltar una carreta, donde parece que no hay nadie. O que la maneja nada más que un par de jovatos, y de golpe se abren los costados, y aparecen diecisiete mil soldados que los cagan a tiros? ¿Que levantan la lona, y estaban todos adentro, haciéndose los sotas? Bueno, ese ómnibus debió ser algo así. De golpe se transformó en un quilombo, un escándalo, una de gritos, bocinas, bocinazos, cornetas, una joda.¡Y la gente al lado de la ruta! Porque desde la madrugada ya había gente a los costados de la ruta, esperando que pasaran las caravanas de hinchas. Era para llorar. Eso era conmovedor. Te saludaban, gritaban, levantaban los puños. Por ahí algún lepra, a las perdidas, te tiraba un cascotazo.</p><p align="justify">Pero vuelvo al viejo. No sabés la caripela del viejo. Porque nosotros lo estábamos mirando porque decíamos, este es el momento crucial. Ahí el viejo, o cagaba la fruta, el corazón se le hacía bosta, ó salía adelante. El viejo miraba para atrás, a todos los monos que saltaban y gritaban. No lo podía creer. Se volvió a sentar y creo que hasta San Nicolás no volvió a articular ni una palabra. Te digo que el Rábano, el hijo de la Nancy, que ya se había ofrecido a hacerle respiración boca a boca, llegado el caso, que era algo a lo que todos, mal que mal, le habíamos esquivado el bulto, porque, que se yo, te da un poco de asco. Además con un viejo! Pero mirá te la hago corta. Cuando el viejo vio que no había arreglo, que no había posibilidad que lo dejáramos bajar del ómnibus, se entregó. Pero entregó, entregó, eh. Porque al principio nosotros nos acercamos y nos reputió. Nos dijo que éramos unos irresponsables, asesinos, que no teníamos conciencia, que era una vergüenza. Qué se yo todo lo que nos dijo. Pero después cuando nosotros le dijimos que él estaba perfecto. Que estaba hecho un toro. Que si se había bancado la sorpresa del ómnibus, quería decir que ese cuore se podía bancar cualquier cosa. Y empezó a tranquilizarse.El colorado llegó a decirle que todo era una maniobra nuestra, para demostrarle que él estaba perfectamente sano. Y que incluso, el médico estaba implicado en la cosa. Mirá hermano, y creéme porque es la pura verdad, que intención puedo tener en mentirte hoy por hoy. Mucho antes ya de entrar en Buenos Aires, ese viejo era el más feliz de los mortales. Te lo digo yo, y te lo juro por la salud de mis hijos. </p><p align="justify">El viejo cantaba, puteaba, chupaba mate, comía factura, gritaba por la ventana. Y a la cancha se bajó envuelto en una bandera! No había en la hinchada un tipo más feliz que él. Vino con nosotros a la popu. Se bancó toda la espera del partido, que fue más larga que la puta que lo parió. Y después se bancó el partido. Estaba verde, eso sí, y había momentos en que parecía que vos lo pinchabas con un alfiler y reventaba como un sapo, porque yo lo relojeaba a cada momento. Y después del gol del Aldo, yo lo busqué, lo busqué, porque fue tal el quilombo y el desparramo cuando el Aldo la mandó adentro que yo ni sé por dónde fuimos a caer entre las avalanchas y los abrazos y los desmayos y esas cosas. Pero después miré para el lado del viejo y lo ví abrazado a un grandote en musculosa casi trepado arriba del grandote, llorando. Y ahí me dije: si éste no se murió aquí, no se muere más. Es inmortal. Y después ni me acordé más del viejo, que lo que alambramos, lo que cortamos clavos, los fierros que cortamos con el upite, hermano, ni te la cuento. Eso no se puede relatar, hermano, porque rezábamos, nos dábamos vueltas, había gente que se sentaba entre todo ese quilombo porque no quería ni mirar. Porque nos cagaron a pelotazos, ya el segundo tiempo era una cosa que la tenían siempre ellos y ¿sabés qué era lo fulero, lo terrible? ¡Que si nos empataban nos ganaban, hermano, porque ésa es la justa! ¡Nos ganaban esos hijos de puta! ¡Nos empataban, íbamos a un suplementario y ahí nos iban a hacer refucilar el orto porque estaban más enteros y se venían como un malón los guachos! ¡Qué manera de alambrar! </p><p align="justify">Decí que ese día, Dios querido, yo no sé qué tenía el flaco Menotti que sacó cualquier cosa, sacó todo, vos no quieras creer lo que sacó ese día ese flaco enclenque que parecía que se rompia a pedazos en cada centro. Le sacó un cabezazo de pique al suelo a Silva que lo vimos todos adentro, hermano, que era para ir todos en procesión y besarle el culo al flaco ése ¡Qué pelota le sacó a Silva! Ahí nos infartamos todos, faltaban cinco minutos y si nos empataban, te repito, éramos boleta en el suplementario. Me acuerdo que miro para atrás y lo veo al viejo, blanco, pálido, con los ojos desencajados, pobrecito, pero vivo. Y ahora yo te digo, te digo y me gustaría que me contesten todos esos que ahora dicen que fue una hijaputez lo que hicimos con el viejo Casale ese día. Me gustaría que alguno de esos turritos me constestara si alguno de ellos lo vio como lo vi yo al viejo Casale cuando el referí dio por terminado el partido, hermano. Que alguno me diga si, de puta casualidad, lo vio al viejo Casale como lo vi yo cuando el referí dio por terminado el partido y la cancha era un infierno que no se puede describir en palabras. Te digo que me gustaría que alguien me diga si alguien lo vio como lo vi yo. ¡La cara de felicidad de ese viejo, hermano, la locura de alegría en la cara de ese viejo! ¡Que alguien me diga si lo vio llorar abrazado a todos como lo vi llorar yo a ese viejo, que te puedo asegurar que ese día fue para ese viejo el día el día más feliz de su vida, pero lejos lejos el día más feliz de su vida, porque te juro que la alegría que tenía ese viejo era algo impresionante! Y cuando lo vi caerse al suelo como fulminado por un rayo, porque quedó seco el pobre viejo, un poco que todos pensamos: “¡Qué importa!” ¡Qué más quería que morir así ese hombre! ¿Iba a seguir viviendo? ¿Para qué? ¿Para vivir dos o tres años rasposos más, así como estaba viviendo, adentro de un ropero, basureado por la esposa y toda la familia? ¡Más vale morirse así, hermano! Se murió saltando, feliz, abrazado a los muchachos, al aire libre, con la alegría de haberle roto el orto a la lepra por el resto de los siglos! ¡Así se tenía que morir, que hasta lo envidio, hermano, te juro, lo envidio! ¡Porque si uno pudiera elegir la manera de morir, yo elijo ésa, hermano! Yo elijo ésa. </p><p align="justify"></p><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-18835919676975910702009-07-21T10:03:00.000-07:002009-08-13T04:20:47.410-07:00Un debut que da pena.<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnhbcK9PdetlmUNZ2P64pUXZS3Yp1gvOrP9ThDO92MP1kYkhZ0YbPhXeSn_rE6iIE2YER_D8j4EFocbL-Fb1SHAASrfDlq77_FUB90p_aSFLD02olREq7jkDV1nG3KjNN6U4Q2k0WETxs/s1600-h/boliviadest.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5360965658713169842" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 208px; CURSOR: hand; HEIGHT: 177px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnhbcK9PdetlmUNZ2P64pUXZS3Yp1gvOrP9ThDO92MP1kYkhZ0YbPhXeSn_rE6iIE2YER_D8j4EFocbL-Fb1SHAASrfDlq77_FUB90p_aSFLD02olREq7jkDV1nG3KjNN6U4Q2k0WETxs/s320/boliviadest.jpg" border="0" /></a>El último fin de semana, a los treinta y nueve minutos del segundo tiempo del partido que disputaban La Paz y Aurora, por la Primera división del Torneo Boliviano de Fútbol, ingresó al campo de juego <strong>Mauricio Valdivieso, que con sus doce años de edad, se convirtió en el futbolista más joven de la historia del continente en jugar en la división mayor</strong>. Quien lo hizo ingresar fue Julio César Baldivieso, Director Técnico del Aurora y una de las mayores glorias del fútbol boliviano. Julio César Baldivieso es, además, el padre del chico.<br />A poco de ingresar, el nene sufrió una fuerte entrada al tobillo de un defensor rival, por la que quedó llorando en el campo de juego.<br />Para el pequeño atleta, la experiencia de jugar entre mayores no fue nueva, ya que a los <strong>diez años</strong> había jugado algunos minutos en la categoría mayor de la Liga de Cochabamba, divisional de ascenso del fútbol de ese país.<br />Al margen de las condiciones técnicas y atléticas del joven futbolista, el hecho reaviva un debate siempre latente en el ambiente del fútbol infantil: los chicos, los padres y los entrenadores recorren ese camino con muy diversas motivaciones, pero de todos ellos, sólo los niños son las potenciales víctimas.<br />Julio César Valdivieso es un hombre curtido en el fútbol; jugador de selección y de dilatada trayectoria en primera división, habrá visto en su hijo condiciones de estrella, aunque difícilmente pueda uno imaginar que el niño haya tenido alguna intervención en una decisión que evidentemente viene desde antes de la cuna.<br />Desde nuestra mirada occidental, hoy nos parecen bestiales las culturas en las que las familias eligen a los cónyuges de sus hijas e hijos y negocian entre si la conveniencia de los matrimonios como quien cuida una mercancía que puede garantizarles el futuro. Sin embargo, solemos ser más tolerantes con madres y padres que recorren los diferentes lugares donde sus hijos pueden ser más productivos: castings de publicidades, de programas de Cris Morena o de aspirantes a estrellas, en los que los pibes pasan horas y horas, días y días durante años, repitiendo las sonrisas y las muecas que mamá y papá le enseñaron desde chiquitos para convertirlos en los Marcelo Marcote o los Lorena Paola del siglo XXI.<br />Son muchos los casos en los que el éxito llega temprano, pero la felicidad de los mayores suele ser la infelicidad de los pibes, y el mundo está lleno de ejemplos en los que los triunfadores precoces terminan agobiados a tempranísimas edades por una vida que no eligieron.<br /><strong>Un nene de doce años es un nene de doce años</strong>, y quien fue alguna vez a alguna cancha de fútbol sabe que lo que se practica ahí adentro no es un juego. Las presiones suelen calar hondo hasta en los más veteranos deportistas, que deben convivir en un ambiente donde jugadores, dirigentes, representantes, medios periodísticos, entrenadores, barrabravas y demás actores, participan de una guerra cuyo botín es cada vez más suculento y cuyos métodos aumentan gradualmente su crueldad y falta de escrúpulos.<br /><strong>Pocas cosas hay más lindas en la vida que ver a pibes jugando</strong>. JUGAR, con la inocencia y la alegría que los chicos derrochan en cualquier lugar del mundo donde los grandes se lo permitan.<br />El fútbol infantil es todavía (aún con las presiones desmedidas que suele haber en algunos clubes) un reducto donde los pibes crecen jugando a la pelota entre amigos. No hay nada que pueda compararse a esa experiencia de compartir los años de crecimiento en un ambiente sano y solidario, como en muchos clubes de barrio aún es posible.<br />Los casos como el de Mauricio Baldivieso no hacen más que renovar el alerta que debemos tener quienes de cualquier manera estamos cerca del fútbol infantil:<br /><strong>SI LOS GRANDES QUEREMOS GLORIA, ESCALEMOS EL EVEREST, PERO DEJEMOS QUE LOS PIBES JUEGUEN, PORQUE EN EL JUGAR ESTÁ SU FELICIDAD.</strong><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-67890280959168475712009-07-05T21:49:00.000-07:002009-08-13T04:45:07.387-07:00TODO SOBRE LA GRIPE INFLUENZA A (H1-N1)<strong><span style="color:#000099;">En su edición del domingo, el Diario Crítica publicó un muy interesante "Manuel de la Gripe A", del que publicamos los párrafos más importantes.</span></strong><br /><strong><span style="color:#000099;"></span></strong><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Qué es la influenza o Gripe A?<br /></span></strong> Enfermedad de las vías respiratorias causada por un virus (H1N1) extremadamente contagioso, que además tiene el poder de mutar (cambiar). Afecta a todas las edades, y en mutaciones importantes del virus suele causar complicaciones graves e incluso la muerte, frecuentemente en niños y ancianos.<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Cómo se identifica la enfermedad?</span></strong><br /> Se manifiesta muy parecida a cualquier otra enfermedad de las vías respiratorias con síntomas comunes pero el microrganismo que causa la Influenza es diferente al que causa el resfriado o gripe común. Los signos para sospechar de la Gripe A son:<br />Fiebre mayor de 38° C<br />Tos frecuente e intensa<br />Dolor de cabeza<br />Falta de apetito<br />Congestionamiento nasal<br />Malestar general<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Cómo se contagia?</span></strong><br />La forma de transmisión es de persona a persona a través de las secreciones de nariz y boca (toser, estornudar, hablar, cantar) o por contacto directo (las manos, cuando el enfermo no se las lava, los besos). Es muy contagiosa (3-7 días una vez que inician los síntomas) y de mayor riesgo cuando ocurre en lugares cerrados (guarderías infantiles, escuelas, asilos de ancianos, albergues, entre otros).<br /><strong><span style="color:#000099;"><br />¿Cómo se diagnostica?</span></strong><br />El diagnóstico se realiza mediante la identificación del virus en secreciones de nariz o laringe (aislamiento viral) durante las primeras 24-72 horas de iniciada la enfermedad, o mediante el estudio de sangre para identificar anticuerpos.<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Pueden existir complicaciones?</span></strong><br />Sí, un cuadro de influenza no tratado adecuadamente o asociado a otra enfermedad no controlada puede generar complicaciones, principalmente respiratorias (otitis, sinusitis, rinitis, neumonía, bronconeumonía, laringitis obstructiva), cardíacas o incluso la muerte, esto se observa frecuentemente cuando ocurren grandes brotes o epidemias.<br /><strong><br /><span style="color:#000099;">¿Existe un tratamiento?</span></strong><br />La influenza es causada por un virus, para los cuales no existe tratamiento, sin embargo hay medicamentos que hacen la enfermedad más soportable, la acorta y disminuye los síntomas, siempre y cuando se administren durante las primeras 48 horas de la enfermedad. Los medicamentos son de uso delicado, sólo el médico está capacitado para determinar si deben administrase a un paciente, ya que no están exentos de efectos secundarios.<br /><strong><span style="color:#000099;"><br />MODOS DE PREVENCIÓN.<br /></span></strong><br />Mantenerse alejados de las personas que tengan infección respiratoria.<br />No saludar con un beso ni dar la mano.<br />No compartir alimentos, vasos o cubiertos.<br />Ventilar y permitir la entrada de sol en la casa, las oficinas y en todos los lugares cerrados.<br />Mantener limpias las cubiertas de cocina y baño, manijas y barandas, así como juguetes, teléfonos u objetos de uso común. En caso de presentar un cuadro de fiebre alta de manera repentina, tos, dolor de cabeza, muscular y de articulaciones, se deberá de acudir de inmediato a su médico o a su unidad de salud.<br />Abrigarse y evitar cambios bruscos de temperatura.<br />Comer frutas y verduras ricas en vitaminas A y C (zanahoria, naranja, mandarina, limón y kiwi).<br />Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón.<br />Limpiar las manos con alcohol.<br />No fumar en lugares cerrados ni cerca de niños, ancianos o enfermos.<br />Acudir al médico inmediatamente si se presentan los síntomas.<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Cuándo lavarse las manos?<br /></span>Antes de:</strong><br />Preparar o comer algún alimento.<br />Atender a un enfermo.<br />Tratar una herida.<br />Utilizar una computadora.<br /><br /><strong>Después de:</strong><br />Ir al baño.<br />Toser o estornudar.<br />Sonarse la nariz.<br />Visitar o atender a una persona enferma.<br />Usar el transporte público.<br />Estar en contacto con animales y sus desechos.<br />Tocar carne cruda (pescado, carne y pollo).<br />Manipular basura o pañales.<br />Tocar objetos no rigurosamente limpios como dinero, teléfono o llaves.<br /><br /><strong>Al llegar:</strong><br />Al trabajo.<br />A casa.<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">Una vez enfermo ¿Cuáles son las recomendaciones?</span></strong><br />Permanecer en su domicilio, evitar acudir a centros de trabajo, escuelas o lugares donde exista concentración de personas (teatros, cines, bares, colectivos, subtes, trenes, discotecas, fiestas, estadios de fútbol). Esto evitará que otros se infecten a través de usted.<br />Cúbrase boca y nariz con un pañuelo o barbijo al hablar, toser, estornudar.<br />Evite tocarse ojos, boca y nariz ya que el virus se disemina cuando una persona toca algún objeto contaminado y luego se toca los ojos, boca o nariz.<br /><strong>Evite el polvo, humo del tabaco y otras sustancias que pueden interferir con la respiración y que hace a los niños más propensos a enfermarse.<br /></strong>Utilizar barbijos, tirar el pañuelo desechable en una bolsa de plástico y estornudar sobre el ángulo interno del codo. Una vez transcurridas 24 horas sin ningún síntoma, se puede regresar a las labores habituales.<br /><br /><strong><span style="color:#000099;">¿Existe vacuna para este nuevo virus?</span></strong><br />NO . La vacuna para la influenza estacional NO protege para el nuevo virus de la Influenza.<div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-2911944108245900742009-06-16T05:17:00.000-07:002009-08-13T04:43:43.855-07:00FALCAO: O MAIS GRANDE DO FUTSAL.<strong>Alessandro Rosa Vieira, <em><span style="color:#009900;">"Falcao"</span></em> , nació el 8 de junio de 1977 en Sao Paulo, Brasil.</strong><br />Debutó en el Futsal profesional a los 17 añosen el Corinthians coronándose cmpeón con dicho club en 1.995.<br />Luego de pasar por varias instituciones, Falcao se incorporó al Malwee/Jaraguá en el año 2.003 obteniendo varios títulos y luego de un intento no muy exitoso de incursionar en el fútbol campo, retornó en el 2.005 a su club donde continúa jugando actualmente. Múltiple campeón estadual, nacional y sudamericano con sus equipos, Falcao es la máxima estrella del seleccionado brasileño con el que fue varias veces campeón de la Copa América y obtuvo el sucampeonato del Mundo en China 2004 y el ansiado Campeonato Mundial en Brasil 2.008, ganando por penales la final ente el poderoso seleccionado español.<br />Acá subimos algunos videos del crack del Futsal.<br /><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/FjQz5In70SY&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowScriptAccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/FjQz5In70SY&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1" type="application/x-shockwave-flash" allowfullscreen="true" allowscriptaccess="always" width="425" height="344"></embed></object><br /><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/WA2hlBJVVlE&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowScriptAccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/WA2hlBJVVlE&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1" type="application/x-shockwave-flash" allowfullscreen="true" allowscriptaccess="always" width="425" height="344"></embed></object><br /><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/ih9IdgmuBcU&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowScriptAccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/ih9IdgmuBcU&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1" type="application/x-shockwave-flash" allowfullscreen="true" allowscriptaccess="always" width="425" height="344"></embed></object><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/MEvkTz6I7sg&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowScriptAccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/MEvkTz6I7sg&color1=0xb1b1b1&color2=0xcfcfcf&feature=player_embedded&fs=1" type="application/x-shockwave-flash" allowfullscreen="true" allowscriptaccess="always" width="425" height="344"></embed></object><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-66255346354002075682009-06-05T07:44:00.000-07:002009-08-13T04:42:24.217-07:00A CAPPA Y ESPADA.<div align="justify">A contramarcha de los que miden el éxito sólo con números, encontramos ejemplos de grandes equipos que hicieron historia y que aún con estadísticas menos espectaculares, lograron instalarse como modelos a imitar.<br />Holanda del ’74 es uno de ellos. La revolución del Fútbol total de la Naranja Mecánica comenzó algunos años antes cuando el joven entrenador Rinus Michel se hizo cargo del Ajax de Holanda al borde del descenso. </div><br /><div align="justify"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9Olc88L3p6mEnJOt6gevQqOvt5cnXfJvmIvw7nscAgrr_l-hdzWktoq25H5eAImf174SBP56WzT0kVBYF0r557wV1Qiaaaucp4KK-pBjPWhXK7W7ouw5AgxvC5EXrFic43YIN1pWsrn2z/s1600-h/michels.jpg"><img style="MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 200px; FLOAT: left; HEIGHT: 165px; CURSOR: hand" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5343851561548586450" border="0" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9Olc88L3p6mEnJOt6gevQqOvt5cnXfJvmIvw7nscAgrr_l-hdzWktoq25H5eAImf174SBP56WzT0kVBYF0r557wV1Qiaaaucp4KK-pBjPWhXK7W7ouw5AgxvC5EXrFic43YIN1pWsrn2z/s320/michels.jpg" /></a>Su visión del fútbol, barría con los esquemas acartonados de defensores, volantes y delanteros; Michel pregonaba una dinámica permanente en la que todos participaban de un armónico juego de conjunto.<br />Además de algunos títulos nacionales, el Ajax ganó tres Copas de Europa consecutivas y fue la base de la selección holandesa que asombraría al mundo en el Mundial Alemania ’74.</div><div align="justify"></div><br /><div align="justify">Aquel equipo de Johan Cruyff, Neeskens, Kroll y Rep, entre otros, se convirtió en un auténtica leyenda de la historia del fútbol, y a pesar de haber perdido la final ante el local por dos goles a uno, quedó en la memoria colectiva como el gran equipo de la época.<br />Para los memoriosos y apasionados de este deporte, Uruguay del 50, Brasil del ’70 (campeón), Holanda del ’74 (subcampeón), están en los más altos escalones de la gloria deportiva, aún a pesar de que los naranjas no alcanzaron a ser campeones, repitiendo el subcampeonato en Argentina ’78.<br /></div><br /><div align="justify"></div><div align="justify">En nuestro país, y salvando las dimensiones de los logros, hubo un equipo que aún con un sólo título obtenido, grabó su nombre en letras de oro en la historia del fútbol argentino: HURACÁN del 73.<br />Bajo la batuta del flaco Menotti (que debutaba como DT), el Globito de Brindisi, Babington, Houseman, “Coco” Basile, Carrascosa, Larrosa y Avallay, entre otros, deleitó a propios y extraños con su juego exquisito de pelota al piso y bien jugada.<br />En la primera mitad del torneo, Huracán convirtió 46 goles en 16 partidos, con un impresionante promedio de casi tres tantos por encuentro. En la segunda rueda, las ausencias de los mejores jugadores del equipo por los compromisos con la selección nacional mermaron notoriamente aquella efectividad, pero lejos de caerse, el Globo mostró que no sólo de goles viven los campeones y conuna solidez defensiva que muy pocos recuerdan, mantuvo el liderazgo, con sólo 10 goles en contra en 16 partidos.<br /></div><br /><div align="justify">De aquel equipazo campeón, emergería la figura del Flaco César Menotti que cinco años después conduciría a la Argentina al primer campeonato mundial de su historia.<br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjI2xOpCH9Vp9RIDl0TxBdhyphenhyphenTWJKpltI0SJ0MV3x6V0oHaKu5eiZ7LgJZj7UyxHKGU5Giks0AoUED49lPTXlx43LkkglGFRtLqADN-OtqJA5XQ90gP9n-T1L375CHzg2rDxMA9LVpLCopkg/s1600-h/2-ARGENTINA-1978.jpg"><img style="MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 177px; FLOAT: left; HEIGHT: 293px; CURSOR: hand" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5343852333140662978" border="0" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjI2xOpCH9Vp9RIDl0TxBdhyphenhyphenTWJKpltI0SJ0MV3x6V0oHaKu5eiZ7LgJZj7UyxHKGU5Giks0AoUED49lPTXlx43LkkglGFRtLqADN-OtqJA5XQ90gP9n-T1L375CHzg2rDxMA9LVpLCopkg/s320/2-ARGENTINA-1978.jpg" /></a>Aquel Mundial, manchado en el recuerdo por la utilización que del mismo hizo la más sangrienta dictadura militar que haya sufrido la Argentina, mostró en la cancha a un verdadero equipazo de grandes jugadores, que se consagraron merecidamente como el mejor equipo del mundo.<br />Desde un amplio sector del periodismo, se da una curiosa paradoja: aquellos que hoy intentan disminuir el logro de aquel equipo, ligándolo a las necesidades políticas de la dictadura, son los mismos que miraron para otro lado cuando las violaciones a los derechos humanos, los asesinatos y las torturas eran cosa de todos los días. Los que en aquellos tiempos callaban ante los crímenes del poder, son los que hoy más rápido levantan los dedos acusadores y descalificadores de un éxito deportivo que no puede negarse.<br /></div><br /><div align="justify">En aquel año 78, un casi desconocido futbolista de Bahía Blanca se retiraba de la práctica activa del fútbol y exiliado en España, se sumergía en sus estudios de filosofía y psicopedagogía, aunque pocos años más tarde se recibiría de lo que sería finalmente su profesión definitiva: la de entrenador de fútbol. Era Ángel Cappa.<br />Luego de ser colaborador de Menotti en la Selección Argentina que jugó el Mundial 82 y en el Barcelona de España, acompañó a Jorge Valdano en el Tenerife, al que luego de salvar del descenso, clasificaron por primera vez en la historia para una Copa de la UEFA.<br /></div><br /><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTL2f4jAltk9mKhyjdTgMlnqT6aylW0BIEkdhujjoPL1JvrVokfb5dDt3v-6a5Y6K6W3cVEadjQRIcOmzRVPiHPE-QNy-LwDmskqBADQvu1IE00xTDnJ3gN1rDNzop73ax6yGq_hRz35RC/s1600-h/i00002479-08.jpg"><img style="MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 205px; FLOAT: left; HEIGHT: 281px; CURSOR: hand" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5343852847286446290" border="0" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTL2f4jAltk9mKhyjdTgMlnqT6aylW0BIEkdhujjoPL1JvrVokfb5dDt3v-6a5Y6K6W3cVEadjQRIcOmzRVPiHPE-QNy-LwDmskqBADQvu1IE00xTDnJ3gN1rDNzop73ax6yGq_hRz35RC/s320/i00002479-08.jpg" /></a> <div align="justify">Cappa inició su carrera como DT defendiendo siempre la idea futbolística que “El César” pregonó durante años y después de variadas experiencias en el fútbol argentino, español, mexicano, peruano y sudafricano, fue convocado en el 2008 por el presidente de Huracán Carlos Babington (uno de las figuras de aquel campeón del ’73) para hacerse cargo de un equipo que se debatía en los últimos puestos de la tabla.<br />Hoy Huracán está peleando un campeonato que lo tiene como protagonista, y a sólo tres fechas del final del torneo está a escasos dos puntos del puntero Vélez, a quien deberá enfrentar en la última jornada.<br />Ángel Cappa se proclama heredero del fútbol sin misterios, del jugador y su talento por encima de la táctica, a la que no niega, pero tampoco idolatra.<br />-Este Huracán es un proyecto – dice - una ilusión.<br /><br />Para conocer más el pensamiento y las banderas que levanta el Técnico del equipo sensación de este Clausura 2009, transcribimos algunos párrafos de la nota que le realizó Diego Morini para La Nación.<br /><br />“Yo soy un alumno aplicado de Menotti. Hay un estilo de fútbol de siempre que lo interrumpió el Estudiantes de Zubeldía, que impuso otra forma de jugar al fútbol. Ahí se generaron dos corrientes. Hasta ese momento había un solo estilo. En los ’30 con Sastre, De la Mata y Erico. En los ’40 con Moreno, Pedernera, Pipo Rossi. En los ’50 con Micheli, Cecconato, Lacasia y Crúz. En los 70 con Huracán de Houseman, Babington y Brindisi. Ese es el estilo del fútbol argentino, al que Menotti le puso el nombre, nada más.”<br />“Cada uno tiene su forma y todos pregonamos ganar. No hay románticos y prácticos, eso sí que es una estupidez.”<br /></div><br /><div align="justify">“En todo el mundo nadie quiere quedar descolocado, estar desactualizado. Es como si existiese un tipo que impone modas y que desde un sótano saca papelitos que dice ‘ahora jugamos con dos volantes de contención’, y al rato larga otro papelito que dice ‘los enganches no existen más’. Pero, ¿Quien es ese tipo que impone eso? Es José Miedo. Cada vez empiezan a protegerse más porque el entrenador, salvo en Inglaterra, es un trabajador provisional. Entonces el tipo se quiere proteger para durar hasta el próximo domingo.”<br /></div><br /><div align="justify">“Hay miedo a perder, a arriesgar, pero también hay ilusiones, ganas de ganar, alegrías... Si te quedás sólo con el miedo a perder sos un torturado.”<br /></div><br /><div align="justify">“Quiero ganar como todos. Que me uno se ponga nervioso en los partidos no quiere decir que nos disfrute. Un actor también de pone nervioso, pero disfruta de lo que hace. Lo que pasa que la gente entiende por disfrutar un tipo que se ríe todo el tiempo y ese es un idiota, no un tipo que disfruta.”</div><br />Para terminar, dejamos un párrafo que no es de la nota mencionada, pero que deja claro qué entiende Cappa cuando habla de <strong>"un estilo de fútbol</strong>":<br /><br /><div align="justify"><strong>“Decía un entrenador inglés, que ahora no recuerdo el nombre, que el fútbol no es una cuestión de vida o muerte. Es algo mucho más importante. Y es cierto, porque el fútbol le permitía y le sigue permitiendo a un tipo de un barrio tener algo que a los pobres le arrebataban desde la cuna: el orgullo. Es decir, yo a partir de una pelota de fútbol soy alguien, en el sentido profundo. Me gano así el respeto mío y el de la gente. En el barrio, el tipo más respetado era el que mejor jugaba al fútbol (por supuesto que no es un planteamiento racional, es un sentimiento compartido por todos). ¿Qué otros medios tiene para que lo reconozcan y el mismo reconocerse? ¿Qué otros valores culturales le quedan en el barrio para tener una identidad? ¡la pelota!El fútbol te enseña a ser valiente, a superar el miedo a perder, el miedo a meter la pierna, a pedir la pelota. Te enseña también a mantener el equilibrio entre el éxito y el fracaso, porque vos sabes que estas caminando sobre una cornisa y que el fracaso y el éxito dependen de tonterías, a veces. Entonces uno se vuelve prudente. En el fondo uno sabe que tuvo éxito ese partido pero también que pudo haber perdido, porque pegó una pelota en el poste, o resulta que le pegó mal y la pelota entró igual. Esto me parece que es fundamental. Sobre todo el respeto.”</strong></div><div align="justify"></div><p align="right"><span style="color:#000099;">Pablo A. Isi</span></p><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-89329916347072465402009-05-26T07:07:00.000-07:002009-08-13T04:40:51.382-07:00Rubén Tanucci. "En el fútbol infantil, de ninguna manera el mensaje debe ser el de ganar si o si."<div align="justify">Para el N° 2 de Prensa Verde (la publicación del club Villa Argentina), hicimos esta nota con el "Tano" Rubén Tanucci, ex jugador profesional de Independiente, Temperley, Estudiantes de La Plata y Huracán, entre otros clubes de nuestro país, Chile y Perú.<br />Tanucci es entrenador de divisiones inferiores del C.A.Independiente, y fue Ayudante de Campo de Pepé Santoro en sus tres interinatos al frente de la primera división. Aquí va entonces la nota que le hicimos en aquella oportunidad (hace unos meses), en la que el fútbol infantil fue el tema central.<br /><br /></div><img style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 320px; DISPLAY: block; HEIGHT: 213px; CURSOR: hand" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5340141093987888450" border="0" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEir3Dqut5AfQyShVnrwmi58EdRQMTP2UPJsuvp1rfsqE0pMGnEU35p0T6PJz3FEZ74qWASqItB3IsioIuXtWyqejDadS0-qWAtMsHjaw7uIO29qEZ64pTFCgDpK9r5S0MZkPP-I3MicjMw/s320/DSC_0184.JPG" /><br /><p align="justify">El 12 de octubre de 1986 a la tardecita, ya casi de noche, la puerta de chapa del Club Villa Argentina que da a la calle Salta se abrió lentamente y cuando la cabeza enrulada de Rubén Tanucci se asomó, una lluvia de aplausos y gritos eufóricos lo recibieron. Unas tres o cuatro horas antes, en cancha de Velez, a los 11 minutos del primer tiempo, el cabezazo del Tano había perforado el arco del Loco Gatti, marcando el primer gol de un Temperley que terminaría redondeando un marcador para la hazaña: 2 a 2 contra Boca, empatando a los 90’ con diez jugadores.<br />- Ese fue un partido muy especial - recuerda el Tano - estábamos en conflicto con el club y habíamos decidido no concentrar. Al mediodía comimos todos juntos en la casa de un compañero y de ahí nos fuimos a la cancha. Al lunes siguiente, después de aquel partido con Boca, todo el plantel quedó libre.”<br /><br /><strong>Prensa Verde</strong>: <em>Tu campaña como futbolista fue importante, no es fácil mantenerse jugando tantos años en la Primera división. ¿Cómo fue ese camino desde el baby fútbol en Villa Argentina hasta convertirte en futbolista profesional ?<br /></em><br /><strong>Rubén Tanucci:</strong> en esa época no había en el baby la organización que hay ahora. En Villa Argentina armábamos los equipos nosotros mismos y jugábamos en los campeonatos que organizaban los clubes. Recuerdo por ejemplo aquel equipo que salió campeón en el club Villa Ideal ganando esa famosa final contra ellos; ese equipo lo integraban pibes más grandes que yo: el Gabri, Tino Fontana, Jorge Foz, Ricardo Fornari, el Pato Restucia, Daniel García. Josecito Kusciuka, yo entré en el segundo tiempo. Esas experiencias son inolvidables, quedan marcadas para siempre. En ese partido, la cancha estaba llena, llevamos bombos, banderas, en el barrio fue todo un acontecimiento.<br />Entonces el baby fútbol no estaba organizado en Villa Argentina, los muchachos más grandes iban a Reconquista y yo fui con ellos, aunque no tenía edad para competir, jugaba en las prácticas y algunos partidos amistosos. Después me llevaron a Bouchard que participaba del Torneo Policial, ahí estaba Lito Mesina y me quedé a jugar.<br />A Independiente me llevó Adolfo López, que vivía frente al Club Villa Argentina en lo que era el Supermercado Cervantes. Fuimos a probarnos Marcelo “Sapo” Gallardo y yo y los dos quedamos. Los primeros dos años estuve con Gentilini que fue el que nos probó.<br />El último año de competencia en baby yo ya no lo jugué, estaba dedicado a la cancha de once en lo que hoy sería una prenovena.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>La manera de entrenar y competir habrá cambiado mucho desde entonces...<br /></em><strong>RT:</strong> Los entrenamientos de esas épocas eran totalmente diferentes a lo que son hoy. Yo entrenaba solamente los sábados a la mañana y los domingos jugábamos. Desde entonces no sólo el fútbol, sino toda la sociedad ha cambiado muchísimo. No había la locura que hay hoy.<br />Nosotros jugábamos, a veces ganábamos y a veces perdíamos, pero no tengo recuerdos de grandes presiones por los resultados. En el segundo año en el club ya arrancaban las divisiones inferiores que entrenaban dos veces por semana. En prenovena estaba Mura, de novena a séptima lo tuve a Zerrillo, en sexta estaba Hacha Brava Navarro, en quinta otra vez a Mura y en Cuarta a Pepé Santoro.<br /><br /><strong>PV:</strong><em> ¿Cómo incide la formación de los primeros años cuando uno llega a ser jugador profesional?<br /></em><strong>RT:</strong> Que alguien sea un jugador destacado en inferiores no garantiza que sea jugador de primera división por años. A partir de determinado momento empieza a pesar el profesionalismo que uno debe asumir, el cuidado personal que hoy es imprescindible, pero por sobre todas las cosas la personalidad.<br />La personalidad en el jugador de fútbol es fundamental, no es lo mismo jugar con treinta personas mirando que con diez mil, veinte mil o cincuenta mil; es muy distinto, hay que poder dominar esa presión. Esa es la importancia de la personalidad, que para mi es determinante.<br />El jugador de fútbol no es solamente la técnica, es un compendio de cosas, entre las que la personalidad y el profesionalismo (el cuidado personal), son muy importantes. Hoy no se pueden dar ventajas, en la alta competencia cualquier ventaja que se da puede ser indescontable.<br />Hay jugadores que sobresalen por su técnica, por su talento natural, pero así y todo deben cuidarse para no dar ventajas, y hay otros que necesitan estar diez puntos físicamente para equilibrar las posibilidades frente a ese talento. Esa es la realidad. El punto clave es ser inteligente y darte cuenta cuáles son tus limitaciones, eso es lo primero que tiene que saber un jugador de fútbol: cuáles son sus limitaciones, para enfocar los cañones ahí. Si vos sabés que técnicamente no sos un jugador dotado y que todo tu juego se basa en tu forma física, entonces extremá los cuidados en eso, en cuidar tu herra-mienta de laburo. Hay jugadores que no tenían una gran técnica natural y han sido grandes campeones. Han podido complementar con otros factores esas limitaciones que tenían en la técnica; con sacrificio, cuidando su forma física, con gran personalidad. Eso es lo que llamo inteligencia, saber aprovechar al máximo las virtudes que cada uno tiene y ser conciente de las limitaciones.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>Aquella costumbre de comer el puchero los domingos y salir a la cancha, quedó atrás hace rato...<br /></em><strong>RT:</strong> Es que antes, los dos platos de puchero y el litro de vino eran para todos, tus rivales también jugaban en esas condiciones, eso es lo que hay que ver. Hoy todo está tan profesionalizado que el que hace un desarreglo lo paga, lo paga en la cancha, lo paga con el puesto. El que afloja una, dos o tres semanas en el entrenamiento, pierde con el que está al lado, no llega más a recuperar esos escalones. Hoy los cuidados en la vida personal son decisivos.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>En base a esta super profesionalización de la que hablás, ¿ Cómo se trabaja en inferiores de un club como Independiente?</em><br /><strong>RT</strong>: En inferiores se trata de de dar los fundamentos técnicos necesarios, realizando los trabajos físicos que corresponden a cada edad, enseñar e ir incorporando los aspectos tácticos, pero por sobre todas las cosas nosotros hacemos muchas charlas con los pibes tratando de hacerles entender cual es la realidad del fútbol profesional. Llegar a primera no es algo automático que viene sólo con el pasar de los años, es sólo un porcentaje muy pequeño el que llega. Como decíamos antes, son muchos los factores que determinan quiénes si y quiénes no. No es lo mismo jugar en cuarta que en primera. El marco es totalmente diferente y ahí es donde juega un rol decisivo la personalidad.<br />En este sentido, hay una gran diferencia con otras épocas; vos antes tenías un Giusti que jugó diez años en la primera de Independiente, un Bochini que jugó veinte años en la primera de Independiente, entonces vos metes ahí un pibe y el pibe tiene donde apuntalarse porque tiene a su alrededor gente identificada con el club, ese respaldo es una gran ventaja. Eso ahora ya no existe, la gran mayoría de los jugadores no están más de dos o tres años en un club, entonces al pibe se le hace más difícil respaldarse en alguien, por lo tanto, la personalidad de ese chico tiene que ser mucho más fuerte todavía.<br /><br /><strong>PV:</strong><em> Los chicos llegan a los clubes con varios años de baby fútbol encima, ¿Cuáles son las ventajas y desventajas que les da esa experiencia para luego jugar en cancha de once?<br /></em><strong>RT:</strong> En realidad lo que se da en la mayor parte de los casos de los chicos que llegan a los clubes es que el chico juega simultáneamente en los dos lugares; juega al baby en el club del barrio y a la vez entrena y juega en cancha de once. Si un pibe de nueve, diez u once años se destaca mucho en el club de baby, seguramente alguien lo va a acercar a un club de AFA. Así ocurre generalmente. Ya a los trece o catorce años, al chico que nunca jugó en cancha de once le cuesta mucho porque los otros ya le sacaron una gran ventaja. El que viene de cuatro o cinco años de preparación en el fútbol campo hace diferencia; pensemos un momento en las enormes diferencias de las dimensiones de la cancha, de la pelota con que se juega, en el baby la pelota es más chica y casi no pica, en el fútbol campo hay una pelota N° 5 que para los chicos que vienen del baby tiene un conejo dentro, pica para todos lados. El baby sirve mucho para los pibes, pero tiene sus cosas negativas y sus cosas positivas. El club del barrio es el lugar donde el pibe se siente cómodo, es el lugar donde crece, es parte de su formación. Hay cosas que son muy positivas como el desarrollo de la técnica, el manejo de la pelota que en cancha grande lo tenés en menor proporción.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>¿Los espacios reducidos con los que tanto se insiste en infantiles tienen que ver con esos aspectos positivos?<br /></em><strong>RT:</strong> Claro. Ahí es muy importante el aporte que el baby fútbol hace. En la primera etapa de nuestro trabajo en Independiente habíamos hecho un estudio con Magán y el profe Anselmi, cronometramos el tiempo en que los chicos estaban en contacto con la pelota en los partidos de liga en cancha de once. En los 50 minutos que duraba el encuentro, el que más tuvo la pelota fue el enganche que la tuvo un minuto y cinco segundos; un marcador de punta, por ejemplo, la tenía siete segundos, y así eran la mayoría de los tiempos. Entonces la conclusión es que si vos en el trabajo semanal no trabajás todo el tiempo con pelota, nunca vas a poder perfeccionar la técnica. En el baby el contacto del jugador con la pelota es mucho mayor, la diferencia es abismal. Este es uno de los mayores beneficios del baby fútbol para la formación del chico, que tiene durante mucho más tiempo la pelota en sus pies y esto es vital para el mejoramiento de la técnica.<br />Otro aspecto a considerar es que las dimensiones de la cancha y de los arcos son iguales para un chiquito de ocho años que para un profesional. Lamentablemente esto es así y modificarlo es muy complicado porque está muy instalado en el fútbol local.<br />En Europa, esto no es así, hay distintas dimensiones del campo de juego y de los arcos, las categorías más chicas juegan a lo ancho de la cancha y los arcos tienen medidas proporcionales, luego hay otras medidas intermedias hasta llegar en las edades de trece o catorce años a las normales. De la otra manera, se pierde el sentido mismo del juego, porque hasta los mismos entrenadores le piden a los delanteros que pateen alto: si el arquero mide 1,20 m y el arco 2,20, ¿Cómo hace el chico para saltar y atajarla ahí arriba?<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>Si la presión de los padres en los clubes de barrio es complicada para los chicos, me imagino lo que será en la competencia de inferiores de AFA.<br /></em><strong>RT:</strong> En el fútbol actual es tanta la locura... Diferenciar el fútbol de la manera en que la sociedad está viviendo en general es muy difícil, hoy la violencia está instalada, se putean en los autos, en los colectivos, etc, entonces ¿Cómo desligas esa agresividad del chico que va a jugar a la pelota o del padre que lleva el chico ahí? En ese sentido yo tengo experiencias de los dos tipos; hubo casos en que después de hablar con padres complicados, éstos pudieron darse cuenta del daño que le estaban causando a su hijo y modificaron su actitud y hubo otros que pese a ser instados en más de una ocasión, terminaron queriéndole pegar a un técnico o a un rival. O sea, el intento hay que hacerlo. pero hasta ahí llegás, más no podés.<br />Por eso pienso que el club debe tener normas muy claras y exponerlas de entrada: esto es así y el que saca los pies del plato que elija otro club. Esta es la línea que el club baja y todo se va a manejar de acuerdo a esto. Entonces, con todas las cartas sobre la mesa desde el comienzo tenés toda la autoridad del mundo para reclamar de los padres que respeten ese compromiso asumido. Desde el club deben promoverse charlas de este tipo, la educación debe ser constante hacia chicos y padres.<br /><br /><strong>PV.</strong> <em>¿Qué importancia deberían darle los clubes de barrio a la capacitación de los directores técnicos para el fútbol infantil?</em><br /><strong>RT:</strong> Es importantísimo. Eso debería estar legislado, normado por FADI. Todos aquellos que laburan en el baby fútbol deberían tener el título de director técnico. Yo doy clases en la Escuela de Técnicos y normalmente lo que tenés como alumnos es gente ligada al baby fútbol de los clubes de barrio. La capacitación es fundamental porque en el curso no sólo aprendés táctica o como mejorar la técnica a través del entrenamiento, en el curso se forman docentes, gente que va a enseñar y por eso hay materias como psicología, que son tremendamente importantes cuando uno le está enseñando a chicos de tan corta edad. Para ser entrenador uno debe capacitarse permanentemente y tiene que hacerlo a conciencia, sabiendo la responsabilidad que implica estar al frente de un grupo. Por eso yo pienso que el FADI, u otras ligas infantiles, deberían reglamentar que los técnicos que trabajan con los chicos tienen que ser profesionales recibidos. Cuando yo hice el curso había jugado varios años en primera y era ya un ex jugador, sin embargo, cuando terminé el curso me di cuenta que si me hubiera puesto a trabajar con algunos chicos hubiera cometido muchísimos errores. Hay que ser muy responsable cuando una forma chicos, no es lo mismo jugar que dirigir.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>Esa capacitación seguramente aporta mucho también para entender que en el fútbol, y mucho menos en el fútbol infantil, el resultado no es cuestión de vida o muerte.<br /></em><strong>RT:</strong> Ese es otro aspecto de gran importancia. Si vos llegás a un club de barrio tratando de incentivar al chico a que gane todos los partidos estás muerto. Sí sostengo que dentro de la formación del pibe, debe hacerse sentir que entre ganar y perder hay diferencias. Ganar y perder no es lo mismo, pero de ninguna manera el mensaje debe ser el de “ganar si o si”. De esa manera lo único que se logra es sobreexigir a un pibe que no está capacitado para soportar esa presión.<br />Esto no puede equipararse al fútbol profesional, donde el deportista, ya formado, sabe que vive de los resultados. En el pibe la diferencia debe mostrarse porque entra a la competencia con la intención de ganar y al chico tiene que interesarle ganar, pero para ello tiene que saber que puede ganar, empatar o perder y que si pierde no es el fin del mundo. Dentro de una derrota hay siempre algo positivo que te sirve para mejorar: la derrota es el comienzo de cualquier mejora. También por esto, el respeto por quien conduce el grupo es fundamental.<br /><br /><strong>PV</strong>: <em>Más allá del trabajo en el entrenamiento o en la competencia , otro aspecto es la educación del chico para que se integre a un grupo de manera armónica...<br /></em><strong>RT:</strong>La disciplina, dentro y fuera de la cancha, es parte de la educación que vos le das al pibe. El respeto hacia el compañero, hacia el técnico, hacia el padre o hacia el árbitro es fundamental. Es una parte muy importante de la formación que se debe dar, y para esto, una cuestión decisiva es que si el tipo que está afuera no putea al árbitro, no se pelea con el técnico, no lo vuelve loco al pibe presionándolo para que haga las cosas de una determinada manera, el mensaje que llega es de tranquilidad hacia el chico que está jugando. Sino, lo que le llega al chico es que cuando las cosas no te salen como querés, vos te tenés que pelear con el compañero o con el rival. Los roles no deben confundirse nunca entre los padres y el entrenador. Siempre hay momentos en los que uno es el amigo y otros en los que debe imponer respeto. Con los chicos, hay que tener charlas permanentemente, cualquiera sea la edad que tengan. Los conductores de los grupos desempeñan un rol de educadores y esa educación debe dirigirse no sólo hacia el chico sino también hacia los padres. El problema de la presión que los padres le meten a los chicos es muy nociva para ellos, pero esto tiene mucho que ver con la persona que conduce. En el baby fútbol esto es un poco más difícil porque generalmente la gente que conduce los grupos de chicos tiene con los padres una relación mucho más cercana, se comparte el mate en la tribuna, o la gaseosa después del partido, hay un trato muy familiar y muchas veces de amistad; esto a veces, es una gran dificultad.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>Lo que pasa en los clubes de barrio es que los “directores técnicos” son los que se animan a serlo. Dedican tiempo y muchas veces dinero con la mejor voluntad, pero no siempre son los indicados para entrenar chicos</em>. <strong><br />RT:</strong> Todo tiene sus pro y sus contras. Teniendo a gente capacitada al frente de los grupos, vos te asegurás que la formación que el chico recibe es la adecuada. El técnico recibido estudió técnicas de entrenamiento, prepa-ración física, psicología, pedagogía y didáctica, recibe un formación integral que lo prepara para enseñar. Eso es fundamental para luego conducir grupos de chicos, sabés a qué edades se les puede enseñar determinadas cosas, qué cosas podés hacer y qué no.<br />La contra, es que muchos clubes no pueden pagar un director técnico capacitado, entonces se termina poniendo al padre de un chico que se arrima al club porque juega el hijo, y encima algunos de esos padres jamás jugaron al fútbol. Ese pare podrá tener la mejor voluntad, pero la responsabilidad es del club. Hay gente que va buscando logros personales y llevan categorías enteras de club en club y la dirigen. Después, a fin de año se pelean con los dirigentes y se llevan a todos los chicos a otro club. Entonces, ¿De qué le sirve eso al club? Absolutamente de nada.<br />Cuando yo volví de Chile después de casi diez años de jugar allá, traje a mi hijo a jugar a Villa Argentina, jamás se me cruzó por la cabeza llevarlo a otro lado porque este es mi club. Al año siguiente, el entrenador se fue a otro lado y se llevó a todo el equipo, quedaron mi hijo y otro más. Eso no puede pasar en un club de barrio. Es necesario afirmarse en la idea de crear identidad, que los entrenadores sean del club y formen chicos que crezcan identificándose con el club. ¿De que te sirve traer a un tipo que cuando algo no le gusta o discute con algún directivo se lleva todo a otro club y te vacía una categoría? Eso no sirve de nada, causa un daño muy grave. A los chicos hay que inculcarles el amor por el club, no sólo por el equipo que integran sino por el club. Ese es el camino que hay que proponerse, porque esos son los pibes que el día de mañana van a bancar al club, van a seguir el proyecto del club. Villa Argentina debe tratar de que los chicos se identifiquen con el club porque dentro de veinte años esos chicos van a estar al frente del club continuando con la tarea que hoy están haciendo ustedes.<br /><br /><strong>PV.</strong> <em>Evidentemente, el rol que cumple un Club de barrio es mucho más trascendente que su participación en las competencias deportivas</em>.<br /><strong>RT:</strong> Por supuesto, el trabajo de clubes como el nuestro es más complejo, o debería serlo. Deberían intentarse cubrirse incluso algunas falencias que el chico padezca en su habitat, falencias alimentarias, sanitarias, de vestimenta y calzado. Claro que no es nada fácil, pero no es imposible. Muchos chicos tienen en las horas que pasan en el club el mejor momento del día. En el club pueden aislarse de situaciones que lo acompañan a lo largo del día; carencias materiales y afectivas, situaciones de violencia o alta agresividad en el seno familiar, etc. Entonces ¿Cómo puede ocurrir que haya entrenadores que maltratan a ese pibe creyendo que lo pueden hacer jugar mejor de esa manera? ¿Cómo es posible eso, cómo no se tiene en cuenta la realidad en la que vive ese chiquito a la hora de tratarlo? Por eso es necesario tener una formación que permita aplicar los conocimientos a esas situaciones, para no agregar a la vida de esos chicos mayores cargas de angustia de las que ya traen.<br /><br /><strong>PV:</strong> <em>¿Cómo lograr el equilibrio entre la participación en la competencia y el rol social de los clubes?<br /></em><strong>RT</strong>: Eso es lo más difícil. En los clubes de barrio, como ya lo dijimos antes, lo más importante no deben ser los resultados deportivos, el enfoque debe ser otro, lo primordial es que los pibes se identifiquen con la institución, que la sientan como propia, sacarlos de la calle y darles un lugar de contención.<br />Formar una mentalidad que intente ganar está bien, pero los resultados no deben condicionar otros aspectos de mayor importancia. El mensaje del club debe ser claro y ese mensaje debe dársele primero a los padres que creen que hay que ganar o ganar. El pibe lo que quiere es jugar a la pelota y a los pibes hay que hacerlos jugar. Los que se preocupan por si el club está en la A, en la B o en la E son los padres, no los chicos. Los chicos sólo asumen esa preocupación porque les llega de los mayores. Yo pienso que un chico que viene y entrena toda la semana, el sábado tiene que jugar. ¿Cómo incentivás a un pibe para que mejore algún aspecto si después le hacés sentir que no lo tenés en cuenta? Vos lo tenés toda la semana entrenando y el sábado lo ponés dos minutos. El daño que puede hacerse es muy grande.<br />Estamos hablando acá de clubes de barrio, en los que el factor social debe prevalecer. Cuando hablamos de Boca, River o Independiente, estamos hablando de otra cosa, porque el objetivo en esos clubes es formar futuros profesionales, eso es lo que prevalece. Allí los entrenadores trabajan con la premisa de que esos pibes sean en el futuro jugadores de primera división. La cantidad de chicos que llegan es muy grande y los clubes optan por los mejores, vos estás preparando pibes para la alta competencia, y los factores en juego son totalmente diferentes, no pueden equipararse con los clubes de barrio, en los que el aspecto social es lo primordial, es su razón de ser.<br />Los chicos no juegan al fútbol pensando en vivir de eso, eso en todo caso, empiezan a vislumbrarlo cuando ya están en una etapa más avanzada de su formación y en un nivel de competencia de alta exigencia. Los que a edades tempranas piensan en el fútbol como salida económica son los padres, y ese es el origen de las exigencias desmedidas.<br />Por eso es tan importante que el club ponga al frente de los grupos gente conciente, que lleve adelante esas políticas. Yo he visto técnicos en el baby fútbol que han puesto pibes faltando tres minutos y al minuto lo sacaban, eso es terrible, es para decirle al chico ¿Viste que entraste? El daño psicológico que le hacen a ese chico es muchas veces irreparable.<br />Para todo esto es importante el curso de técnico, brinda una formación básica sobre la que después uno debe seguir desarrollándose. Uno vive cometiendo errores, pero el problema es que a veces, creyendo hacer bien las cosas, se pueden cometer horrores, por desconocimiento o falta de capacitación. Esos horrores van a dañar a un chico en formación y eso es algo demasiado valioso. Por lo tanto, hay que prepararse responsablemente, hay que capacitarse permanentemente. los aspectos psicológicos, de entrenamiento físico, son muy importantes y no pueden dejarse de lado. Cuando uno está frente a un grupo de chicos está haciendo docencia. Estás formando pibes, nada menos, y eso es lo que hace que todo sea diferente.</p><p align="justify"><span style="color:#000099;">Nota realizada por Carlos Romano y Pablo Isi para Prensa Verde (Noviembre 2008)</span> </p><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6217364682638062514.post-6532365021273267732009-05-15T06:01:00.000-07:002009-08-13T04:39:08.816-07:00Osvaldo Soriano: "Gallardo Pérez, referí."<div align="justify"><img style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 320px; DISPLAY: block; HEIGHT: 222px; CURSOR: hand" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5336076008303921442" border="0" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmZoY1efQmk1xPY85-WmOfq69tAm8gdEXvn4X76x72DoURmYPyrfJeCerwl-PHpJy1F2lbJMdyQ10_RBeUCY3ey12K9g_p8my4RYi5ns7RGvlPS6spyhLaI0AEM7eviteQgjoxp3AsowM/s320/535311292_d3078b9863.jpg" /><br /><a href="http://www.literatura.org/Soriano/Soriano.html"><strong>Osvaldo Soriano</strong> </a>transpiraba fútbol. Por donde se lo mire y en cuánto texto suyo se lea, el fútbol aparece con el olor del potrero más genuino; a veces asomado tras cualquier hendija; otras, como protagonista excluyente del relato, siempre delicioso, siempre pasional.<br />Al desgarro indescriptible que vivió en los años de dictadura militar, en los que debió partir al exilio, Soriano sumaba el dolor no menor, de sufrir océano por medio, las desventuras de su querido San Lorenzo de Almagro: <em>" En el fútbol no se elige un ganador. Ser de San Lorenzo es un interminable sobresalto, una carga que se arrastra en la vida con tanto desconcierto y orgullo como la de ser argentino."</em><br />Osvaldo Soriano nació en Mar del Plata en 1943, y murió en Buenos Aires un 29 de Enero de 1997.<br />Para los lectores de <span style="color:#006600;"><strong>LUZ VERDE</strong></span>, subimos este texto maravilloso, donde el protagonista es el futbol y juega un papel central la figura más castigada de quienes están dentro de un cancha: el referí.<br /><br /><p align="justify"><span style="font-size:130%;"><strong>Gallardo Pérez, referí. </strong>(*)</span><br />Cuando yo jugaba al fútbol, hace más de veinte años, en la Patagonia, el referí era el verdadero protagonista del partido. Si el equipo local ganaba, le regalaban una damajuana de vino de Río Negro; si perdía, lo metían preso. Claro que lo más frecuente era lo de la damajuana, porque ni el referí, ni los jugadores visitantes tenían vocación de suicidas.<br />Había, en aquel tiempo, un club invencible en su cancha: Barda del Medio. El pueblo no tenía más de trescientos o cuatrocientos habitantes. Estaba enclavado en las dunas, con una calle central de cien metros y, más allá, los ranchos de adobe, como en el far-west. A orillas del río Limay estaba la cancha, rodeada por un alambre tejido y una tribuna de madera para cincuenta personas. Eran las "preferenciales", las de los comerciantes, los funcionarios y los curas. Los otros veían el partido subidos a los techos de los Ford A o a las cajas de los camiones de la empresa que estaba construyendo la represa.<br />Todos nosotros estábamos bajo el influjo del maravilloso estilo del Brasil campeón del mundo, pero nadie lo había visto jugar nunca: la televisión todavía no había llegado a esas provincias y todo lo conocíamos por la radio, por esas voces lejanas y vibrantes que narraban los partidos. Y también por los diarios, que llegaban con cuatro días de atraso, pero traían la foto de Pelé, el dibujo de cómo se hacía un cuatro-dos-cuatro y la noticia de la catástrofe argentina en Suecia.<br />Yo jugaba en Confluencia, un club de Cipolletti, pueblo fundado a principios de siglo por un ingeniero italiano que tenía un monumento en la avenida principal. Todavía las calles no habían sido pavimentadas y para ir al fútbol los domingos de lluvia había que conseguir camiones con ruedas pantaneras.<br />Confluencia nunca había llegado más arriba del sexto puesto, pero a veces le ganábamos al campeón. Muy de vez en cuando, pero le dábamos un susto.<br />Ese día teníamos que jugar en la cancha de Barda del Medio y nunca nadie había ganado allí. Los equipos "grandes" descontaban de sus expectativas los dos puntos del partido que les tocaba jugar en ese lugar infernal. Los muchachos de Barda del Medio, parientes de indios y chilenos clandestinos, eran tan malos como nosotros suponíamos que eran los holandeses o los suecos. Eso sí, pegaban como si estuvieran en la guerra. Para ellos, que perdían siempre por goleada como visitantes, era impensable perder en su propia casa.<br />El año anterior les habíamos ganado en nuestra cancha cuatro a cero y perdimos en la de ellos por dos a cero con un penal y piadoso gol en contra de Gómez nuestro marcador lateral derecho. Es que nadie se animaba a jugarles de igual a igual porque circulaban leyendas terribles sobre la suerte de los pocos que se habían animado a hacerles un gol en su reducto.<br />Entonces, todos los equipos que iban a jugar a Barda del Medio aprovechaban para dar licencias a sus mejores jugadores y probar a algún pibe que apuntaba bien en las divisiones inferiores. Total, el partido estaba perdido de antemano.<br />El referí llegaba temprano, almorzaba gratis y luego expulsaba al mejor de los visitantes y cobraba un penal antes de que pasara la primera hora y la tribuna empezara a ponerse nerviosa. Después iba a buscar la damajuana de vino y en una de ésas, si la cosa había terminado en goleada, se quedaba para el baile.<br />Ese día inolvidable, nosotros salimos temprano y llevamos un equipo que nos había costado mucho armar porque nadie quería ir a arriesgar las piernas por nada. Yo era muy joven y recién debutaba en primera y quería ganarme el puesto de centro delantero con olfato para el gol. Los otros eran muchachos resignados que iban para quedarse en el baile y buscar una aventura con las pibas de las chacras.<br />Después del masaje con aceite verde, cuando ya estábamos vestidos con las desteñidas camisetas celestes, el referí Gallardo Pérez, hombre severo y de pésima vista, vino al vestuario a confirmar que todo estuviera en orden y a decirnos que no intentáramos hacernos los vivos con el equipo local. Le faltaban dos dientes y hablaba a tropezones, confundiendo lo que decía con lo quería decir.<br />Le dijimos -y éramos sinceros- que todo estaba bien y que tratara, a cambio, de que no nos arruinaran las piernas. Gallardo Pérez prometió que se lo diría al capitán de ellos, Sergio Giovanelli, un veterano zaguero central que tenía mal carácter y pateaba como un burro.<br />Ni bien saludamos al público que nos abucheaba, el defensa Giovanelli se me acercó y me dijo: "Guarda, pibe, no te hagas el piola porque te cuelgo de un árbol". Miré detrás de los arcos y allí estaban, pelados por el viento, los siniestros sauces donde alguna vez habían dejado colgado a algún referí idealista. Le dije que no se preocupara y lo traté de "señor". Giovanelli, que tenía un párpado caído surcado por una cicatriz, hizo un gesto de aprobación y fue a hacerles la misma advertencia a los otros delanteros.<br />La primera media hora de juego fue más o menos tranquila. Empezaron a dominarnos pero tiraban desde lejos y nuestro arquero, el Cacho Osorio, no podía dejarla pasar porque habría sido demasiado escandaloso y nos habrían linchado igual, pero por cobardes. Después dieron un tiro en un poste y el Flaco Ramallo sacó varias pelotas al córner para que ellos vinieran a hacer su gol de cabeza.<br />Pero ese día, por desgracia, estaban sin puntería y sin suerte. Todos hicimos lo posible para meter la pelota en nuestro arco, pero no había caso. Si el Cacho Osorio la dejaba picando en el área, ellos la tiraban afuera. Si nuestros defensores se caían, ellos la tiraban a las nubes o a las manos del arquero.<br />Al fin, harto de esperar y cada vez más nervioso, Gallardo Pérez expulsó a dos de los nuestros y les dio dos penales. El primero salió por encima del travesaño. El segundo dio en un poste. Ese día, como dijo en voz alta el propio referí, no le hacían un gol ni al arco iris.<br />El problema parecía insoluble y la tribuna estaba caldeada. Nos insultaban y hasta decían que jugábamos sucio. Al promediar el segundo tiempo empezaron a tirar cascotes.<br />El escándalo se precipitó a cinco o seis minutos del final. El Flaco Ramallo, cansado de que lo trataran de maricón, rechazó una pelota muy alta y yo piqué detrás de Giovanelli, que retrocedía arrastrando los talones. Saltamos juntos y en el afán de darme un codazo pifió la pelota y se cayó. La tribuna se quedó en silencio, un vació que me calaba los huesos mientras me llevaba la pelota para el arco de ellos, solo como un fraile español.<br />El arquerito de Barda del Medio no entendía nada. No sólo no podían hacer un gol sino que, además, se le venía encima un tipo que se perfilaba para la izquierda, como abriendo un ángulo de tiro. Entonces salió a taparme a la desesperada, consciente de que si no me paraba no habría noche de baile para él y tal vez hasta tendría que hacerme compañía en el árbol de fama siniestra. Él hizo lo que pudo y yo lo que no debía. Era alto, narigón, de pelo duro, y tenía una camiseta amarilla que la madre le había lavado la noche anterior. Me amagó con la cintura, abrió los brazos y se infló como un erizo para taparme mejor el arco. Entonces vi, con la insensatez de la adolescencia, que tenía las piernas arqueadas como bananas y me olvidé de Giovanelli y de Gallardo Pérez y vislumbré la gloria.<br />Le amagué una gambeta y toqué la pelota de zurda, cortita y suave, con el empeine del botín, como para que pasara por ese paréntesis que se le abría abajo de las rodillas. El narigón se ilusionó con el driblin y se tiró de cabeza, aparatoso, seguro de haber salvado el honor y el baile de Barda del Medio. Pero la pelota le pasó entre los tobillos como una gota de agua que se escurre entre los dedos.<br />Antes de ir a recibirla a su espalda le vi la cara de espanto, sentí lo que debe ser el silencio helado de los patíbulos. Después, como quien desafía al mundo, le pegué fuerte, de punta, y fui a festejar. Corrí más de cincuenta metros con los brazos en alto y ninguno de mis compañeros vino a felicitarme. Nadie se me acercó mientras me dejaba caer de rodillas, mirando al cielo, como hacía Pelé en las fotos de El Gráfico.<br />No sé si el referí Gallardo Pérez alcanzó a convalidar el gol porque era tanta la gente que invadía la cancha y empezaba a pegarnos, que todo se volvió de pronto muy confuso. A mí me dieron en la cabeza con la valija del masajista, que era de madera, y cuando se abrió todos los frascos se desparramaron por el suelo y la gente los levantaba para machucarnos la cabeza.<br />Los cinco o seis policías del destacamento de Barda del Medio llegaron como a la media hora, cuando ya teníamos los huesos molidos y Gallardo Pérez estaba en calzoncillos envuelto en la red que habían arrancado de uno de los arcos.<br />Nos llevaron a la comisaría. A nosotros y al referí Gallardo Pérez. El comisario, un morocho aindiado, de pelo engominado y cara colorada, nos hizo un discurso sobre el orden público y el espíritu deportivo. Nos trató de boludos irresponsables y ordenó que nos llevaran a cortar los yuyos del campo vecino.<br />Mientras anochecía tuvimos que arrancar el pasto con las manos, casi desnudos, mientras los indignados vecinos de Barda del Medio nos espiaban por encima de la cerca y nos tiraban más piedras y hasta alguna botella vacía.<br />No recuerdo si nos dieron algo de comer, pero nos metieron a todos amontonados en dos calabozos y al referí Gallardo Pérez, que parecía un pollo deshuesado, hubo que atenderlo por hematomas, calambres y un ataque de asma. Deliraba y en su delirio insensato confundía esa cancha con otra, ese partido con otro, ese gol con el que le había costado los dos dientes de arriba.<br />Al amanecer, cuando nos deportaron en un ómnibus destartalado y sin vidrios, bajo la lluvia de cascotes, nuestro arquero, el Cacho Osorio, se acercó a decirme que a él nunca le habrían hecho un gol así. "Se comió el amague, el pelotudo", me dijo y se quedó un rato agachado, moviendo los brazos, mostrándome cómo se hacía para evitar ese gol.<br />Cuando se despertó, a mitad de camino, Gallardo Pérez me reconoció y me preguntó cómo me llamaba. Seguía en calzoncillos pero tenía el silbato colgando del cuello como una medalla.<br />-No se cruce más en mi vida -me dijo, y la saliva le asomaba entre las comisuras de los labios-. Si lo vuelvo a encontrar en una cancha lo voy a arruinar, se lo aseguro.<br />-¿Cobró el gol? -le pregunté. -¡Claro que lo cobré! -dijo, indignado, y parecía que iba a ahogarse- ¿Por quién me toma? Usted es un pendejo fanfarrón, pero eso fue un golazo y yo soy un tipo derecho.<br />-Gracias -le dije y le tendí la mano. No me hizo caso y se señaló los dientes que le faltaban.<br />-¿Ve? -me dijo-. Esto fue un gol de Sívori de orsai. Ahora fíjese dónde está él y dónde estoy yo. A Dios no le gusta el fútbol, pibe. Por eso este país anda así, como la mierda.<br /><br /><strong><em>Osvaldo Soriano.</em></strong><br /><br />(*) El texto está incluído en "Cuentos de Fútbol argentino", con prólogo y selección del Negro Fontanarrosa. </p></div><div class="blogger-post-footer">Leer Nota completa.</div>Unknownnoreply@blogger.com1